miércoles, 17 de septiembre de 2025

La "revolución Gloriosa": fin del reinado de Isabel II de España

Tal día como hoy, 18 de septiembre de 1868, debido al gran descontento popular, contra el régimen monárquico de Isabel II, estallaba en la ciudad de Cádiz, un golpe de Estado encabezado por los generales Serrano, Prim y Topete, que acabaría con el reinado de Isabel II y pasaría a la historia como "La Gloriosa" o "Revolución del 68".

La "Revolución Gloriosa" en España, también conocida como la Revolución de 1868, fue un levantamiento militar y civil, que culminó con el derrocamiento y exilio de la reina Isabel II. Este evento marcó, el fin del reinado de Isabel II y el inicio del Sexenio Democrático, un período de cambios políticos y sociales en España.

Existía un amplio descontento popular, hacia el reinado de Isabel II, debido a la corrupción política, la inestabilidad económica, y la falta de libertades.

El origen del pronunciamiento, que acaba con el reinado de Isabel II, tiene lugar dos años antes, en agosto de 1866 cuando el general progresista Juan Prim, consigue en Bélgica un acuerdo entre progresistas y demócratas, para derrocar a la Reina, acuerdo que se conoce como el Pacto de Ostende.  

Dos años después, en marzo de 1868, Prim conseguía un nuevo aliado para su lucha, al firmar un acuerdo con el general Serrano, por el cual la Unión Liberal, se sumaba al Pacto de Ostende.

Tras llegar a estos acuerdos, los actores implicados comenzaron sus preparativos. Todo estaba preparado, a principios de septiembre. También el plan que se iba a llevar adelante y el 18 de septiembre de 1868, los generales Serrano, Prim y Topete se sublevaron contra la Reina Isabel II, en la ciudad de Cádiz.

La revolución fue liderada por militares, como el general Prim y el almirante Topete, quienes se sublevaron en Cádiz, marcando el inicio del movimiento. La Armada se sublevó en Cádiz el 18 de septiembre de 1868, seguido por el ejército

En los días posteriores, el levantamiento se extendió, por el resto del país como la pólvora. Tanto fue así que el por aquel entonces presidente del Consejo de ministros, el general José Gutiérrez de la Concha, no recibió respuesta de ningún general, tras llamar al ejército a combatir la revolución.

El general de la Concha, se las ingenió para organizar un pequeño ejército, para enfrentarse  a los sublevados. Dicho ejército fue derrotado por los revolucionarios, en la "Batalla del Puente de Alcolea", en  Cordoba 

La victoria significó prácticamente, el triunfo del levantamiento, que el 29 de septiembre de 1868 se hizo con la ciudad de Madrid y terminó obligando, a la Reina Isabel II a huir del país y exiliarse en Francia. 

A partir del triunfo de la revolución y durante seis años conocidos como el Sexenio Democrático, de 1868 a1874 ,se intentará crear en España un nuevo sistema de gobierno.  

La coalición de liberales, moderados y republicanos, se enfrentaba a la tarea de encontrar un mejor gobierno, que sustituyera al de Isabel. Al principio las Cortes, rechazaron el concepto de una república para España, y Serrano fue nombrado regente, mientras se buscaba un monarca adecuado, para liderar el país. Previamente se había aprobado una constitución de corte liberal que fue promulgada por las cortes en 1869.

La búsqueda de un rey apropiado, demostró finalmente ser más que problemática, para las Cortes. Juan Prim, el eterno rebelde contra los gobiernos isabelinos, fue nombrado dirigente del gobierno en 1869 y el general Serrano sería regente, y suya es la frase: "Encontrar a un rey democrático en Europa es tan difícil como encontrar un ateo en el cielo!" 

Se consideró incluso la opción de nombrar rey a un anciano general Baldomero Espartero, aunque no quiso serlo pese a que, no obstante, obtuvo muchos votos en el recuento final. 

Finalmente, a instancias de Prim, las Cortes decidieron en 1870 ofrecer la corona a la dinastía Saboya: Amadeo, el segundogénito del rey italiano Víctor Manuel II, tenía un perfil liberal, que parecía satisfacer un punto medio, entre los deseos de las diversas facciones, que habían instigado la revuelta.

Sin embargo, resultó ser todo lo contrario: logró unirlas pero solo contra él y, harto de la imposibilidad de reinar, en un país dividido, en constantes luchas por el poder, abdicó al cabo de dos años.



No hay comentarios:

Publicar un comentario