martes, 30 de septiembre de 2025

Cuando se aprobó el voto femenino, por primera vez en España

Tal día como hoy, 1 de octubre de 1931, el Gobierno provisional de la Segunda República, concedía por primera vez en la historia de España, el derecho al voto femenino.

El voto femenino se aprobó en España, durante la Segunda República. Fue un hito importante que se concretó con la Constitución de 1931, específicamente en su artículo 36.

Este artículo establecía que "los ciudadanos de uno y otro sexo, mayores de veintitrés años, tendrán los mismos derechos electorales". Si bien la Constitución fue aprobada en 1931, las mujeres pudieron votar por primera vez, en las elecciones de 1933.

La cuestión del voto femenino, se planteó en las Cortes republicanas en 1931, gracias a la incansable lucha de Clara Campoamor, una de las tres mujeres con asiento en las Cortes, por conseguir que las mujeres, pudieran disfrutar de este derecho.

El camino hacia el sufragio femenino,  no fue fácil y estuvo marcado por intensos debates, especialmente en el Congreso. Clara Campoamor, destacada diputada, fue una ferviente defensora, del derecho al voto de las mujeres.

Su lucha, junto con la de otras mujeres y movimientos feministas, allanó el camino para la aprobación del artículo 36. Aunque hubo voces contrarias, como la de Victoria Kent, finalmente se impuso la visión, de que el sufragio debía ser universal e igualitario, para hombres y mujeres.

Muchos fueron los detractores, a los que Clara Campoamor, tuvo que hacer frente en las Cortes, incluso contó con la oposición de las otras dos mujeres, que formaban parte de la Cámara, Victoria Kent y Margarita Nelken.

El motivo: que el voto de las mujeres, menos formadas y más influenciables por poderes tradicionales, como la Iglesia no solo restaría poder a los partidos de izquierdas, en beneficio de la derecha, sino que podría poner en peligro, el conjunto del sistema republicano.

El 1 de octubre de 1831, el Congreso de la Segunda República, decidió finalmente, legalizar de forma oficial el voto femenino, tras una ajustada votación, que salió adelante, por una diferencia de apenas 30 votos.

La enmienda salió adelante, pero las mujeres no pudieron ejercer el derecho a voto en España, hasta las elecciones de 1933, comicios en los que la derecha, encabezada por la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA), se llevó la victoria.

lunes, 29 de septiembre de 2025

La "Lotería de los números", el juego de azar creado por Carlos III

Tal día como hoy, 30 de septiembre de 1763, se creaba durante el reinado de Carlos III de España un juego de azar que recibió la denominación, de Lotería de los números.

Para conocer sus orígenes, hemos de remontarnos al siglo XVIII en el reinado de Carlos III, cuando la Hacienda pública, pasaba uno de sus más difíciles momentos, a pesar de las reformas continuadas, por frenar el déficit público.

La Lotería Primitiva o Lotería de los números, como se conocían entonces, nació en 1763  a propuesta del Marqués de Esquilache, Ministro de Hacienda durante el Gobierno de Carlos III, con el fin de obtener más dinero para las arcas del Estado, sin subir impuestos ni crearlos.

Este juego de azar, fue creado mediante Real Decreto, gracias al esfuerzo de uno de los ministros del Rey Carlos III, el marqués de Esquilache, quien importó este sorteo de Nápoles, con el objetivo de recaudar dinero para las arcas del Estado, el suficiente como para no crear más impuestos.

La Lotería de los números, era muy similar al actual sorteo de la primitiva. El juego consistía en escoger varios números, comprendidos entre el 1 y el 90. Los premios se otorgaban en una ceremonia, en la que un niño con los ojos vendados, sacaba un total de cinco bolas.

Los beneficios se destinaron finalmente, a atenciones de carácter benéfico. De esta forma lo dejaba patente Carlos III, en el Real Decreto del 30 de septiembre de 1763: 

“He tenido por oportuno y conveniente, establecer en Madrid una lotería para que se convierta en beneficio de Hospitales, Hospicios y otras Obras Pías y públicas, en que se consumen anualmente muchos caudales de mi Real Erario”.

El primer sorteo tuvo lugar, el 10 de diciembre de 1763 y su premio era de 187.000 reales. Sin embargo, la Lotería de los números, no fue el primer juego de azar establecido en la península, puesto que desde 1387, durante el reinado de Juan I de Castilla, se tiene noticia de disposiciones contra la práctica de los juegos de azar, disposiciones que fueron renovadas siglos más tarde,  en época del Rey Felipe II.

domingo, 28 de septiembre de 2025

El nombramiento de Francisco Franco, como Jefe de Estado y Generalísimo

Tal día como hoy,  29 de septiembre de 1936, dos meses después del inicio de la Guerra Civil española, la Junta de Defensa Nacional, nombraba al general Francisco Franco Bahamonde, Jefe de Estado y Generalísimo de los ejércitos, del bando sublevado.

El 21 de septiembre de 1936, la Junta de Defensa Nacional nombró a Franco "Generalísimo" de sus fuerzas. Posteriormente, el 29 de septiembre, lo nombraron "Jefe del Gobierno del Estado español, mientras dure la guerra". Finalmente, el 1 de octubre, en una ceremonia solemne, se oficializó su nombramiento como "Jefe del Estado".

Nacido en el seno de una familia ferrolana, de clase media y tradición marinera, Franco eligió muy pronto la carrera militar. En 1910 terminó sus estudios, en la Academia de Infantería de Toledo y tan solo 16 años después,se convirtió en el general más joven de toda Europa a los 33 años de edad.

Su ascenso meteórico tuvo lugar, gracias en parte, a méritos de guerra en el norte de África.

Durante la dictadura de Primo de Rivera, llegó a dirigir la Academia General Militar de Zaragoza, y en la Segunda República participó, en la represión de Asturias-

Fue comandante en jefe, del Ejército español en Marruecos y jefe del Estado Mayor Central, cargo de máximo prestigio que desempeñaría, hasta que el gobierno del Frente Popular, lo destina a la Comandancia de Canarias, puesto que ocupaba, durante el estallido de la Guerra Civil Española.

Sus ideas fuertemente conservadoras, su importancia al orden y a la autoridad y sobre todo, su desconfianza hacia el régimen parlamentario, al que consideraba el causante, de la decadencia de España en el siglo XX, le llevaron a sumarse, a última hora, a la conspiración preparada por varios militares, para sublevarse contra la Segunda República, en julio de 1936.

El golpe de Estado comienza, el 17 de julio. Pronto triunfa en varias ciudades, pero este no termina de cuajar y acaba desencadenando, una cruenta Guerra Civil.

A los pocos meses del inicio del conflicto, el 29 de septiembre de 1936, Franco fue elegido Jefe de Estado y Generalísimo de los ejércitos del bando sublevado, cargo que desempeñó para guiar a los suyos a la victoria, en una guerra que duraría hasta abril de 1939.

El nombramiento de Franco como Jefe del Estado, marcó un punto de inflexión en la Guerra Civil, consolidando su posición como líder indiscutible, del bando sublevado y allanando el camino, para la instauración, de su régimen dictatorial

Al término de la guerra, Franco encabezó una dictadura militar, de casi cuarenta años, hasta el día de su muerte, el 20 de noviembre de 1975.


sábado, 27 de septiembre de 2025

La batalla del Puente de Alcolea, fin del reinado de Isabel II de España

Tal día como hoy, 28 de septiembre de 1868, tenía lugar cerca de la localidad cordobesa de Alcolea, el enfrentamiento que marcaría el final del reinado de Isabel II, la batalla del puente de Alcolea.

La batalla de Puente de Alcolea, librada el 28 de septiembre de 1868, marcó el fin del reinado de Isabel II de España. Esta batalla fue un enfrentamiento clave, dentro de la Revolución de 1868 (conocida como La Gloriosa), donde las fuerzas revolucionarias, derrotaron a las tropas leales a la reina, precipitando su exilio y el inicio del Sexenio Democrático.

La batalla, que tuvo lugar en las cercanías del puente, sobre el río Guadalquivir en Alcolea (Córdoba), enfrentó a los sublevados, liderados por el general Francisco Serrano, contra las fuerzas realistas, comandadas por el general Manuel Pavía.

Este enfrentamiento se produjo, 10 días después del pronunciamiento militar que los generales Serrano, Prim y Topete, encabezaron en la ciudad de Cádiz, contra el régimen monárquico de Isabel II, debido al enorme descontento popular.

La insurrección contó, con el apoyo de la mayoría del ejército español. Sin embargo, el por aquel entonces presidente del Consejo de ministros, el general José Gutiérrez de la Concha, se las ingenió para reunir unos 10.000 hombres que, dirigidos por el marqués de Novaliches, se dirigieron a Andalucía para aplacar la rebelión.

Las tropas del marqués de Novaliches, se enfrentaron al bando sublevado el 28 de septiembre de 1868 a orillas del río Guadalquivir en la batalla del puente de Alcolea, muy cerca de la localidad cordobesa de Alcolea.

La lucha fue muy pareja. De hecho, ambos bandos contaron con un número similar de tropas, sobre los 10.000 soldados. Las tropas realistas fueron las primeras en atacar,  de forma frontal, pero el bando sublevado encabezado por el general Serrano, pudo resistir el ataque.

Para evitar la desmoralización, de las tropas leales a Isabel II, Novaliches decidió acudir, a primera línea de batalla. Su impulsiva decisión, le provocó graves heridas en la cara por metralla, que le impidieron seguir comandando a sus hombres. Le sustituyó el general Jiménez de Sandoval, quien viendo el transcurso de la batalla, ordenó la retirada al anochecer.

La noticia de la derrota de las tropas realistas, pronto llegó a la capital aunque ni la Corte, ni la Reina Isabel II se encontraban en Madrid, pues la lucha se produjo mientras Isabel II, disfrutaba de sus vacaciones, en la ciudad de San Sebastián.

El resultado de la batalla del puente de Alcolea, supuso el triunfo del levantamiento militar, y el fin del reinado de una Isabel II, que se vio obligada a huir del país, y el inicio de una nueva etapa, que pasó a la historia como "el Sexenio Democrático."

viernes, 26 de septiembre de 2025

El fallido golpe de estado del General O´Donnell, contra el regente Baldomero Espartero

Tal día como hoy, 27 de septiembre de 1841, el general O´Donnell encabezaba en la ciudad de Pamplona, un pronunciamiento militar contra el regente Baldomero Espartero, para instaurar nuevamente en el trono, a María Cristina de Borbón.

El fallido golpe de estado del general Leopoldo O'Donnell, contra el regente Baldomero Espartero, tuvo lugar el 27 de septiembre de 1841, en Pamplona.

Este levantamiento militar, fue un intento de derrocar a Espartero, quien ejercía la regencia durante la minoría de edad de Isabel II. 

O'Donnell, líder del partido moderado, buscaba poner fin al gobierno progresista, de Espartero, quien gobernaba con tintes autoritarios y militares

O´Donnell se alzó en rebeldía contra Espartero, pero no consiguió que la ciudad de Pamplona, proclamase como regente a María Cristina de Borbón, pese al incesante bombardeo, que llevó a cabo sobre la ciudad. Una realidad que impidió, el triunfo inicial del golpe.

Días más tarde, el 4 de octubre de 1841, el general Piquer se sublevaba en la ciudad de Vitoria, pronunciamiento que fue seguido, por la constitución de una Junta Suprema de Gobierno, presidida por el general Montes de Oca y la proclamación, en la localidad de Vergara, de María Cristina de Borbón, como Reina regente.

Otros puntos del país como Zaragoza o Bilbao, siguieron el pronunciamiento, durante los primeros días de octubre. Sin embargo, este fracasa al no triunfar en la capital de España, y no llevarse finalmente a cabo, en Andalucía.

El golpe fracasó y algunos de sus participantes, fueron ejecutados, incluyendo a Diego de León. La figura de Espartero se debilitó aún más, tras el bombardeo de Barcelona en 1842, una acción ordenada por él, para sofocar una revuelta en la ciudad.

Los principales militares implicados, O´Donnell y Manuel de la Concha, lograron huir del país. Otros como Manuel Montes de Oca, Diego de León y Borso de Carminati, fueron apresados y ajusticiados.

Espartero como represalia, rompió con una de las reglas no escritas, entre los militares, con respecto a los pronunciamientos militares, la de respetar la vida de los derrotados, y mandó fusilar a los generales, Manuel Montes de Oca, Diego de León y Borso de Carminati. Decisión que causó un gran impacto, entre el ejército y la opinión pública.

Finalmente, Espartero se vio obligado a renunciar a la regencia en 1843, ante la hostilidad de las Cortes y la presión, de otros generales como Narváez y Serrano, quienes lideraron un pronunciamiento conjunto, de moderados y progresistas

El general Diego de León, fue fusilado el 15 de octubre de 1841 en Madrid, acusado de sedición por su sublevación, contra el regente Espartero. El fusilamiento tuvo lugar, en el antiguo camino de los Pontones, a las afueras de Madrid,. 

Diego de León, un militar romántico, había asaltado el Palacio Real, con la intención de secuestrar, a la joven reina Isabel II. A pesar de tener la oportunidad de escapar, decidió afrontar su destino y fue ejecutado, públicamente-

jueves, 25 de septiembre de 2025

Victoria Kent: una mujer adelantada a su tiempo

Tal día como hoy, 26 de septiembre de 1987, fallecía en la ciudad de Nueva York, la abogada y política republicana española, Victoria Kent.

Victoria Kent, fue una figura pionera en la abogacía española, destacando por ser la primera mujer en ejercer como abogada, ante un tribunal militar. Esto ocurrió en 1931, tras negarse a colaborar, con el dictador Primo de Rivera.

Además, fue la segunda mujer española colegiada como abogada, tras Ascensión Chirivella Marín, y la primera en hacerlo en el Colegio de Abogados de Madrid, en 1925. Victoria Kent también fue una de las tres mujeres con escaño en el Congreso de los Diputados durante la Segunda República.

Victoria Kent fue una mujer adelantada a su tiempo, que logró romper todos los esquemas de la época, al estudiar derecho en la Universidad de Madrid y conseguir convertirse, en abogada.

Fue la primera mujer, en ingresar en el Colegio de abogados de Madrid, y la segunda capaz de colegiarse en un colegio de abogados español. Lo hizo en 1924, en plena dictadura de Primo de Rivera, año en el que defendió su primer caso.

En 1930, durante la "Dictablanda" del general Berenguer, logró el hito de ser la primera mujer del mundo, en ejercer como abogada ante un tribunal militar, al defender a Álvaro de Albornoz, persona que estaba acusada de ser el instigador, de un pronunciamiento militar, contra la monarquía de Alfonso XIII, conocido como la Rebelión de Jaca. Juicio que ganó al conseguir, la absolución de su cliente, tras citar ante el tribunal la definición, de rebelión militar.

Tras proclamarse la Segunda República, se presentó a las elecciones por el Partido Radical Socialista y obtuvo un escaño, como diputada en las Cortes constituyentes. Paradójicamente, pese a sus convicciones democráticas y feministas, se opuso al derecho de voto de las mujeres, pues creía que estas favorecerían, a los partidos conservadores.

En la lucha por el sufragio femenino en España, Clara Campoamor tuvo como principal opositora a Victoria Kent, dentro del Partido Radical. Aunque ambas compartían el objetivo del voto femenino, discrepaban en el momento de su implementación, con Kent argumentando que no era oportuno, debido a la falta de preparación de las mujeres, para ejercerlo responsablemente

El Gobierno de Manuel Azaña, la nombró directora general de prisiones, entre los años 1931 y 1934, cargo durante el cual humanizó, el sistema penitenciario.
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Al estallar la Guerra Civil Española, fue enviada a París como secretaria, de la embajada española. Nunca más volvería a España. La victoria de Franco, le obligó a vivir el resto de su vida lejos del país, que le había visto nacer.

Permaneció en el exilio en México y Estados Unidos, país en el que falleció el 26 de septiembre de 1987.

martes, 23 de septiembre de 2025

El día que el conquistador español Vasco Núñez de Balboa, descubrió el Océano Pacífico

Tal día como hoy, 25 de Septiembre de 1513, el conquistador español Vasco Núñez de Balboa, se convierte en el primer europeo reconocido, en ver el Océano Pacífico.

En septiembre de 1513, Núñez de Balboa, junto con un grupo de españoles, llegó a la costa del océano Pacífico, después de una difícil travesía por tierra.

Balboa, tomó posesión del mar, en nombre de los reyes de España. El océano fue bautizado como Mar del Sur, porque se encontraba al sur del istmo de Panamá, desde donde lo avistaron.

El 1 de septiembre de 1513, el conquistador español salió, desde Santa María de la Antigua del Darién, a orillas del mar Caribe, en la actual Colombia. Esta ciudad, la había fundado él mismo, dos años antes y fue la primera ciudad española, de la América continental.

Partió por mar, al mando de una expedición, formada por 190 españoles y un millar de indios y arribó, a un puerto situado, en tierras del cacique Careta.

Desde allí, se adentró por tierra en la feroz selva tropical, de Darién y cruzó con gran dificultad, el istmo panameño, en busca de un nuevo mar, del que le habían hablado los indígenas.

Balboa lideró la expedición que cruzó el istmo, y al llegar a la costa, divisó el océano, desconocido hasta entonces por los europeos. Este descubrimiento, fue un hito importante en la exploración europea, y tuvo un gran impacto en la comprensión del mundo, en aquel momento.

El 25 de septiembre de 1513, siguiendo las instrucciones de los guías indígenas, Núñez de Balboa se encaramó a una cima y contempló, por primera vez, el océano Pacífico, el más extenso del planeta, al que denominó "Mar del Sur".

El escribano de la expedición, Andrés de Valderrábano, levantó acta del descubrimiento, que fue firmada por todos los presentes

Balboa, después de tomar posesión del océano, en nombre de España, regresó a la costa del Caribe, a la ciudad de Santa María la Antigua del Darién, la primera ciudad estable en tierra firme del Nuevo Mundo.

Años más tarde, el navegante portugués Fernando de Magallanes,, durante su vuelta al mundo, al servicio de la Corona de España, le dio el nombre de "Océano Pacífico", por encontrarse sus aguas tranquilas, durante la mayor parte de su travesía, tras el paso de un estrecho, que luego sería denominado, estrecho de Magallanes.

La primera sesión de las Cortes de Cádiz, en la Guerra de la Independencia

Tal día como hoy, 24 de septiembre de 1810, en plena Guerra de la Independencia, tuvo lugar en la ciudad de San Fernando (Cádiz), la celebración de la primera sesión de las Cortes de Cádiz.

La primera sesión de las Cortes de Cádiz tuvo lugar  en septiembre de 1810 en el Teatro Cómico, de la Real Isla de León,(actual San Fernando), en plena Guerra de la Independencia, contra la ocupación francesa.

Estas Cortes Generales y Extraordinarias, fueron convocadas para establecer un nuevo orden político y social en España, y se distinguieron por ser las primeras, en proclamar una Constitución de carácter liberal, la Constitución de 1812

La primera sesión de las Cortes se celebró en el Teatro Cómico de la Isla de León, ante la imposibilidad de reunirse en Sevilla, debido a la ocupación francesa. Asistieron 102 diputados, algunos propietarios de provincias no ocupadas, y otros suplentes de las provincias ocupadas, o de territorios americanos, lo que refleja, la diversidad de la representación.
 
En esta sesión, se afirmó la soberanía nacional y se reafirmó, a Fernando VII, como rey legítimo de España, aunque se sentaron las bases, para un nuevo orden político, basado en principios liberales.

El origen de las Cortes de Cadiz, se remonta a las revueltas populares, surgidas ante la invasión francesa, de la península ibérica, que desembocaron en la creación de las llamadas, Juntas de Defensa. 

Estas Juntas, existentes tanto a nivel local como regional, reconocían a Fernando VII como el legítimo Rey de España pero, al encontrarse retenido en Francia, sentían la necesidad, de llenar el vacío de poder, que había dejado su cautiverio, además de, como su propio nombre indica, defender los territorios españoles, del invasor.

Las Juntas de Defensa, estaban compuestas por militares, representantes del alto clero, funcionarios y profesores. Todos ellos, personas conservadoras que, en septiembre de 1808, otorgaron la dirección suprema, de todas las Juntas de Defensa, a la Junta Suprema Central.

En 1810, la Junta Central se disolvió y traspasó sus poderes, al Consejo de Regencia de España e Indias, formado por cinco magistrados ,que permanecieron hasta su disolución y en el que elaboraron, su principal obra legislativa: la Constitución de 1812, popularmente conocida como "La Pepa". Texto que significaba, el primer intento, de liberación, económica y social en España, que buscaba el final del Antiguo Régimen.

La elección de establecer las Cortes en San Fernando y Cádiz , no fue por casualidad, sino más bien por el desarrollo de la guerra, ya que se trataban de las dos únicas ciudades, que no se encontraban, bajo dominio francés. miembros que gobernaron en nombre del Rey ausente, y que ese mismo año, convocaron por primera vez, las Cortes de Cádiz.
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Las Cortes, continuaron reuniéndose en San Fernando, hasta que en febrero de 1811, que se desplazan, al Oratorio de San Felipe Neri de Cádiz. Lugar en el que permanecieron, hasta su disolución y en el que elaboraron, su principal obra legislativa: la Constitución de 1812, 

La Constitución, durante la posterior reacción absolutista, de Fernando VII, y abolición de la misma, fue  popularmente conocida, como  "La Pepa" por haber sido aprobada, el día de San José y para evitar la represión, los liberales en lugar de gritar "Viva la Constitución", gritaban "Viva la Pepa", como grito de libertad  

La primera sesión de las Cortes de Cádiz, celebrada en plena Guerra de la Independencia, fue un evento crucial, que sentó las bases para la creación, de un nuevo marco político y jurídico en España, basado en principios liberales y en la soberanía nacional. 

lunes, 22 de septiembre de 2025

Fernando VI, el Rey español que protegió las artes y las ciencias

  

Tal día como hoy, 23 de septiembre de 1713, nacía en la ciudad de Madrid, el Rey Fernando VI de España.

Fernando VI, rey de España entre 1746 y 1759, fue conocido por su dedicación a las artes y las ciencias, ganándose el apodo de "el Prudente" o "el Justo". 

Su reinado se caracterizó, por un notable florecimiento cultural, destacando su apoyo a la creación, de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en 1752

El rey, impulsó la fundación de esta institución, que se convirtió en un centro clave para el fomento de las artes visuales, la arquitectura y la música.

Se le atribuye al rey, un interés particular por la mejora de la agricultura nacional, y por el fomento de la economía.

Fernando VI, era el tercer hijo de Felipe V y de su primer matrimonio con María Luisa Gabriela de Saboya. La muerte de sus hermanos mayores, uno de los cuales llegó a reinar, durante un breve periplo como Luis I de España, le convirtieron en Rey de España, desde el año 1746 hasta su muerte.

Su reinado, muy próspero, se caracterizó por una política exterior, muy diferente a la de sus predecesores. Esta optaba, por el mantenimiento de la paz y la neutralidad, frente a Francia e Inglaterra. Una política exterior pacífica, que le permitió reducir los costes militares y centrarse, en el desarrollo del país.

Fernando VI, se rodeó de muy buenos ministros, que hicieron posible mantener una fórmula de gobierno, la de “el rey con los ministros”, cargada de futuro. Fórmula que había iniciado su padre, Felipe V, al primar a los secretarios de Despacho.

Como monarca ilustrado, protegió las ciencias y las artes, logrando un florecimiento cultural, con la creación de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, y de las Reales Sociedades Económicas, de Amigos del País.

Fernando VI y su esposa Bárbara de Braganza, protegieron a numerosos artistas, músicos y escritores, incluyendo al compositor Domenico Scarlatti, al cantante Farinelli, y a figuras destacadas, como el Padre Benito Feijoo

Sus problemas mentales, agravados tras quedar viudo, le obligaron a retirarse a su palacio de Villaviciosa (Madrid). Lugar en el que falleció, el 10 de agosto de 1759, a los 45 años de edad, sin dejar descendencia.

A su muerte, fue sustituido por su hermano Carlos III, quien hasta aquel entonces, era Rey de Nápoles.

El reinado de Fernando VI, aunque breve, dejó una huella significativa, en la historia de España, especialmente en el ámbito cultural. Su apoyo a las artes y las ciencias contribuyó, a un período de gran esplendor y marcó un hito, en la historia de la cultura española.

domingo, 21 de septiembre de 2025

La batalla de Truillás,durante la Guerra del Rosellón

Tal día como hoy, 22 de septiembre de 1793, en plena Guerra del Rosellón, tuvo lugar un enfrentamiento, en la comuna francesa de Truillás, entre las tropas del Rey Carlos IV de España y las fuerzas de la República Francesa, que pasó a la historia como la batalla de Truillás.

La Guerra del Rosellón, también denominada Guerra de los Pirineos o Guerra de la Convención, fue un conflicto que enfrentó a España y la Francia revolucionaria, entre 1793 y 1795 (durante la existencia de la Convención Nacional francesa), dentro del conflicto general, que enfrentó a Francia, con la Primera Coalición.

La batalla de Truillás, también conocida como batalla de Trouillas, fue un enfrentamiento clave durante la Guerra del Rosellón, (también llamada Guerra de los Pirineos). Tuvo lugar el 22 de septiembre de 1793,entre las tropas españolas, comandadas por el general Antonio Ricardos, y las tropas francesas de la República Francesa. Aunque las tropas españolas lograron la victoria, no pudieron recuperar el Rosellón

La batalla fue significativa, porque marcó la primera vez que las fuerzas francesas se enfrentaron a las españolas, en una batalla campal durante este conflicto,

Desde que los franceses invadieron el Rosellón, en abril de 1793, el Capitán General español Antonio Ricardos y sus hombres, apoyados por tropas portuguesas e inglesas, obtuvieron una serie de éxitos, contra la Primera República Francesa.

Para revertir esta situación, el 22 de septiembre de 1793, el general francés Dagobert, al mando de 22.000 hombres, atacó en la comuna francesa de Trouillás, al ejército español dirigido por el general Ricardos.

El ataque fue repelido por los españoles, que no solo lograron resistir, el propio general Ricardos revirtió la situación y consiguió, que el enemigo huyera del campo de batalla, tras romper la columna francesa, con una carga de caballería, que el mismo dirigió.

Los franceses, superiores en número, perdieron la batalla. De los 22.000 soldados con los que contaba general el Dagobert, 6.000 perdieron la vida y unos 1.500, fueron hechos prisioneros. Por si fuera poco, 10 de sus cañones fueron capturados, y de los 17.000 valientes que lucharon bajo las órdenes del General Antonio Ricardos, unos 2.000 fueron heridos o cayeron en combate.

La batalla de Truillás, fue un enfrentamiento importante en la Guerra del Rosellón, donde las tropas españolas, lideradas por el general Antonio Ricardos, vencieron a las francesas, aunque sin lograr, la reconquista completa del territorio.

Tras la victoria española en la batalla de Truillás la guerra continuó hasta que el 22 de julio de 1795 con la Paz de Basilea, se puso fin a los enfrentamientos entre Francia y España .

España, que estaba representada por el diplomático, Domingo de Iriarte y Francia por  el embajador francés Barthélemy, cedió a la República Francesa, los dos tercios orientales de la isla de La Española, al tiempo que reconocía a Francia, como república y restablecía las relaciones comerciales, entre ambas naciones


sábado, 20 de septiembre de 2025

Historia y leyenda, de la conquista de Cuenca, por el rey Alfonso VIII de Castilla

Tal día como hoy, 21 de septiembre de 1177: El Rey Alfonso VIII conquista Cuenca tras el asedio de la localidad.

Alfonso VIII fue rey de Castilla, y también se le conoce como rey de Toledo. Su reinado transcurrió, en la segunda mitad del siglo XII y las primeras décadas del siglo XIII, siendo una figura clave, en la consolidación de Castilla y en la lucha, contra el poder musulmán.

La conquista de Cuenca por Alfonso VIII, tuvo lugar el 21 de septiembre de 1177, tras un largo asedio, de nueve meses.

Alfonso VIII,  lideró las tropas cristianas, que sitiaron y finalmente tomaron la ciudad, entonces bajo dominio musulmán.

La conquista de Cuenca, fue un hito importante en la Reconquista, consolidando el avance cristiano en la península ibérica, marcando un avance significativo, en la expansión territorial de Castilla.
 
La leyenda cuenta, que un pastor llamado Martín Alhaja, jugó un papel crucial al guiar a las tropas cristianas, a través de un acceso secreto a la ciudad,

Martín Alhaja, quien también participó, en la batalla de las Navas de Tolosa, ayudó a los cristianos a acceder a la ciudad, abriendo la puerta de Aljaraz, hoy conocida como Puerta de San Juan, según algunas crónicas

La leyenda del pastor Martín Alhaja lo describe como una figura decisiva en la batalla de Cuenca y la batalla de Las Navas de Tolosa de 1212, ambas ganadas por el rey Alfonso VIII. 

En ambas leyendas, Martín Alhaja guía a las tropas cristianas por caminos secretos, y en Las Navas de Tolosa, también se le asocia con el origen del linaje de los Cabeza de Vaca, por haber señalado el camino, usando las calaveras de vacas comidas por lobos

Se dice también que Alfonso VIII, interpretaba las luminarias celestiales, que veía en la zona como señales divinas, que respaldaban su campaña.

Según relata la leyenda, tras la conquista, el rey Alfonso VIII ordenó la construcción de una ermita, bajo el puente de San Antón, a orillas del río Júcar, con una imagen de la Virgen de la Luz, como muestra de agradecimiento,

Las tropas de Alfonso VIII, acamparon en Jábaga durante el asedio, según informan los cronistas oficiales  

La conquista, ha sido representada en diversas ocasiones, como en la exposición "Alfonso VIII y Leonor: tiempo de conquista" en la Iglesia de San Andrés, de la localidad.

La frase "Alfonso VIII y Leonor: tiempo de conquista" se refiere al reinado de Alfonso VIII de Castilla y su esposa Leonor Plantagenet, un período caracterizado, por la expansión territorial y las tensiones militares, contra los almohades, en la península ibérica.

Alfonso VIII, conocido como "el de las Navas" o "el Noble", fue un rey clave, en la Reconquista, destacando su victoria en la Batalla de las Navas de Tolosa, en 1212.

Su esposa Leonor, hija de Enrique II de Inglaterra y Leonor de Aquitania fue reina consorte de Castilla, entre 1170 y 1214 por su matrimonio con el rey Alfonso VIII. 

Fue una figura influyente, fundadora del Monasterio de las Huelgas en Burgos y madre de varios reyes, incluyendo a Enrique I y Berenguela de Castilla. 

Jugó un papel importante,como reina consorte y fue mediadora, en las relaciones internacionales

 

viernes, 19 de septiembre de 2025

La repentina muerte del rey de Castilla, Felipe I "el hermoso"

Tal día como hoy, 20 de septiembre de 1506: El estado de salud de Felipe I "el Hermoso’" empeora bruscamente, tras padecer unos días de fiebre. Los médicos, temiendo por su vida, le aplican sangrías, aunque el Rey acabaría muriendo, cuatro días después.

En 1501, los esposos Felipe y Juana de viaje hacia Castilla, para jurar como príncipes de Asturias, se detuvieron en Blois. Allí el rey Luis XII de Francia, los recibió, y al verle exclamó: "He aquí un hermoso príncipe". La frase ,provocó el apodo, por el que fue conocido Felipe.

Felipe I de Castilla, conocido como "el Hermoso", murió repentinamente en Burgos el 25 de septiembre de 1506, a los 28 años, tras enfermar después de jugar a la pelota. Aunque se sospechó de envenenamiento, la causa más probable fue una enfermedad repentina, posiblemente la peste.

Su muerte desencadenó, una crisis política en Castilla, dejando a su esposa, Juana I,"La loca" como reina, pero incapaz de gobernar, en un estado de profunda tristeza y demencia  y a su suegro, Fernando "el Católico", asumiendo la regencia.

Felipe enfermó el 16 de septiembre, con fiebre alta, escupiendo sangre, y finalmente murió en la madrugada del 25 de septiembre. La súbita muerte generó sospechas, de que Fernando el Católico lo había envenenado, aunque no hay pruebas concluyentes.

La muerte de Felipe I dejó a Juana I, quien se creía mentalmente inestable, como única reina de Castilla, lo que llevó a una disputa por la regencia, entre Fernando y la nobleza castellana, que apoyaba a Felipe. 

El cardenal Cisneros asumió su primera regencia de la Corona de Castilla, a la espera de la llegada del rey Fernando. desde Aragón, para que tomara, el control del gobierno. 

Siguiendo la costumbre flamenca, el corazón de Felipe fue enviado a Brujas, su ciudad natal, y su cuerpo, fue embalsamado y sometido a un largo cortejo fúnebre, por las tierras de Castilla, donde Juana I se negaba a sepultarlo.

Según la leyenda y la cultura popular en torno a  "Juana la Loca",se  afirma que ella insistía en que su esposo, Felipe el Hermoso, estaba simplemente "dormido" después de su muerte y se negaba a aceptar su fallecimiento, lo que alimentó la narrativa de su demencia. 

Aunque esta idea es un elemento clave de la historia popular, las evidencias históricas sugieren que su "locura" fue utilizada como pretexto político, para apartarla del trono, y los relatos sobre su comportamiento, con el cadáver de su marido, a menudo mezclan hechos con exageraciones legendarias.

Un cortejo fúnebre, encabezado por la reina Juana, emprendió un viaje con su cadáver hasta Granada, a pesar de encontrarse Juana embarazada. El 14 de enero de 1507, Juana dio a luz a Catalina, la hija póstuma de Felipe "El hermoso".

La muerte de Felipe I, marcó el inicio de una nueva etapa, en la historia de España, con la consolidación del poder, de su suegro, Fernando "el Católico" y la posterior ascensión al trono, de su  primogénito, Carlos I

Su hijo, Carlos I, se encontró con una herencia grandiosa: los reinos de sus cuatro abuelos: Castilla, con sus dominios del Nuevo Mundo, Aragón con los Estados Italianos, los Países Bajos y el Sacro Imperio Romano Germánico, además de otros títulos simbólicos, que lo convirtieron, en uno de los más importantes monarcas, que han existido. 


jueves, 18 de septiembre de 2025

El Tratado de los Toros de Guisando

Tal día como hoy, 19 de septiembre de 1468, era ratificado en la provincia de Ávila, el Tratado de los Toros de Guisando, en el que Enrique IV de Castilla, reconocía a su hermanastra Isabel, como heredera al trono castellano.

El Tratado de los Toros de Guisando, firmado en 1468, marcó un punto de inflexión, en la sucesión al trono de Castilla, reconociendo a Isabel I como heredera al trono, en lugar de Juana "la Beltraneja". 

Este tratado, aunque no fue un tratado formal en sí, sino más bien un acuerdo o juramento, se realizó junto a los famosos verracos, de piedra de Guisando, en Ávila .

Este Tratado fue una de las grandes causas, de la Guerra de Sucesión Castellana, entre Isabel de Trastámara y Juana "la Beltraneja". Un conflicto cuya semilla, ya se había plantado, varios años antes.

Las sospechas de que la hija de Enrique IV, fuese ilegítima y el trato de favor del Rey con nobles, como los Mendoza o su valido Beltrán de la Cueva, hizo que un grupo de nobles castellanos, se revelase en la conocida "Farsa de Ávila", ceremonia en la que depusieron simbólicamente, a Enrique IV y entronizaron en su lugar a su hermanastro, el infante Alfonso de Castilla.

Tras la muerte de Alfonso - tal vez envenenado- en 1468, este grupo de nobles, comenzó a apoyar las pretensiones de su hermana Isabel, quien prefirió pactar con su hermanastro, el Rey Enrique IV. Isabel llegó a un acuerdo, que se formalizó el 19 de septiembre de 1468, al ratificar el Tratado, de los Toros de Guisando.

Mediante este acuerdo, Isabel era proclamada princesa de Asturias y reconocida, como heredera de la Corona de Castilla, situándose en la línea sucesoria, por delante de la hija del Rey, Juana "la Beltraneja", además de recibir un amplio patrimonio. 

A cambio, Isabel debía permanecer leal a Enrique IV y casarse, con el consentimiento previo del Rey, condición esta última que no llegó a cumplir, al casarse en secreto, con Fernando II de Aragón en 1469.

Tras contraer matrimonio, sin el permiso del Rey, Isabel fue repudiada y Enrique IV volvió a reconocer, los derechos de su hija Juana, en la Ceremonia de la Val de Lozoya. Un cambio de parecer, que a su muerte sumió a Castilla, en una cruenta guerra civil.

Este pacto fue crucial, en la lucha por la sucesión al trono de Castilla y marcó un punto de inflexión, en la vida de Isabel, allanando su camino al reinado. No se conserva el documento original del pacto, lo que ha generado debate entre los historiadores, sobre su existencia y autenticidad

El lugar exacto, donde se firmó el pacto también es discutido, aunque se sabe que fue en las cercanías de los Toros de Guisando,  en la Venta Juradera, cerca del monumento de los toros de Guisando .

Aunque hoy en día, solo se conservan vestigios de la venta, el lugar fue estratégico y sirvió de escenario, para este trascendental acuerdo, que sentó las bases para el reinado, de Isabel la Católica y, por ende, de la España moderna.

 

miércoles, 17 de septiembre de 2025

La "revolución Gloriosa": fin del reinado de Isabel II de España

Tal día como hoy, 18 de septiembre de 1868, debido al gran descontento popular, contra el régimen monárquico de Isabel II, estallaba en la ciudad de Cádiz, un golpe de Estado encabezado por los generales Serrano, Prim y Topete, que acabaría con el reinado de Isabel II y pasaría a la historia como "La Gloriosa" o "Revolución del 68".

La "Revolución Gloriosa" en España, también conocida como la Revolución de 1868, fue un levantamiento militar y civil, que culminó con el derrocamiento y exilio de la reina Isabel II. Este evento marcó, el fin del reinado de Isabel II y el inicio del Sexenio Democrático, un período de cambios políticos y sociales en España.

Existía un amplio descontento popular, hacia el reinado de Isabel II, debido a la corrupción política, la inestabilidad económica, y la falta de libertades.

El origen del pronunciamiento, que acaba con el reinado de Isabel II, tiene lugar dos años antes, en agosto de 1866 cuando el general progresista Juan Prim, consigue en Bélgica un acuerdo entre progresistas y demócratas, para derrocar a la Reina, acuerdo que se conoce como el Pacto de Ostende.  

Dos años después, en marzo de 1868, Prim conseguía un nuevo aliado para su lucha, al firmar un acuerdo con el general Serrano, por el cual la Unión Liberal, se sumaba al Pacto de Ostende.

Tras llegar a estos acuerdos, los actores implicados comenzaron sus preparativos. Todo estaba preparado, a principios de septiembre. También el plan que se iba a llevar adelante y el 18 de septiembre de 1868, los generales Serrano, Prim y Topete se sublevaron contra la Reina Isabel II, en la ciudad de Cádiz.

La revolución fue liderada por militares, como el general Prim y el almirante Topete, quienes se sublevaron en Cádiz, marcando el inicio del movimiento. La Armada se sublevó en Cádiz el 18 de septiembre de 1868, seguido por el ejército

En los días posteriores, el levantamiento se extendió, por el resto del país como la pólvora. Tanto fue así que el por aquel entonces presidente del Consejo de ministros, el general José Gutiérrez de la Concha, no recibió respuesta de ningún general, tras llamar al ejército a combatir la revolución.

El general de la Concha, se las ingenió para organizar un pequeño ejército, para enfrentarse  a los sublevados. Dicho ejército fue derrotado por los revolucionarios, en la "Batalla del Puente de Alcolea", en  Cordoba 

La victoria significó prácticamente, el triunfo del levantamiento, que el 29 de septiembre de 1868 se hizo con la ciudad de Madrid y terminó obligando, a la Reina Isabel II a huir del país y exiliarse en Francia. 

A partir del triunfo de la revolución y durante seis años conocidos como el Sexenio Democrático, de 1868 a1874 ,se intentará crear en España un nuevo sistema de gobierno.  

La coalición de liberales, moderados y republicanos, se enfrentaba a la tarea de encontrar un mejor gobierno, que sustituyera al de Isabel. Al principio las Cortes, rechazaron el concepto de una república para España, y Serrano fue nombrado regente, mientras se buscaba un monarca adecuado, para liderar el país. Previamente se había aprobado una constitución de corte liberal que fue promulgada por las cortes en 1869.

La búsqueda de un rey apropiado, demostró finalmente ser más que problemática, para las Cortes. Juan Prim, el eterno rebelde contra los gobiernos isabelinos, fue nombrado dirigente del gobierno en 1869 y el general Serrano sería regente, y suya es la frase: "Encontrar a un rey democrático en Europa es tan difícil como encontrar un ateo en el cielo!" 

Se consideró incluso la opción de nombrar rey a un anciano general Baldomero Espartero, aunque no quiso serlo pese a que, no obstante, obtuvo muchos votos en el recuento final. 

Finalmente, a instancias de Prim, las Cortes decidieron en 1870 ofrecer la corona a la dinastía Saboya: Amadeo, el segundogénito del rey italiano Víctor Manuel II, tenía un perfil liberal, que parecía satisfacer un punto medio, entre los deseos de las diversas facciones, que habían instigado la revuelta.

Sin embargo, resultó ser todo lo contrario: logró unirlas pero solo contra él y, harto de la imposibilidad de reinar, en un país dividido, en constantes luchas por el poder, abdicó al cabo de dos años.



martes, 16 de septiembre de 2025

La muerte de Felipe IV de España, el llamado "Rey Planeta" y "Rey Pasmado"

Tal día como hoy, 17 de septiembre de 1665, fallecía en Madrid, tras 44 años de reinado, el Rey Felipe IV de España, también llamado Felipe el Grande o el "Rey Planeta’"en referencia a la extensión de sus dominios, a lo largo de cuatro continentes.

Felipe IV es conocido también, como el "Rey Pasmado",por el gesto impasible de su rostro, debido a una percepción popular, que contrastaba con su carácter real, ya que se le consideraba, una figura de gran cultura y sensibilidad, además de un rey responsable y afectado, por la pérdida de sus seres queridos. 

Este apodo, también dio nombre a una novela de Gonzalo Torrente Ballester y una posterior película, consolidando la imagen de un monarca, que vivió en un periodo de contrastes: un siglo de grandes logros artísticos, en la época del Siglo de Oro, pero también de crisis políticas y pérdidas personales. 

Felipe IV, también conocido como "el Rey Planeta", murió en Madrid el 17 de septiembre de 1665, tras 44 años de reinado. 

Su muerte marcó el fin de un reinado extenso, pero también el inicio de una etapa de declive para la Monarquía Hispánica, que dejaba un heredero, Carlos II, "el "hechizado" aún niño. 

Felipe IV falleció en su cuarto de verano, en el Alcázar de Madrid, a los 60 años.

La muerte inesperada de su padre, el Rey Felipe III, en 1621 iniciaba un periodo lleno de incertidumbres, en el que un joven Felipe, de tan solo 16 años, ascendía al trono. 

Su apodo, "Rey Planeta", se debe a la extensión de sus dominios y al poder, que se le atribuía, similar a la influencia de un planeta, sobre su órbita. 

Su reinado, que comenzó en 1621, fue uno de los más largos de la Casa de Austria en España, fue una mezcla de luces y sombras, para la monarquía hispánica. Estuvo marcado por conflictos bélicos, especialmente contra Francia y las Provincias Unidas, que contribuyeron al declive, del poderío español. En lo político, pasó más pena que gloria, 

No se puede decir lo mismo en el ámbito cultural, que vivió el periodo de mayor esplendor de las artes y las letras, periodo que pasó a la historia como el Siglo de Oro.

Esa mezcla de luces y sombras, del reinado de Felipe IV son perfectamente visibles, en su forma de gobierno. 

En un primer momento, al contrario que su padre, Felipe IV, tomó las riendas de sus Reinos y asumió, todas las responsabilidades, que implican gobernar. Sin embargo, pronto quedó patente, su escasa capacidad al mando, así como su poco interés, por los asuntos de Estado. 

Asuntos de los que se empezó a ocupar, una de las figuras más importantes de su reinado, su valido el Conde-duque de Olivares, figura que ejerció un tremendo poder de influencia, sobre Felipe IV.

Si había algo que a Felipe IV le atormentaba era su deseo sexual. El rey estaba convencido de que todos los males del imperio español, eran por su culpa, por su desenfreno amoroso.

Si su adolescencia la había dedicado a la caza y las fiestas, su juventud y el resto de su vida, el sexo fue el motor de su existencia. Su primera compañera fuera del matrimonio, fue la hija del conde de Chirel, y a partir de ahí, la lista se hizo eterna. El monarca no solo buscaba amantes en la corte, también en los burdeles.

Su intensa vida amorosa, era conocida por el pueblo y se compusieron hasta canciones, que hablaban de sus aventuras de alcoba. Su ímpetu sexual, le llevó a engendrar más de una veintena, de hijos bastardos —Juan José de Austria fue el más famoso de ellos—, cuyas madres acababan ingresando, en diferentes conventos. 

Su segundo matrimonio con Mariana de Austria —que tenía 14 años cuando se desposaron, y con quien tuvo al enfermizo Carlos II, con quien despareció la casa de los Austria en España— no logró aplacar la furia del rey, que continuó con sus infidelidades y flagelándose, por el castigo divino, que él y España recibían, por su hiperbólico libido.

Dejó un reino en declive, con un heredero menor de edad, Carlos II, que heredó una monarquía debilitada y con problemas, internos y externos.

A principios de septiembre de 1665, Felipe IV comenzó a sentirse mal, y cayó gravemente enfermo, probablemente de disentería. Aunque se menciona que sufría de problemas de salud, como dolencias reumáticas, hepáticas, renales y venéreas, no se especifica, una causa única de su muerte

Un duro golpe, del que el Rey Felipe IV no se pudo recuperar, pues la enfermedad acabó con su vida el 17 de septiembre de ese mismo año, tras 44 años de reinado. Fue enterrado, en la Cripta Real del Monasterio de El Escorial, según su voluntad. 

lunes, 15 de septiembre de 2025

El general Baldomero Espartero: el hombre que no quiso ser, Rey de España

 

Tal día como hoy, 16 de septiembre de 1840, finalizada la Primera Guerra Carlista, y el general Espartero asumía, la presidencia del Consejo de Ministros.

Hijo de un carretero de La Mancha, Espartero se hizo un nombre ascendiendo, desde lo más bajo en el Ejército español. Su carrera militar comenzó al estallar la Guerra de la Independencia, al abandonar la carrera eclesiástica y tomar las armas.

En la ciudad de Cádiz sitiada por los franceses, realizó sus primeros estudios militares. Ya acabada la Guerra de Independencia fue destinado a América, donde combatió hasta que España, perdió sus colonias en 1824.

Tras la muerte del Rey Fernando VII, se decantó por el bando liberal y apoyó la causa de Isabel II. Por ello luchó contra la reacción absolutista, en la Primera Guerra Carlista, conflicto en el que desempeñó un papel fundamental, que le llevó a ocupar el rango de jefe del Ejército del Norte y recibir el título, de conde de Luchana.

Al término de la Primera Guerra Carlista, sus ideales progresistas le hicieron enfrentarse a un nuevo enemigo, el conservadurismo de la Reina regente María Cristina de Borbón. Que le nombró presidente del Consejo de Ministros y a la que, debido a su oposición al programa liberal que había diseñado, obligó a abdicar y a hacer que las Cortes le nombraran regente.

Su modo de gobernar: autoritario, personalista y militarista, le generaron muchas enemistades al  "espadón progresista" que, en 1843, se vio obligado a exiliarse en Inglaterra, debido al pronunciamiento militar, encabezado por Narváez y Serrano.

Espartero regresó a España en 1849, para vivir retirado en Logroño.  Hasta que en 1854 un pronunciamiento militar, le lleva nuevamente a la presidencia del Gobierno, durante dos años, pero las dudas que se volvían a cernir sobre su liderazgo, se materializaron en un pronunciamiento militar, que le arrebataba de nuevo el poder.

Tras este pronunciamiento, Espartero regresó a Logroño, ciudad de la que no se movió ni participo  en la revolución de 1868,  que destronó a la Reina Isabel II

Espartero, no participó en la revolución de 1868, porque era partidario de no sustituir a los Borbones, nombrar una regencia y esperar a la mayoría de edad, del príncipe Alfonso. Ante la carencia de un sucesor inmediato, las Cortes Constituyentes de 1868, decidieron buscar candidatos, al trono de España .

Entre todas las candidaturas a rey de España, la de Baldomero Espartero, fue la más popular. Conservaba la imagen de un hombre del pueblo, defensor de la nación y la libertad, que atesoraba las grandes virtudes del patriota: honestidad, amor a la patria y sacrificio.

"Pacificador de España" en la guerra carlista, reinventada como buena su regencia del reino, entre 1840 y 1843, y era el símbolo del progresismo. Y todo a pesar, de que no quiso participar en la revolución de 1868, y de la que rechazó el acta de diputado, en 1869.

A pesar de esto, sus partidarios, peregrinaban hasta su retiro en Logroño, presentaban peticiones en Cortes, y organizaban manifestaciones. Los republicanos dijeron, que era la mejor opción por su pasado liberal, su avanzada edad y carencia de descendencia, ya que aseguraban un reinado corto, que podría dar paso a la República.

Así, el 13 de mayo de 1870, el general Prim redactó una carta, para que una comisión nombrada al efecto, fuera oficialmente a pedir a Espartero, que aceptara la corona. Dos días después, Espartero recibía a los emisarios y rechazaba la oferta, con el buen tono que le caracterizaba, no por su salud y edad, como se dijo, sino por su actitud crítica, con la revolución.

Amadeo de Saboya, ya en España tras ser elegido rey, fue a visitarle a Logroño. Allí le hizo Príncipe de Vergara, en reconocimiento a la importancia, que los liberales daban al personaje. Espartero se excusó, por no haber ido a Madrid a felicitarle, y le reiteró su acatamiento, como hizo luego en 1873, cuando se proclamó la República.

Espartero murió el 8 de enero de 1879, sin descendencia, tiempo después de que lo hiciera su mujer, Jacinta. 


domingo, 14 de septiembre de 2025

Los orígenes del reino de Castilla

Tal día como hoy, 15 de septiembre del año 800, se mencionaba por primera vez la palabra Castilla, en el ya desaparecido monasterio, de San Emeterio de Taranco de Mena (Burgos).

El Reino de Castilla surgió en la Edad Media, a partir del Condado de Castilla, que inicialmente fue un territorio vasallo del Reino de León. El condado de Castilla se establece como una marca fronteriza, dentro del Reino de León, con el objetivo de proteger la zona, de las incursiones musulmanas.
 
Este condado, se consolidó como entidad política autónoma y, eventualmente, alcanzó la categoría de reino, en el siglo XI, extendiéndose mediante conquistas, hacia el sur de la península ibérica

El nombre de Castilla, se recogió por primera vez en un documento notarial, por el cual el abad Vitulo, donaba unos terrenos. Documento que decía lo siguiente: “Bardulia, quae nunc vocatur Castella” (Bardulia, que desde ahora llamaremos Castilla).

Un nuevo nombre, el de Castilla, que se le otorgó a un territorio de la península ibérica, que se caracterizaba por la abundancia de este tipo de construcciones: los castillos.

Los primeros condes de Castilla, como Rodrigo y Diego Rodríguez Porcelos, fueron nombrados por los reyes de León y se encargaron, de la defensa y administración de la región, así como de su repoblación.

A través de la construcción de castillos y la resistencia, a las incursiones musulmanas, el condado de Castilla fue consolidando, su identidad y autonomía.

Años más tarde, se consolidó como entidad política autónoma, pasando a reconocerse el condado de Castilla, aunque este permaneció como condado vasallo del Reino de León, hasta que en el año 960, cuando el conde Fernán González, consiguió independizarse del Reino de León y convirtiendo a Castilla, en un condado hereditario, a espaldas de los reyes de León.

En el año 1028, Sancho III "El Mayor" de Pamplona, adquirió el condado de Castilla tras la muerte de su cuñado, el conde García Sanchez. El cual  dejó en herencia en el año 1035 a su hijo Fernando I.

Fernando I, fue capaz de juntar nuevamente a Castilla con el Reino de León, en el año 1037 pero a su muerte, al igual que había hecho su padre, dividió su Reino entre sus hijos.

A García, le otorgó el Reino de Galicia, a Elvira la villa Toro, a Urraca la ciudad de Zamora, a su hijo Alfonso, el Reino de León y a su primogénito, Sancho, Castilla. Condado que bajo su figura, se convirtió en el Reino de Castilla.

A partir de su constitución como reino, Castilla lideró la expansión hacia el sur de la península ibérica, conquistando territorios a los musulmanes, y extendiendo su dominio.

Castilla mantendría la condición de Reino, hasta que en el año 1230 Fernando III el Santo, Rey de Castilla, heredaba de su padre Alfonso IX, el Reino de León.

De esta forma se creaba la Corona de Castilla, que se mantuvo, a pesar de que en 1516 la Corona de Castilla se une con la Corona de Aragón, gracias al Rey Carlos I, hasta el año 1715, en el que el Rey Felipe V emitió los Decretos de Nueva Planta, para cambiar la organización territorial de los Reinos Hispánicos y conseguir, la unificación política y jurídica de todos sus dominios.



sábado, 13 de septiembre de 2025

El día que nació Quevedo, uno de los más prolíficos escritores españoles

 

Tal día como hoy, 14 de septiembre de 1580, nacía en Madrid uno de los más prolíficos escritores de la historia de España, Francisco de Quevedo y Villegas.

Francisco de Quevedo, fue un escritor español del Siglo de Oro, conocido por su poesía satírica y su habilidad, con el lenguaje.

Además de su prolífica obra literaria, Quevedo también fue una figura pública, involucrado en la política y la nobleza. Su vida fue turbulenta, marcada por rivalidades literarias, como la que mantuvo con el poeta Luis de Góngora, a quién consideraba su rival y por los periodos de exilio y prisión.  

A pesar de sus dificultades personales, su legado literario perdura, como uno de los más importantes, de la literatura española

Francisco de Quevedo nació, en el seno de una familia perteneciente a la nobleza, que se encontraba muy bien posicionada. Tanto su padre como su madre, trabajaban en la corte. Motivo por el cual, Quevedo estuvo relacionado desde muy pequeño, con las altas esferas.

Se cree, que sus primeros años de infancia, los pasó en soledad debido a su cojera y a su miopía. La cosa debió cambiar, al estudiar en el colegio imperial de los Jesuitas y, posteriormente, en las Universidades de Alcalá de Henares y de Valladolid, una ciudad esta última, en la que adquirió su fama de gran poeta y comenzó su famosa rivalidad con Góngora.

En 1616, tuvo el honor de ser nombrado caballero de la Orden de Santiago, pero al poco tiempo cayó en desgracia, tras ser acusado de participar, en la conjura de Venecia. En 1629 fue desterrado a Torre de Juan Abad, (Ciudad Real) y un año más tarde, encarcelado en Uclés.

Tiempo después, fue liberado y formó parte del círculo cercano, del conde-duque de Olivares, valido del Rey Felipe IV. Una etapa en la que volvió a pasar por el destierro.

En 1639, la sospecha de la traición volvía a caer sobre Quevedo. El motivo fue, la interceptación de una misiva, en la que hablaba de una conspiración con Francia. Por ello, fue inmediatamente encarcelado, en San Marcos de León, donde permaneció en una minúscula celda, hasta 1643.

Con la salud mermada, por las duras condiciones del encierro, Quevedo se retiró a la provincia de Ciudad Real, para afrontar sus últimos años de vida. Murió finalmente el 8 de septiembre de 1645, en Villanueva de los Infantes.

Francisco de Quevedo, conocido por su ingenio y sátira, protagonizó varias anécdotas memorables. Entre ellas destacan sus duelos verbales, como cuando llamó "coja" a la reina de España, de forma ingeniosa, y su enfrentamiento con Luis de Góngora, al que atacó en versos satíricos. 

De la rivalidad con Góngora nos quedó su famoso soneto titulado: "A una nariz" en donde se burlaba del tamaño, del apéndice nasal de Gongora,

Érase un hombre a una nariz pegado,         
érase una nariz superlativa,         
érase una nariz sayón y escriba,         
érase un peje espada muy barbado;         

Era un reloj de sol mal encarado,          
érase una alquitara pensativa,         
érase un elefante boca arriba,         
era Ovidio Nasón más narizado.         

Érase un espolón de una galera,         
érase una pirámide de Egipto,           
las doce tribus de narices era;         

Erase un naricísimo infinito,         
muchísimo nariz, nariz tan fiera         
que en la cara de Anás fuera delito.     

Entre sus famosas anécdotas, se encuentra la que le sucedió al encontrarse con una mujer en un balcón. La mujer, al ver al escritor, comenzó a insinuarsele, hasta que llegó a un punto, en el que Quevedo, subió al balcón gracias a una polea, que allí había.

Lo que ignoraba, es que a la mujer le acompañaban unos amigos, que eran quienes tiraban de la polea y que todo era una broma. Cuando recorrió la mitad del tramo,que iba desde la calle al balcón, dejaron al escritor colgado, mientras los amigos de la mujer, se burlaban de él.

Esta situación, causó gran expectación entre los viandantes, lo que alertó a la guardia nocturna. Cuando llegaron a instaurar el orden preguntaron:

¿Quién vive?  y este respondió : "Soy Quevedo, que ni sube, ni baja, ni está quedo"

Se cuenta que, en una conversación con amigos, Quevedo retó a alguien a que le dijera "coja" a la reina, Isabel de Borbón, la cual padecía este defecto. Sabiendo que era un tema delicado ninguno se atrevió a hacerlo. 

Quevedo, con su natural ingenio, se ofreció a hacerlo y, para evitar represalias, le llevó a la reina un clavel y una rosa, para que eligiera, la que mas le gustase, diciéndole: "Entre el clavel y la rosa, Su Majestad es-coja"

Un día paseando por el Real Alcázar, el rey le retó a improvisar un verso. Quevedo respondió: "Dadme pie",  el rey, bromeando, mostró su pie a Quevedo, que con su rapidez mental y habilidad para el juego de palabras dijo. "Parecerme gran señor, que estando en esta postura, yo parezco el herrador y vos la cabalgadura".

En una cena, al recibir una bofetada por mancharse con salsa, Quevedo respondió, golpeando al comensal de al lado, quien resultó ser el rey. En lugar de disculparse, con su habitual ingenio, exclamó: "¡Que siga la rueda!". 

Cuenta otra anécdota, que cierto día, el rey Felipe IV y Quevedo subían por una escalera del alcázar y el poeta, que iba delante, se agachó para atarse un zapato. 

Cuando Felipe pasó junto a él, le propinó una traviesa palmada en el trasero, que provocó que Quevedo se doblara hacia delante y no pudiera evitar, una ruidosa ventosidad. 

Felipe, le afeó el gesto y a Quevedo solo se le ocurrió responder: “No hay puerta a que llame Vuestra Majestad, que no se abra”.

La última anécdota con los Monarcas, que voy a relatar es aquella en que, por algún tipo de agravio que se desconoce, tal vez alguna impertinencia, mal recibida por el Rey, este desterró a Quevedo fuera de España diciéndole:

“Quevedo, me tenéis harto, os destierro; No volváis a pisar tierra española hasta que se os levante la pena” El poeta se fue a Portugal y allí cargó, con dos testigos, un carro con tierra portuguesa, y volvió a Madrid.

Al llegar a palacio, y sin descender del carro, solicitó que el Monarca saliese a una ventana, para rogarle el perdón. El Rey, indignado le soltó una reprimenda diciéndole:

“Pero como os atrevéis Quevedo a presentaros ante mí, cuando tenéis prohibido pisar tierra española” A lo que el poeta contestó:

“Señor no os parezca mal
Que venga a pedir perdón
Y os lo haga en el balcón.
Y en tierra de Portugal”


Afirmó señalando la tierra, que había en el carro Al parecer la chanza hizo gracia al Rey, que levantó el castigo.

Estas anécdotas reflejan la personalidad de Quevedo: ingenioso, satírico, valiente y con un profundo, conocimiento de las letras. 

viernes, 12 de septiembre de 2025

El golpe de Estado del general Miguel Primo de Rivera, apoyado por el Rey Alfonso XIII

 

Tal día como hoy, 13 de septiembre de 1923, el Capitán General de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, se sublevaba contra el Gobierno liberal de Manuel García Prieto, al dar en la ciudad de Barcelona un golpe de Estado que, dos días después, triunfaría con el apoyo del Rey Alfonso XIII.

El 13 de septiembre de 1923, el general Miguel Primo de Rivera, lideró un golpe de Estado en España, estableciendo una dictadura militar, que duró hasta 1930. Este golpe fue el resultado de una combinación de factores, incluyendo la crisis política y social del momento, el descontento, con el sistema de turnismo político y el desastre militar, en la Guerra de Marruecos.

Muchos fueron los motivos, que impulsaron el golpe de Estado de Primo de Rivera. El descontento del ejército tras el desastre de Annual, la política claudicante del Gobierno, en el Protectorado español de Marruecos, el auge de los nacionalismos periféricos, así como la difícil situación, que atravesaba el país.

Es por esto que, en la madrugada del 13 de septiembre de 1923, Miguel Primo de Rivera,proclamaba en Barcelona el estado de guerra. Lo hacía a las dos de la madrugada ante la prensa catalana, a la cual entregó un manifiesto, en el que justificaba la rebelión y anunciaba, la formación de un Directorio Inspector Militar, que tomaría el poder con el beneplácito del Rey Alfonso XIII que, en aquel momento, se encontraba en San Sebastián.

En un principio, no parecía que fuese a suceder pero finalmente así fue, aunque para ello Miguel Primo de Rivera ,tuvo que esperar dos días. Con el triunfo del golpe militar, los sublevados, suspendieron las garantías constitucionales al abolir la Constitución de 1876, y disolvieron las Cortes, sin apenas resistencia, y, ante la indiferencia popular.

De esta forma, comenzaba en España, un nuevo periodo, una dictadura militar liderada por Miguel Primo de Rivera que, respaldada por el Rey Alfonso XIII, duraría hasta enero de 1930, momento en el que Miguel Primo de Rivera, presentaba su dimisión ante el Rey Alfonso XIII, tras fracasar en su intento, por reforzar su posición ante la Corona. Dimisión que fue aceptada, por el monarca español en el acto.

El apoyo del Rey Alfonso XIII, a la dictadura de Primo de Rivera y posteriormente a su sustituto, el general Dámaso Berenguer, desprestigió enormemente a la Corona española, que cayó, el 14 de abril de 1931, con la proclamación de la Segunda República Española.

jueves, 11 de septiembre de 2025

La conquista de Gibraltar por las tropas del Rey Fernando IV de Castilla

Tal día como hoy, 12 de septiembre de 1309, las tropas del Rey Fernando IV de Castilla, comandadas por Guzmán "el Bueno", conquistaban Gibraltar a los musulmanes.

La conquista de Gibraltar, por las tropas de Fernando IV de Castilla ocurrió en 1309, como parte de una campaña militar más amplia, contra el Reino de Granada.

Las operaciones militares, fueron precedidas por negociaciones diplomáticas, con Jaime II de Aragón, y aunque supusieron un gran esfuerzo económico para ambas coronas, la nobleza castellana, dificultó la consecución de todos los objetivos inicialmente planteados.

Los antecedentes de la conquista de Gibraltar, tienen su origen en diciembre de 1308 cuando el Rey Fernando IV de CastilLa y los embajadores aragoneses, Bernaldo de Sarriá y Gonzalo García, firmaron el tratado de Alcalá de Henares.

En este pacto, ambos reinos acordaban iniciar una guerra, contra el Reino de Granada y se comprometían a no firmar una paz por separado, con el sultán granadino. Los dos monarcas, tenían que aportar las mismas fuerzas y el Rey Fernando IV de Castilla, también se comprometía a ceder una sexta, parte del Reino de Granada a Aragón.

Como adelanto de dicho acuerdo, Fernando IV le concedió al Rey Jaime II de Aragón el Reino de Almería en su totalidad, excepto las plazas de Bedmar, Locubín, Alcaudete, Quesada y Arenas, que habían formado parte, del Reino de Castilla y León en el pasado.

Tras la firma del tratado de Alcalá de Henares, los reyes de Castilla y Aragón enviaron embajadores a la corte de Aviñón, con el propósito de solicitar al Papa Clemente V, que la guerra que iban a iniciar contra el Reino de Granada, tuviese condición de cruzada. Solicitud, a la que el Papa Clemente V accedió, el 24 de abril de 1309.

Con la bendición de Roma, el 27 de julio de 1309, las tropas de Fernando IV de Castilla, comenzaron el asedio de Algeciras. Por su parte, el ejército aragonés, inició sus hostilidades contra los musulmanes, a mediados de agosto.

Una vez comenzado el asedio de Algeciras, el Rey Fernando IV de Castilla envió a parte de sus tropas a sitiar Gibraltar, bajo el mando de Guzmán "el Bueno". No se sabe con exactitud cuando comenzó el sitio, sí se sabe cuando cayó la ciudad, el 12 de septiembre de 1309.

En conjunto, la campaña del año 1309, resultó más provechosa para las armas del reino de Castilla, que para las de Aragón, ya que Fernando IV, pudo incorporar Gibraltar a sus dominios. 


miércoles, 10 de septiembre de 2025

La caída de Barcelona en 1714, durante la Guerra de Sucesión Española

Tal día como hoy, 11 de septiembre de 1714, en el marco de la Guerra de Sucesión Española, la ciudad de Barcelona caía ante las tropas de Felipe V, tras casi un año de asedio

La caída de Barcelona, supuso el fin de la Guerra de Sucesión tras 14 años de enfrentamientos. También la consolidación de Felipe V, como Rey de España

La resistencia catalana, leal al Archiduque Carlos, defendió la ciudad hasta el final, pero el asalto del mariscal Berwick, culminó con la capitulación de Barcelona, lo que llevó a la imposición del Decreto de Nueva Planta y la supresión, de las instituciones catalanas.

El origen del conflicto, tiene lugar a principios del S. XVIII, cuando el Rey Carlos II  "el hechizado", muere sin descendencia. En su testamento Felipe V, nieto de Luis XIV de Francia y bisnieto de Felipe IV, fue nombrado su sucesor.

La cesión del trono español a Felipe V, generó una fuerte controversia, entre las grandes potencias europeas. El Sacro Imperio Romano Germánico, Inglaterra, las Provincias Unidas de los Países Bajos, el Ducado de Saboya y Portugal, conformaron la Gran Alianza de La Haya, un bloque antiborbónico que, ante el miedo de una alianza entre España y Francia, pretendieron imponer a un candidato alternativo a Felipe de Anjou, el archiduque Carlos de Austria.

Con la intención de evitar, que la casa de Borbón rompiese el equilibrio entre las potencias europeas, dio comienzo en el año 1701, un conflicto bélico internacional, por la sucesión de la monarquía hispánica.

El 11 de septiembre de 1714, el mismo día que Barcelona capituló, el Conseller en Cap de Barcelona, Rafael Casanova,  publicó un bando, ordenando a los ciudadanos de Barcelona, que acudieran a los lugares designados, para defender la ciudad, contra las tropas borbónicas francesas, con el lema de :"derramar gloriosamente su sangre y su vida por su Rey, por su honor, por la Patria y por la libertad de toda España"

Tras vencer las tropas borbónicas, batallas decisivas como las de Almansa, Brihuega o Villaviciosa y producirse la muerte, del  Emperador del Sacro Imperio Romano, José I de Habsburgo, se firma en 1713 el tratado de Utrecht. Pacto que pondría fin a la guerra, entre la Gran Alianza de la Haya y las tropas borbónicas. 

De esta forma, la Guerra de Sucesión Española dejaba de ser un conflicto internacional. No obstante, los combates continuaron en la península, especialmente en Cataluña.

El sitio de Barcelona, fue una de las últimas operaciones militares, de la Guerra de Sucesión. Las tropas borbónicas contaban con un total de 40.000 hombres que, tras un año de asedio, lograron la rendición de la ciudad, que, unida a la capitulación de Mallorca, puso punto y final a la Guerra de Sucesión Española.

Desde el año 1980, en recuerdo a los barceloneses caídos, durante el sitio de Barcelona, se celebra en Cataluña "la Diada Nacional de Cataluña".