Ana fue una noble alemana, cuarta esposa del rey aunque el matrimonio nunca se consumó y no fue coronada reina consorte, recibiendo “un arreglo generoso”.
Como los novios no se conocían, se encargó al artista Hans Holbein un retrato de ella y aunque Enrique le pidió que fuera preciso en su pintura, al parecer no fue así.
Según los cánones de la época, Ana era realmente fea: alta, corpulenta y con su rostro poco agraciado, en el cual mostraba además cicatrices de haber padecido la viruela, por lo que Enrique sintió que había sido engañado, ya que todos le habían alabado sus atractivos, instando a Cromwell para que encontrase “alguna forma legal” de evitar el matrimonio.
Enrique valoraba la educación y la formación cultural en una mujer, pero Ana carecía también de ambas, siendo hábil en labores de aguja e hilo y en los juegos de cartas, sabiendo leer y escribir correctamente, pero – por desgracia - sólo en alemán.
A pesar de los recelos del rey, acabaron casándose el 6 de enero de 1540, aunque Enrique confió a Cromwell al día siguiente, que no había consumado el matrimonio, porque; "Antes no me gustaba mucho, pero ahora me gusta mucho menos...".
El matrimonio se anuló en julio de 1540 y Ana fue compensada con diversas propiedades y - por gratitud al no haberse negado a la anulación - Enrique decretó que se le diera precedencia ante todas las mujeres del reino salvo su propia esposa e hijas.
Ana no abandonaría jamás Inglaterra y al final de sus días se reconvirtió al catolicismo siguiendo los consejos de la hija de su esposo, María Tudor.
Pero la vida amorosa de Enrique fue tumultuosa. Su primer matrimonio con Catalina de Aragón, hija menor de los Reyes Católicos, fue anulado, con el argumento de que ella no podía concebir hijos varones y él deseaba desposar a Ana Bolena.
Ana Bolena, sería nombrada reina, pero acusada y apresada por adulterio e incesto, fue decapitada.
La tercera, Juana Seymour era dama de compañía de Ana Bolena. y falleció a los quince años de edad.
Su cuarta esposa fue Ana de Cléveris, a quien se refiere la efeméride de hoy
La quinta, Catalina Howard, llamada "la rosa sin espina", era prima de Ana Bolena y tras anular el matrimonio, fue también decapitada por adúltera en la Torre de Londres.
Por último,Catalina Parr, su sexta y última esposa, fue la única que lo sobrevivió.
Contraer matrimonio con el rey inglés fue, por lo que vemos, una actividad bastante peligrosa.
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