martes, 11 de julio de 2023

El poeta y dramaturgo, Luis de Góngora y Argote

  

Tal día como hoy 11 de julio de 1561, nace en Córdoba, el poeta español, Luis de Góngora y Argote

Luis de Góngora, fue un poeta y dramaturgo español del Siglo de Oro máximo exponente de la corriente conocida como culteranismo o gongorismo. Reconocido por su estilo ornamentado y enrevesado, que a menudo fue criticado por sus contemporáneos. No obstante, Góngora está considerado como uno de los poetas españoles más importantes de su tiempo.

Hijo de Francisco de Argote, licenciado en Salamanca, bibliófilo y humanista que cuidó de su preparación. Poseía una copiosa biblioteca calificada por el erudito Díaz de Ribas como la "gran librería", y de Leonor de Góngora, de noble familia.

Influyó en su educación también su tío materno, Francisco de Góngora, racionero de la catedral de Córdoba, el cual cedió a su sobrino los beneficios eclesiásticos que tenía en diversas localidades, asegurándole así un modesto bienestar económico, y poder estudiar en la Universidad de Salamanca, donde se matriculó de Cánones desde el año 1576 hasta el curso 79-80.

Góngora fue racionero de la Catedral de Córdoba en 1585. Parece ser que en su juventud conoció aventuras amorosas y aficiones como el juego, según por la amonestación que en 1588 recibe del Obispo. Le gustaban además las corridas de toros,prohibidas a los clérigos.

Regresó a Córdoba entre 1610 y 1611 escribió la Oda a la toma de Larache, el Polifemo en 1613 y el Polifemo y las Soledades, sus obras más conocidas entre 1612 y 1614.

A través del duque de Lerma, por entonces ministro del Rey, en 1617, se le designó capellán real de Felipe III, para lo cual tuvo que ordenarse sacerdote a la edad de cincuenta y cinco años. 

La muerte de su protector y amigo, el duque de Lerma, al cual le dedicó su Panegírico, y su conocida afición al juego llevaron a Góngora a una grave situación económica, por lo que tuvo que ganarse el favor del siempre omnipotente conde-duque de Olivares, ministro del Rey.

Dos de sus grandes enemigos fueron Quevedo y Lope de Vega, aunque también tuvo grandes admiradores como el conde de Villamediana o los humanistas Pedro de Valencia y fray Hortensio de Paravicino. 

El motivo de la enemistad  radicaba  en el carácter innovador de su poesía, cabeza del estilo literario conocido por culteranismo, busca la oscuridad a través de la acumulación de referencias mitológicas, metáforas, hipérboles, juegos de palabras, cultismos y todo tipo de recursos literarios en una lengua de sintaxis complicada, llena de hipérbatos y largas perífrasis.

Su obra cultista se inició en 1610 con la "Oda a la toma de Larache" y continuó con la fábula de "Polifemo y Galatea", "Las Soledades"  y el Panegírico al duque de Lerma en 1617. Su poesía fue revalorizada por la generación poética de 1927.

En 1627 volvió a Córdoba, aquejado de "arteriosclerosis prematura", enfermedad que llevaba padeciendo largo tiempo.Luis de Góngora murió el 23 de mayo de ese mismo año en su ciudad natal. No llegó a ver impresas más que algunas poesías menores en cancioneros.



No hay comentarios:

Publicar un comentario