miércoles, 21 de febrero de 2024

Muere envenenado Británico, el heredero del imperio romano


Tal día como hoy, 11 de febrero de 55 d.C., murió envenenado Británico, heredero del imperio de Roma. Su padre, Claudio, lo había designado su sucesor, al mes de ser nombrado emperador, después del asesinato de Calígula.

Tiberio Claudio César Británico era hijo de Claudio, que ejerció como emperador romano desde el 41 hasta el 54 d.C., y de Mesalina. Muy pronto adquirió el cognomen de su padre —que avalaba su pertenencia a la familia gobernante—, un gesto más que le designaba, como futuro César.

Británico, era en realidad un título que recibió Claudio del senado, por la conquista de las islas, y que el gobernante convirtió, en nombre para su heredero. La historia cambió su curso, cuando la madre de Británico, se separó del emperador y empezó a conspirar para alcanzar el trono con su nuevo marido, Cayo Silio.

Estos juegos de poder, no beneficiaron a Británico, que empezó a ser cuestionado como sucesor, por las intrigas de Mesalina.

Claudio también volvió a casarse, y lo hizo con Agripina. Una de sus primeras decisiones después del enlace, fue adoptar al hijo de su nueva esposa, Nerón.

En la antigua Roma, un hijo adoptivo tenía los mismos derechos que uno natural. La diferencia de edad, también jugaba a favor de Nerón; a Británico todavía le faltaban unos cuantos años, para ser mayor de edad.

Mesalina fue ejecutada por su traición y la posición de Británico, se debilitó aún más. A partir de este momento, son las crónicas de Tácito las que relatan cómo fue la temprana muerte, del heredero del imperio. Claudio habría intentado en sus últimos años, apartar a Nerón del trono, pero Agripina consiguió su objetivo, y a la muerte del emperador la corona de laurel, fue para Nerón. 

Británico sobrevivió unos meses, en el marco del Imperio gobernado por su hermanastro, aunque fue totalmente ignorado, pero su madrastra Agripina intrigó inmediatamente, para asesinarle. A principios del año  55, el liberto Palas, uno de los favoritos de Agripina, fue despedido de su puesto en el Tesoro, puesto que había ostentado, durante el reinado de Claudio.

Según Tácito, Agripina reaccionó violentamente ante esta acción de Nerón. Agripina declaró que se arrepentía de haber colocado a Nerón en el trono y se alió con Británico para que cuando este, alcanzara la mayoría de edad, asumiera el trono. Amenazó a Nerón con ir junto a Británico, al campamento de la guardia pretoriana y declarar que había asesinado a Claudio y que el heredero legítimo era Británico, amenaza que el emperador, interpretó como vana.

Tácito escribe, que Nerón intentó en numerosas ocasiones, socavar la imagen pública de Británico. Uno de estos intentos, fue cuando Nerón pidió a Británico, que cantara en una fiesta de borrachos, unos meses antes de su 14.º cumpleaños. 

Británico sin embargo, no solo evitó la humillación, sino que despertó la simpatía entre los presentes, debido a que entonó un poema, en el que relataba cómo había sido dejado de lado por Nerón. Según Tácito, unos pocos días antes de su muerte, Británico fue agredido, sexualmente, por Nerón.​

Según Tácito, Nerón contrató para envenenar a Británico a Locusta, la misma envenenadora que había asesinado a Claudio. La primera dosis falló y Nerón decidió tirarla, en una noche ventosa. Británico fue envenenado, durante una cena, a la que asistieron, su hermana Octavia, su madrastra Agripina y otros notables.

El asesino, aprovechó para envenenar la comida de Británico, cuando este pidió que se la enfriaran, porque estaba demasiado caliente. El veneno fue fatal y Británico cayó al suelo, soltando espuma por la boca. El joven murió, el 11 de febrero de 55, un día antes de su decimocuarto cumpleaños,  menos de un mes antes de convertirse en adulto y unos cuatro meses, tras la muerte de su padre.

Nerón alegó, que no era culpable del asesinato, justificando la muerte de Británico, con un ataque de epilepsia, que el joven habría sufrido. Británico fue enterrado en el Mausoleo de Augusto y fue el último componente, de la dinastía Julio-Claudia, en ser enterrado allí.


No hay comentarios:

Publicar un comentario