domingo, 9 de enero de 2022

Biografía de Rigoberta Menchú

 

Tal día como hoy 9 de enero de 1959 nace la líder indígena guatemalteca Rigoberta Menchú. La activista y defensora de los derechos humanos, ganó el Premio Nobel de la Paz en 1992 y utilizó el dinero del galardón para crear una fundación, a través de la cual seguir luchando por los derechos de los indígenas.

Rigoberta Menchú nació en una numerosa familia campesina de la etnia maya-quiché, cuyos ancestros forjaron, entre los siglos III y XV, la esplendorosa civilización de los mayas. A los cinco años empezó a trabajar junto a sus padres en las grandes fincas de las poderosas familias del país; posteriormente, en la adolescencia, trabajó durante dos años en la capital guatemalteca como empleada doméstica.

Su infancia y su juventud estuvieron marcadas por la pobreza, la discriminación racial y la violenta represión con la que las clases dominantes guatemaltecas trataban de contener las aspiraciones de justicia social del campesinado. Bajo el gobierno militar de Fernando Romeo Lucas García entre 1978 y1982, varios miembros de su familia fueron torturados y asesinados por los militares o por la policía paralela de los “escuadrones de la muerte”.

Uno de sus hermanos, con sólo dieciséis años, fue víctima de los terratenientes que empleaban escuadrones a sueldo para arrebatar las tierras a los indígenas; su padre, Vicente Menchú, murió con un grupo de treinta y ocho campesinos que se encerraron en la embajada de España en un acto de protesta, cuando la policía incendió el local quemando vivos a los que estaban en su interior en 1980. Pocos meses después, su madre fue secuestrada, torturada y asesinada por grupos paramilitares.

Mientras dos de sus hermanas optaban por unirse a la guerrilla, Rigoberta inició una campaña pacífica de denuncia del régimen guatemalteco y de la sistemática violación de los derechos humanos de que eran objeto los campesinos indígenas, sin otra ideología que el cristianismo de matices revolucionarios de la “teología de la liberación”; ella personificaba el sufrimiento de su pueblo con dignidad e inteligencia, añadiéndole denunciar la situación de la mujer indígena en Hispanoamérica.

Para escapar a la represión se exilió en México, donde en 1983 se publicó su autobiografía, titulada Me llamo Rigoberta Menchú y así me nació la conciencia. La activista relató en este libro su historia personal y de su comunidad indígena a la antropóloga Elizabeth Burgos; acerca de las costumbres y tradiciones practicadas por los quichés, la obra incluye sus reflexiones sobre proceso de transculturación al que han estado sometidos los pueblos indígenas, dejando ver su propio proceso de toma de conciencia.

Rigoberta Menchú recorrió el mundo con su mensaje y consiguió ser escuchada en las Naciones Unidas. En 1988 regresó a Guatemala, protegida por su prestigio internacional, para continuar denunciando las injusticias, pero fue detenida en el mismo aeropuerto y obligada a abandonar el país.

Con el respaldo de Desmond Tutu, Adolfo Pérez Esquivel y otras personalidades que apoyaron su candidatura, Rigoberta Menchú fue reconocida con el premio Nobel de la Paz en 1992, coincidiendo con los actos oficiales del quinto centenario del descubrimiento de América. Sólo un guatemalteco, el escritor Miguel Ángel Asturias, había recibido el galardón de la academia sueca con anterioridad. Con la dotación económica del premio, Rigoberta abrió, en México y en Guatemala, la fundación que lleva su nombre.

Su posición, le permitió actuar como mediadora, en el proceso de paz entre el Gobierno y la guerrilla , que culminó en 1996 con la firma de los acuerdos de paz. A partir de entonces, después de la desmovilización del Ejército y de la guerrilla, trabajó activamente en la reincorporación de los exiliados de la guerra, a sus lugares de origen. En 1998 publicó “La nieta de los mayas”, libro que ayuda a comprender la idiosincrasia indígena, y ese mismo año fue galardonada, con el premio Príncipe de Asturias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario