Tal día como hoy 28 de febrero de 1482, durante la Guerra de Granada, Rodrigo Ponce de León y Núñez, conquista para el Reino de Castilla la plaza de Alhama de Granada.
Alhama - que en árabe significa “manantial de agua caliente” - toma su nombre de los baños termales de los romanos y, alcanzó su máxima trascendencia histórica durante el periodo de plaza fuerte del reino nazarí de Granada, en que la ciudad experimentó gran auge comercial, económico y urbanístico, que la hicieron convertirse en una de las más valiosas del Reino y una de las más codiciadas para los Reyes Católicos.
Su toma por los ejércitos de los soberanos de la Corona de Castilla el 28 de febrero de 1482, en represalia por la toma nazarí de Zahara de la Sierra -Cádiz - en 1481 y significó el inicio de la Guerra de Granada.
Durante la guerra, ya en manos castellanas, Alhama sufrió varios sitios por parte de las fuerzas nazaríes, todos sin éxito. Durante el tercero, entre 1484 y 1485, el alcaide de Alhama, Íñigo López de Mendoza - ante la falta de monedas metálicas - ordenó el uso de papel moneda.
Tras la conquista cristiana por Rodrigo Ponce de León, la plaza conservó su importancia estratégica y económica y en 1486 los Reyes Católicos nombraron a Hernán Pérez del Pulgar, Capitán General de Alhama, en premio a su valor al protagonizar una arriesgada operación en la que logró eludir el cerco y llegar hasta Antequera para pedir auxilio, evitando la pérdida de Alhama.
Una vez consumada la conquista, comienzan a producirse cambios importantes en la ciudad y las mezquitas se fueron sustituyendo por iglesias; los zocos, dan paso a plazas abiertas y los Reyes Católicos dotan a la ciudad de nuevos edificios, acordes con la nueva estructura civil y burocrática, en espera de la conquista definitiva del Reino Nazarí.
Tras el apogeo alcanzado durante la Edad Media, Alhama cayó en un profundo olvido, pese a lo cual, fue protagonista de un siglo XIX muy convulso en todo el país, sufriendo, la ocupación de las tropas francesas de Napoleón y las desamortizaciones que afectaron a sus bienes eclesiásticos.
Para finalizar este periodo histórico, un infortunio volverá a convertir a la ciudad y su comarca, en el centro de interés de medio mundo, debido al terrible terremoto acontecido el 25 de diciembre de 1884, conocido como “Terremoto de Andalucía de 1884”, que asoló las provincias de Granada y Málaga.
Relación efemérides históricas; cuentos, reflexiones, poesias...
miércoles, 28 de febrero de 2018
martes, 27 de febrero de 2018
El "Grito de Asencio", inicio de la emancipación de Uruguay
Tal día como hoy 27 de febrero de 181l, en la Banda Oriental - Uruguay- un grupo de revolucionarios deciden emprender las primeras acciones contra la Corona de España que tendrán lugar al día siguiente con el episodio conocido como “el Grito de Asencio”.
El Grito de Asencio, fue la decisión tomada por criollos de la Banda Oriental a orillas del arroyo Asencio, de emprender las primeras acciones revolucionarias contra las autoridades realistas españolas de Montevideo
Tras producirse la Revolución de Mayo en Buenos Aires en 1810, la parte de la Banda Oriental dependiente de Montevideo permaneció fiel al gobierno español y a principios de 1811 solo la villa de Belén permanecía obediente a Buenos Aires, pues el resto del territorio oriental fue obligado a obedecer a las autoridades realistas que trasladaron su base a Montevideo.
Francisco Javier de Elío volvió a Montevideo desde España con el título de virrey del Río de la Plata y desde ese momento inició los preparativos para declarar la guerra a la Junta de Buenos Aires, lo que hizo el 12 de febrero y tomó una serie de medidas fiscales que le permitían hacerse de recursos: regularización de títulos de propiedad de tierras, solicitud de donativos patrióticos, impuestos al cuero, tabaco, etc, permitiendo el comercio solo a buques autorizados.
Estas medidas perjudicaron a hacendados, comerciantes, y navieros en su actividad mercantil, que estaba decayendo por la situación de crisis y el control español, ya que impedía el comercio con los británicos.
En consecuencia, algunos jefes militares al servicio del gobierno español, se pasaron al bando revolucionario, como José Artigas, quien abandonó la guarnición realista y se puso bajo las órdenes del gobierno rebelde de Buenos Aires.
El día 24 de febrero llegó la noticia, la declaración de guerra por parte de Buenos Aires y el 27 de febrero el contingente de revolucionarios comandado por Pedro José Viera decidió emprender las primeras acciones y tomaron la cercana población de Mercedes y Santo Domingo Soriano.
El incipiente movimiento recibiría un fuerte impulso con la incorporación de Artigas, que se convertiría en el líder de la revolución en la Banda Oriental.
En el parque Asencio, lugar donde al parecer se desarrollaron los hechos, se levanta actualmente el monumento al Grito de Asencio, con el escudo de Uruguay y los escudos de todo el país, con tierra de cada uno de los departamentos.
El Grito de Asencio, fue la decisión tomada por criollos de la Banda Oriental a orillas del arroyo Asencio, de emprender las primeras acciones revolucionarias contra las autoridades realistas españolas de Montevideo
Tras producirse la Revolución de Mayo en Buenos Aires en 1810, la parte de la Banda Oriental dependiente de Montevideo permaneció fiel al gobierno español y a principios de 1811 solo la villa de Belén permanecía obediente a Buenos Aires, pues el resto del territorio oriental fue obligado a obedecer a las autoridades realistas que trasladaron su base a Montevideo.
Francisco Javier de Elío volvió a Montevideo desde España con el título de virrey del Río de la Plata y desde ese momento inició los preparativos para declarar la guerra a la Junta de Buenos Aires, lo que hizo el 12 de febrero y tomó una serie de medidas fiscales que le permitían hacerse de recursos: regularización de títulos de propiedad de tierras, solicitud de donativos patrióticos, impuestos al cuero, tabaco, etc, permitiendo el comercio solo a buques autorizados.
Estas medidas perjudicaron a hacendados, comerciantes, y navieros en su actividad mercantil, que estaba decayendo por la situación de crisis y el control español, ya que impedía el comercio con los británicos.
En consecuencia, algunos jefes militares al servicio del gobierno español, se pasaron al bando revolucionario, como José Artigas, quien abandonó la guarnición realista y se puso bajo las órdenes del gobierno rebelde de Buenos Aires.
El día 24 de febrero llegó la noticia, la declaración de guerra por parte de Buenos Aires y el 27 de febrero el contingente de revolucionarios comandado por Pedro José Viera decidió emprender las primeras acciones y tomaron la cercana población de Mercedes y Santo Domingo Soriano.
El incipiente movimiento recibiría un fuerte impulso con la incorporación de Artigas, que se convertiría en el líder de la revolución en la Banda Oriental.
En el parque Asencio, lugar donde al parecer se desarrollaron los hechos, se levanta actualmente el monumento al Grito de Asencio, con el escudo de Uruguay y los escudos de todo el país, con tierra de cada uno de los departamentos.
lunes, 26 de febrero de 2018
Historia de la Luftwaffe en la Segunda Guerra Mundial
Tal día como hoy 26 de febrero de 1935, a pesar de que el Tratado de Versalles prohíbe expresamente la aviación militar en Alemania, Adolf Hitler organiza secretamente, bajo la dirección de Hermann Goering, la moderna fuerza aérea de la Alemania nazi, la temible Luftwaffe.
Formando parte de la Wehrmacht, la Luftwaffe - literalmente “Arma Aérea” en alemán - era la fuerza aérea de Alemania en la época nazi, creada en 1924 y reorganizada tras la llegada de los nazis al poder en una clara violación del tratado de Versalles, con el propósito de apoyar la “guerra relámpago” de Hitler a través de Europa.
Los aviones que iban a servir en la Luftwaffe eran de una nueva era y técnicamente superiores a la mayoría de las aeronaves de otras naciones en los años 1930 y modelos como el Junkers Ju 87 Stuka y el Messerschmitt Bf 109 - absolutamente novedosos por su tecnología - pasaron a simbolizar el poder aéreo alemán.
Fue probada en combate durante la Guerra Civil Española, la Luftwaffe era una de las fuerzas aéreas más fuertes, avanzadas y experimentadas en combate del mundo en el momento que estalló la Segunda Guerra Mundial en Europa en septiembre de 1939.
La Luftwaffe se convirtió en un componente esencial en las campañas militares alemanas, en apoyo de las fuerzas terrestres y ayudó a que los ejércitos alemanes conquistaran la mayor parte del continente europeo en una serie de cortas y decisivas campañas en los nueve primeros meses de la guerra.
Sufrió su primera derrota ante la Real Fuerza Aérea Británica -RAF - durante la Batalla de Inglaterra en 1940, pero a pesar de este revés la Luftwaffe siguió resultando formidable y en junio de 1941 se embarcó en la búsqueda de un imperio en Europa oriental por medio de la invasión de la Unión Soviética en la denominada “Operación Barbarroja”, con un gran éxito inicial.
Sin embargo, las victorias de la Luftwaffe en la Unión Soviética se vieron frenadas por el frio del invierno ruso de 1941-1942.
Habiendo fallado en la consecución de la victoria sobre la Unión Soviética en 1941 y 1942, la Luftwaffe se vio envuelta en una gran guerra de desgaste que se extendía desde el Norte de África hasta el Frente del Canal de la Mancha.
Con la entrada de los Estados Unidos en la guerra y el resurgimiento del poder ofensivo de la RAF se creó el frente en terreno alemán, y la fuerza de la Luftwaffe se fue erosionando lentamente y a mediados de 1944 prácticamente había desaparecido de los cielos de Europa Occidental dejando al Ejército alemán indefenso sin apoyo aéreo.
No obstante, continuó luchando hasta los últimos días de la guerra con una nueva generación de aviones propulsados por motores de reacción turborreactor, como los Messerschmitt Me 262 y Heinkel He 162, e incluso con aviones cohete como el Messerschmitt Me 163.
Terminado el conflicto, investigadores militares norteamericanos, usando sistemas propios de FBI se dieron a la tarea de examinar los archivos de la Luftwaffe, pues no podían creer las cifras de aviones derribados por los ases de Alemania, diez veces mayor que las de sus mejores hombres.
Sin embargo tuvieron que rendirse ante la evidencia, y aún consideraron que el número de aviones abatidos por los principales pilotos de Hitler era superior al realmente declarado.
Formando parte de la Wehrmacht, la Luftwaffe - literalmente “Arma Aérea” en alemán - era la fuerza aérea de Alemania en la época nazi, creada en 1924 y reorganizada tras la llegada de los nazis al poder en una clara violación del tratado de Versalles, con el propósito de apoyar la “guerra relámpago” de Hitler a través de Europa.
Los aviones que iban a servir en la Luftwaffe eran de una nueva era y técnicamente superiores a la mayoría de las aeronaves de otras naciones en los años 1930 y modelos como el Junkers Ju 87 Stuka y el Messerschmitt Bf 109 - absolutamente novedosos por su tecnología - pasaron a simbolizar el poder aéreo alemán.
Fue probada en combate durante la Guerra Civil Española, la Luftwaffe era una de las fuerzas aéreas más fuertes, avanzadas y experimentadas en combate del mundo en el momento que estalló la Segunda Guerra Mundial en Europa en septiembre de 1939.
La Luftwaffe se convirtió en un componente esencial en las campañas militares alemanas, en apoyo de las fuerzas terrestres y ayudó a que los ejércitos alemanes conquistaran la mayor parte del continente europeo en una serie de cortas y decisivas campañas en los nueve primeros meses de la guerra.
Sufrió su primera derrota ante la Real Fuerza Aérea Británica -RAF - durante la Batalla de Inglaterra en 1940, pero a pesar de este revés la Luftwaffe siguió resultando formidable y en junio de 1941 se embarcó en la búsqueda de un imperio en Europa oriental por medio de la invasión de la Unión Soviética en la denominada “Operación Barbarroja”, con un gran éxito inicial.
Sin embargo, las victorias de la Luftwaffe en la Unión Soviética se vieron frenadas por el frio del invierno ruso de 1941-1942.
Habiendo fallado en la consecución de la victoria sobre la Unión Soviética en 1941 y 1942, la Luftwaffe se vio envuelta en una gran guerra de desgaste que se extendía desde el Norte de África hasta el Frente del Canal de la Mancha.
Con la entrada de los Estados Unidos en la guerra y el resurgimiento del poder ofensivo de la RAF se creó el frente en terreno alemán, y la fuerza de la Luftwaffe se fue erosionando lentamente y a mediados de 1944 prácticamente había desaparecido de los cielos de Europa Occidental dejando al Ejército alemán indefenso sin apoyo aéreo.
No obstante, continuó luchando hasta los últimos días de la guerra con una nueva generación de aviones propulsados por motores de reacción turborreactor, como los Messerschmitt Me 262 y Heinkel He 162, e incluso con aviones cohete como el Messerschmitt Me 163.
Terminado el conflicto, investigadores militares norteamericanos, usando sistemas propios de FBI se dieron a la tarea de examinar los archivos de la Luftwaffe, pues no podían creer las cifras de aviones derribados por los ases de Alemania, diez veces mayor que las de sus mejores hombres.
Sin embargo tuvieron que rendirse ante la evidencia, y aún consideraron que el número de aviones abatidos por los principales pilotos de Hitler era superior al realmente declarado.
domingo, 25 de febrero de 2018
El Colt 45, arma mítica del oeste americano
Tal día como hoy 25 de febrero de 1836, Samuel Colt patenta el revólver, cuya principal ventaja reside en la posibilidad de realizar 6 disparos sin necesidad de recargar cada vez el arma.
Samuel Colt fue un inventor y empresario estadounidense célebre por su participación en la industria de las armas, que desde muy joven, mostró gran interés por las armas y explosivos, hasta ser expulsado a los 16 años del centro en él que estudiaba al destruir parte del edificio durante un experimento.
Su padre, propietario de una fábrica de tejidos, lo envió en un viaje por mar hasta la India y en Calcuta, Colt vio un primitivo modelo de revólver, con un mecanismo muy inseguro y al volver a Estados Unidos observó en el barco un trinquete empleado para elevar el ancla y basándose en él talló en madera un mecanismo para accionar el tambor del revólver.
Financiado por su padre, Colt creó un modelo funcional de revólver que patentó en Gran Bretaña y EE. UU. en 1835 y 1836, respectivamente y fundó la Paterson Arms Manufacturing Company, fabricando un revólver de cinco disparos del calibre 36, de simple acción.
La falta de inversores le impidió comprar maquinaria y los revólveres fueron fabricados a mano, por lo que su precio es muy alto y la compañía quebró en 1842.
Colt aprendió de esta experiencia y alquiló una industria totalmente equipada para abaratar el coste de cada arma y diseñó un nuevo modelo perfeccionado de seis disparos.
Posteriormente Colt funda, la "Colt's Firearms Company'", e inventa prototipos de cables para accionar minas marinas a distancia para el gobierno, pero éste pierde el interés y Colt convence a Samuel Morse para emplear su descubrimiento en el tendido del primer enlace telegráfico submarino entre Nueva York y Coney Island en 1843.
Poco después, en 1847, los Rangers de Texas se ponen en contacto con él, impresionados por su primer revólver, para encargarle 1.000 y diseña una línea de montaje en cadena con piezas estándar totalmente intercambiables entre sí, algo totalmente nuevo en la industria de armamento.
La industria de Colt creció enseguida, siendo proveedor de ejércitos y particulares de todo el mundo y sigue existiendo hoy en día.
En 2013 el contrato de suministro al ejército de Estados Unidos finalizó y 2014 cerro balance con perdidas del 30% lo que ha complicado la situación financiera de la empresa. Los financiadores de Colt han acordado proveer 20 millones adicionales para que la empresa pueda seguir sus actividades con normalidad durante el proceso de suspensión de pagos.
Su modelo más famoso fue posiblemente el revólver Colt 45 de simple acción - diseñado en 1872- utilizado por el ejército y actor invitado en la mayoría de las películas del género del oeste.
La popularidad de sus armas hizo que se acuñase la célebre frase: "Dios creó a los hombres libres; Samuel Colt los hizo a todos iguales".
Samuel Colt fue un inventor y empresario estadounidense célebre por su participación en la industria de las armas, que desde muy joven, mostró gran interés por las armas y explosivos, hasta ser expulsado a los 16 años del centro en él que estudiaba al destruir parte del edificio durante un experimento.
Su padre, propietario de una fábrica de tejidos, lo envió en un viaje por mar hasta la India y en Calcuta, Colt vio un primitivo modelo de revólver, con un mecanismo muy inseguro y al volver a Estados Unidos observó en el barco un trinquete empleado para elevar el ancla y basándose en él talló en madera un mecanismo para accionar el tambor del revólver.
Financiado por su padre, Colt creó un modelo funcional de revólver que patentó en Gran Bretaña y EE. UU. en 1835 y 1836, respectivamente y fundó la Paterson Arms Manufacturing Company, fabricando un revólver de cinco disparos del calibre 36, de simple acción.
La falta de inversores le impidió comprar maquinaria y los revólveres fueron fabricados a mano, por lo que su precio es muy alto y la compañía quebró en 1842.
Colt aprendió de esta experiencia y alquiló una industria totalmente equipada para abaratar el coste de cada arma y diseñó un nuevo modelo perfeccionado de seis disparos.
Posteriormente Colt funda, la "Colt's Firearms Company'", e inventa prototipos de cables para accionar minas marinas a distancia para el gobierno, pero éste pierde el interés y Colt convence a Samuel Morse para emplear su descubrimiento en el tendido del primer enlace telegráfico submarino entre Nueva York y Coney Island en 1843.
Poco después, en 1847, los Rangers de Texas se ponen en contacto con él, impresionados por su primer revólver, para encargarle 1.000 y diseña una línea de montaje en cadena con piezas estándar totalmente intercambiables entre sí, algo totalmente nuevo en la industria de armamento.
La industria de Colt creció enseguida, siendo proveedor de ejércitos y particulares de todo el mundo y sigue existiendo hoy en día.
En 2013 el contrato de suministro al ejército de Estados Unidos finalizó y 2014 cerro balance con perdidas del 30% lo que ha complicado la situación financiera de la empresa. Los financiadores de Colt han acordado proveer 20 millones adicionales para que la empresa pueda seguir sus actividades con normalidad durante el proceso de suspensión de pagos.
Su modelo más famoso fue posiblemente el revólver Colt 45 de simple acción - diseñado en 1872- utilizado por el ejército y actor invitado en la mayoría de las películas del género del oeste.
La popularidad de sus armas hizo que se acuñase la célebre frase: "Dios creó a los hombres libres; Samuel Colt los hizo a todos iguales".
sábado, 24 de febrero de 2018
Historia del Tranvía de Granada a Sierra Nevada
Tal día como hoy 24 de febrero de 1925, en Granada se inaugura el tranvía a Sierra Nevada, que permitía la comunicación entre muchos pueblos de la provincia y funcionó entre 1925 y 1974.
Hasta cuatro proyectos distintos se presentaron con anterioridad al proyecto definitivo, por iniciativa de Julio Quesada Cañaveral y Piédrola y sus socios con el establecimiento de la Sociedad Anónima del Tranvía-Ferrocarril de Granada a Sierra Nevada en 1919, iniciándose las obras en 1921 para conectar la zona de las Vistillas, en Granada, hasta El Charcón y desde aquí hasta Sierra Nevada.
El trazado seguía el curso del río Genil paralelo a la carretera de Granada a Sierra Nevada hasta la localidad de Pinos Genil, atravesando catorce túneles y veinte puentes.
Debido a dificultades económicas y a los avatares políticos de España, hubo que esperar hasta 1944 para la puesta en funcionamiento del tramo entre Maitena y Barranco de San Juan y aquí se proyectó la construcción de un funicular hasta las pistas de esquí de Sierra Nevada, que nunca llegó a construirse.
En 1971 la gestión pasa a FEVE - Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha - siendo clausurado el 19 de enero de 1974, con un trazado total de 24 kilómetros, que fue anegado en parte tras la construcción del embalse de Canales.
El 19 de enero de 1974, el tranvía entre Granada y Sierra Nevada completó su último viaje y ese mismo día, ya se le empezó a echar de menos. No hubo nada extraordinario, solo el acudir en masa del público granadino “para decirle adiós al vehículo que tantas ocasiones de felicidad le había proporcionado".
Actualmente, el tranvía se ha convertido en casi una leyenda, que las generaciones mayores les cuentan a los jóvenes cuando hacen senderismo y se acercan a los restos de aquella infraestructura.
Existen diferentes imágenes antiguas sobre el tranvía que, en su conjunto, acumulan más de 80.000 reproducciones en YouTube.
En cualquier caso, no deja de sorprender la falta de visión que se tuvo en aquel momento para no dejar parte de su trayecto intacto pensando en lo que podía servir para el turismo o las familias.
Ahora, solo queda la nostalgia por lo que fue y por lo que, tristemente, ya no es hoy.
Hasta cuatro proyectos distintos se presentaron con anterioridad al proyecto definitivo, por iniciativa de Julio Quesada Cañaveral y Piédrola y sus socios con el establecimiento de la Sociedad Anónima del Tranvía-Ferrocarril de Granada a Sierra Nevada en 1919, iniciándose las obras en 1921 para conectar la zona de las Vistillas, en Granada, hasta El Charcón y desde aquí hasta Sierra Nevada.
El trazado seguía el curso del río Genil paralelo a la carretera de Granada a Sierra Nevada hasta la localidad de Pinos Genil, atravesando catorce túneles y veinte puentes.
Debido a dificultades económicas y a los avatares políticos de España, hubo que esperar hasta 1944 para la puesta en funcionamiento del tramo entre Maitena y Barranco de San Juan y aquí se proyectó la construcción de un funicular hasta las pistas de esquí de Sierra Nevada, que nunca llegó a construirse.
En 1971 la gestión pasa a FEVE - Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha - siendo clausurado el 19 de enero de 1974, con un trazado total de 24 kilómetros, que fue anegado en parte tras la construcción del embalse de Canales.
El 19 de enero de 1974, el tranvía entre Granada y Sierra Nevada completó su último viaje y ese mismo día, ya se le empezó a echar de menos. No hubo nada extraordinario, solo el acudir en masa del público granadino “para decirle adiós al vehículo que tantas ocasiones de felicidad le había proporcionado".
Actualmente, el tranvía se ha convertido en casi una leyenda, que las generaciones mayores les cuentan a los jóvenes cuando hacen senderismo y se acercan a los restos de aquella infraestructura.
Existen diferentes imágenes antiguas sobre el tranvía que, en su conjunto, acumulan más de 80.000 reproducciones en YouTube.
En cualquier caso, no deja de sorprender la falta de visión que se tuvo en aquel momento para no dejar parte de su trayecto intacto pensando en lo que podía servir para el turismo o las familias.
Ahora, solo queda la nostalgia por lo que fue y por lo que, tristemente, ya no es hoy.
viernes, 23 de febrero de 2018
La Batalla de El Álamo
Tal día como hoy 23 de febrero de 1836, en San Antonio -Texas- comienza la Batalla de El Álamo.
La batalla de El Álamo, fue un conflicto, desde el 23 de febrero al 6 de marzo de 1836, crucial en la Revolución de Texas, que enfrentó al ejército de México, encabezado por el presidente Antonio López de Santa Anna, contra una milicia de texanos, en su mayoría colonos estadounidenses, en San Antonio de Béjar, en la entonces provincia mexicana de Coahuila y hoy estado de Texas de los Estados Unidos.
Todos los beligerantes en favor de Texas murieron, a excepción de dos personas, lo cual movió a muchos colonos texanos y aventureros estadounidenses a unirse al ejército de Texas, animados por el deseo de venganza, por la crueldad mostrada por Santa Anna durante el asedio.
Varios meses antes, aproximadamente 100 texanos se guarnecían entonces en El Álamo. La fuerza texana creció con la llegada de refuerzos dirigidos por los comandantes James Bowie y William Barret Travis.
El 23 de febrero unos 1 500 soldados mexicanos marcharon hacia San Antonio de Béjar, como el primer paso en una campaña para retomar Texas y durante los siguientes 12 días, los dos ejércitos participaron en varias escaramuzas con bajas mínimas.
Consciente de que su guarnición no podía resistir el ataque de una fuerza tan grande, Travis escribió varias cartas pidiendo más hombres y suministros, pero llegaron menos de 100 refuerzos.
En la madrugada del 6 de marzo, el ejército mexicano avanzó hacia El Álamo y tras rechazar dos ataques, los texanos fueron incapaces de defenderse de un tercero y la mayoría de los soldados texanos huyeron hacia los edificios interiores. Los defensores que no pudieron llegar a los edificios, fueron asesinados por la caballería mexicana, siendo probable que entre cinco y siete de ellos se hubiesen rendido, siendo ejecutados al instante.
La mayoría de los relatos de testigos oculares, informaron de entre 182 y 257 texanos muertos, mientras que la mayoría de los historiadores de El Álamo están de acuerdo en que hubo entre 400 y 600 soldados mexicanos heridos o muertos en combate.
La noticia del desastre, desató el pánico y las fuerzas texanas - en su mayoría colonos - huyeron del avance del ejército mexicano.
Los texanos el 21 de abril de 1836, derrotaron y masacraron mientras dormían, al ejército mexicano en la batalla de San Jacinto, poniendo fin al movimiento revolucionario.
El Álamo actualmente, es el lugar turístico más popular de Texas, ya que la mayoría de los estadounidenses están familiarizados con los mitos difundidos por muchas de las películas, entre las cuales se incluye El Álamo de John Wayne, estrenada en 1960.
La batalla de El Álamo, fue un conflicto, desde el 23 de febrero al 6 de marzo de 1836, crucial en la Revolución de Texas, que enfrentó al ejército de México, encabezado por el presidente Antonio López de Santa Anna, contra una milicia de texanos, en su mayoría colonos estadounidenses, en San Antonio de Béjar, en la entonces provincia mexicana de Coahuila y hoy estado de Texas de los Estados Unidos.
Todos los beligerantes en favor de Texas murieron, a excepción de dos personas, lo cual movió a muchos colonos texanos y aventureros estadounidenses a unirse al ejército de Texas, animados por el deseo de venganza, por la crueldad mostrada por Santa Anna durante el asedio.
Varios meses antes, aproximadamente 100 texanos se guarnecían entonces en El Álamo. La fuerza texana creció con la llegada de refuerzos dirigidos por los comandantes James Bowie y William Barret Travis.
El 23 de febrero unos 1 500 soldados mexicanos marcharon hacia San Antonio de Béjar, como el primer paso en una campaña para retomar Texas y durante los siguientes 12 días, los dos ejércitos participaron en varias escaramuzas con bajas mínimas.
Consciente de que su guarnición no podía resistir el ataque de una fuerza tan grande, Travis escribió varias cartas pidiendo más hombres y suministros, pero llegaron menos de 100 refuerzos.
En la madrugada del 6 de marzo, el ejército mexicano avanzó hacia El Álamo y tras rechazar dos ataques, los texanos fueron incapaces de defenderse de un tercero y la mayoría de los soldados texanos huyeron hacia los edificios interiores. Los defensores que no pudieron llegar a los edificios, fueron asesinados por la caballería mexicana, siendo probable que entre cinco y siete de ellos se hubiesen rendido, siendo ejecutados al instante.
La mayoría de los relatos de testigos oculares, informaron de entre 182 y 257 texanos muertos, mientras que la mayoría de los historiadores de El Álamo están de acuerdo en que hubo entre 400 y 600 soldados mexicanos heridos o muertos en combate.
La noticia del desastre, desató el pánico y las fuerzas texanas - en su mayoría colonos - huyeron del avance del ejército mexicano.
Los texanos el 21 de abril de 1836, derrotaron y masacraron mientras dormían, al ejército mexicano en la batalla de San Jacinto, poniendo fin al movimiento revolucionario.
El Álamo actualmente, es el lugar turístico más popular de Texas, ya que la mayoría de los estadounidenses están familiarizados con los mitos difundidos por muchas de las películas, entre las cuales se incluye El Álamo de John Wayne, estrenada en 1960.
jueves, 22 de febrero de 2018
Cuando España tenía frontera con Estados Unidos
Retrato de Luis de Onís
Tal día como hoy 22 de febrero de 1819, mediante el tratado de Adams-Onís, España le vende a Estados Unidos el estado de Florida por cinco millones de dólares estadounidenses.
El Tratado de Adams-Onís o Tratado de La Florida de 1819, fue el resultado de la negociación entre España y Estados Unidos para fijar la frontera entre la nación norteamericana y el entonces virreinato de la Nueva España.
Luis de Onís acudió como representante del rey Fernando VII de España y por los estadounidenses el secretario de estado John Quincy Adams – de ahí el nombre del tratado - y la negociación se inició en 1819 y no fue ratificado hasta febrero de 1821 por ambas partes.
La frontera se fijó más allá del río Sabina y Arkansas y en consecuencia, España renunció a sus posesiones más allá de esa latitud, entre ellas, el territorio de Oregón.
También cedió definitivamente las Floridas, la Luisiana y la navegación por el río Misisipi. La Corona Española quedó como única soberana de Texas, territorio que los Estados Unidos reclamaba como parte de la Luisiana, que fue comprada a los franceses en 1803.
El tratado fue beneficioso para las dos partes ya que en el caso de España, recibía la soberanía de Texas a cambio de una soberanía, que de hecho no tenía, en Florida y además, los territorios de Oregón que eran muy remotos y sin ningún valor comercial.
Estados Unidos ganó su transcontinentalidad, - es decir, que su territorio abarcase de costa a costa – además de Florida y el territorio sin fronteras definidas de Oregón, que sería un asunto en litigio con los británicos instalados en Canadá.
El tratado fue ratificado en 1832 por México y Estados Unidos y la frontera quedaría fijada hasta 1848 cuando, tras la guerra mexicano-americana, México perdería definitivamente buena parte del territorio mexicano heredado de España al suroeste de la línea Onís-Adams.
Por los nuevos tratados tras esta guerra, resultó la nueva frontera mexicano-estadounidense fijada ahora en el curso del Río Bravo, también llamado Río Grande del Norte.
Tal día como hoy 22 de febrero de 1819, mediante el tratado de Adams-Onís, España le vende a Estados Unidos el estado de Florida por cinco millones de dólares estadounidenses.
El Tratado de Adams-Onís o Tratado de La Florida de 1819, fue el resultado de la negociación entre España y Estados Unidos para fijar la frontera entre la nación norteamericana y el entonces virreinato de la Nueva España.
Luis de Onís acudió como representante del rey Fernando VII de España y por los estadounidenses el secretario de estado John Quincy Adams – de ahí el nombre del tratado - y la negociación se inició en 1819 y no fue ratificado hasta febrero de 1821 por ambas partes.
La frontera se fijó más allá del río Sabina y Arkansas y en consecuencia, España renunció a sus posesiones más allá de esa latitud, entre ellas, el territorio de Oregón.
También cedió definitivamente las Floridas, la Luisiana y la navegación por el río Misisipi. La Corona Española quedó como única soberana de Texas, territorio que los Estados Unidos reclamaba como parte de la Luisiana, que fue comprada a los franceses en 1803.
El tratado fue beneficioso para las dos partes ya que en el caso de España, recibía la soberanía de Texas a cambio de una soberanía, que de hecho no tenía, en Florida y además, los territorios de Oregón que eran muy remotos y sin ningún valor comercial.
Estados Unidos ganó su transcontinentalidad, - es decir, que su territorio abarcase de costa a costa – además de Florida y el territorio sin fronteras definidas de Oregón, que sería un asunto en litigio con los británicos instalados en Canadá.
El tratado fue ratificado en 1832 por México y Estados Unidos y la frontera quedaría fijada hasta 1848 cuando, tras la guerra mexicano-americana, México perdería definitivamente buena parte del territorio mexicano heredado de España al suroeste de la línea Onís-Adams.
Por los nuevos tratados tras esta guerra, resultó la nueva frontera mexicano-estadounidense fijada ahora en el curso del Río Bravo, también llamado Río Grande del Norte.
miércoles, 21 de febrero de 2018
El general Tojo y la Segunda Guerra Mundial
Tal día como hoy 21 de febrero de 1943, en Japón, durante la Segunda Guerra Mundial, el general Tojo es nombrado jefe del Estado Mayor Imperial.
Hideki Tojo fue un destacado militar japonés, que llegó a ser Primer ministro de Japón durante la Segunda Guerra Mundial, entre 1941 y 1944.
Tenía una personalidad carismática y de gran preponderancia en el ejército japonés y durante la contienda mundial, mientras fue Primer ministro, en los territorios ocupados por las Fuerzas armadas japonesas, se llevaron a cabo numerosos crímenes de guerra, tales como la ejecución de prisioneros o incluso el empleo de armas químicas y biológicas.
El 22 de julio de 1940, Tojo fue nombrado Ministro de la Guerra, siendo un fuerte partidario del Pacto Tripartito entre Japón, la Alemania nazi y la Italia fascista, que finalmente se firmó en Berlín el 27 de septiembre de ese año.
El 6 de septiembre de 1941 la Conferencia imperial fijó una fecha límite para resolver la situación diplomática respecto al embargo petrolífero estadounidense a Japón, pero el 2 de noviembre, Tojo y los jefes de Estado mayor informaron al emperador Hirohito que las negociaciones con los estadounidenses habían fracasado y el emperador entonces dio su consentimiento a la guerra.
El 1 de diciembre otra conferencia dio su aprobación final a la "guerra contra los Estados Unidos, Inglaterra y Holanda" y la mañana del 7 de diciembre se produjo el ataque a Pearl Harbor, que cogió por sorpresa a las fuerzas estadounidenses.
Tras sufrir importantes bajas y daños materiales, el Presidente Roosevelt declaró la guerra al Imperio japonés al mismo tiempo que Alemania e Italia entraban en guerra del lado de Japón
Después de Pearl Harbor vinieron más victorias, los japoneses habían puesto bajo su control un vasto espacio marítimo y terrestre, y ya estaban trazando nuevos planes de invasión.
A pesar de este ambiente triunfalista, ya en 1942 se produjeron las primeras derrotas: a comienzos de junio la Armada estadounidense obtuvo una amplia victoria sobre los japoneses en la Batalla de Midway, que posteriormente se consideró decisivo en el contexto de la Guerra del pacífico.
Dos meses después los marines estadounidenses desembarcaron en Guadalcanal, dando comienzo a una larga guerra de desgaste durante los siguientes 6 meses.
A consecuencia de la cascada de derrotas militares que se sucedieron a partir de 1942 y 1943, Tojo se vio obligado a dimitir de todos su cargos en julio de 1944.
Tras el final de la guerra, a pesar de un intento fallido para suicidarse, fue arrestado por las nuevas autoridades estadounidenses, siendo juzgado en el Tribunal Penal Militar Internacional para el Lejano Oriente, que le sentenció a muerte por los crímenes de guerra japoneses, siendo ejecutado el 23 de diciembre de 1948 en la horca.
Posteriormente, algunos historiadores han denunciado que durante los juicios de Tokio, por parte de los estadounidenses, muchas responsabilidades políticas del emperador Hirohito fueron descargadas en el propio Tojo, haciéndole responsable a él y exonerando prácticamente al emperador.
Hideki Tojo fue un destacado militar japonés, que llegó a ser Primer ministro de Japón durante la Segunda Guerra Mundial, entre 1941 y 1944.
Tenía una personalidad carismática y de gran preponderancia en el ejército japonés y durante la contienda mundial, mientras fue Primer ministro, en los territorios ocupados por las Fuerzas armadas japonesas, se llevaron a cabo numerosos crímenes de guerra, tales como la ejecución de prisioneros o incluso el empleo de armas químicas y biológicas.
El 22 de julio de 1940, Tojo fue nombrado Ministro de la Guerra, siendo un fuerte partidario del Pacto Tripartito entre Japón, la Alemania nazi y la Italia fascista, que finalmente se firmó en Berlín el 27 de septiembre de ese año.
El 6 de septiembre de 1941 la Conferencia imperial fijó una fecha límite para resolver la situación diplomática respecto al embargo petrolífero estadounidense a Japón, pero el 2 de noviembre, Tojo y los jefes de Estado mayor informaron al emperador Hirohito que las negociaciones con los estadounidenses habían fracasado y el emperador entonces dio su consentimiento a la guerra.
El 1 de diciembre otra conferencia dio su aprobación final a la "guerra contra los Estados Unidos, Inglaterra y Holanda" y la mañana del 7 de diciembre se produjo el ataque a Pearl Harbor, que cogió por sorpresa a las fuerzas estadounidenses.
Tras sufrir importantes bajas y daños materiales, el Presidente Roosevelt declaró la guerra al Imperio japonés al mismo tiempo que Alemania e Italia entraban en guerra del lado de Japón
Después de Pearl Harbor vinieron más victorias, los japoneses habían puesto bajo su control un vasto espacio marítimo y terrestre, y ya estaban trazando nuevos planes de invasión.
A pesar de este ambiente triunfalista, ya en 1942 se produjeron las primeras derrotas: a comienzos de junio la Armada estadounidense obtuvo una amplia victoria sobre los japoneses en la Batalla de Midway, que posteriormente se consideró decisivo en el contexto de la Guerra del pacífico.
Dos meses después los marines estadounidenses desembarcaron en Guadalcanal, dando comienzo a una larga guerra de desgaste durante los siguientes 6 meses.
A consecuencia de la cascada de derrotas militares que se sucedieron a partir de 1942 y 1943, Tojo se vio obligado a dimitir de todos su cargos en julio de 1944.
Tras el final de la guerra, a pesar de un intento fallido para suicidarse, fue arrestado por las nuevas autoridades estadounidenses, siendo juzgado en el Tribunal Penal Militar Internacional para el Lejano Oriente, que le sentenció a muerte por los crímenes de guerra japoneses, siendo ejecutado el 23 de diciembre de 1948 en la horca.
Posteriormente, algunos historiadores han denunciado que durante los juicios de Tokio, por parte de los estadounidenses, muchas responsabilidades políticas del emperador Hirohito fueron descargadas en el propio Tojo, haciéndole responsable a él y exonerando prácticamente al emperador.
martes, 20 de febrero de 2018
Cuando Carlos III prohibió el baile en las iglesias
Tal día como hoy 20 de febrero de 1777, en España, Carlos III prohíbe el baile en el interior de las iglesias.
Por diversos motivos, durante siglos algunas fiestas religiosas, especialmente las del Corpus Christi, y las de la Cruz, iban acompañadas, en el templo o en los desfiles procesionales, de espectáculos que incluían danzas y bailes, en una especie de mezcla de elementos religiosos y profanos.
Las fiestas de la Cruz pasaron pronto a la calle cristianizando los meses de mayo y aún conservan generalmente esa escenografía, pero la festividad del Corpus sin embargo mantuvo durante mucho tiempo esa seña de identidad festiva.
Y así fue cómo, al tiempo que empezaron a alfombrarse de flores e hierbas las calles por donde había de discurrir la procesión -costumbre que actualmente se mantiene- , se asociaron a la festividad litúrgica una serie de diversiones populares como las tarascas, los carros sacramentales y las danzas en las que los vicios humanos, se veían atacados y dominados por las virtudes cristianas.
El personaje más popular de todos fue “La Tarasca”, que tiene su origen en el dragón dominado por Santa Marta en la región francesa de Tarascón: cuando se disponía a devorar a la santa, esta hizo la señal de la cruz, le roció con agua bendita y la bestia se amansó.
La tarasca formaba parte del cortejo del Corpus como símbolo del paganismo que es evangelizado. A ella se unieron otros personajes populares como "el tarasquillo", que gastaba bromas a los espectadores y arrebataba las caperuzas a los distraídos. Dichos personajes seguían a los gigantes, que, en la catedral bailaban una danza que llevaba su nombre.
Las tarascas, pasaron a formar parte del propio cortejo procesional, puestas en grandes carros rodantes y la gente se divertía tanto con ellas que, al pasar el Santísimo, quedaba poco lugar para la devoción, porque muchos preferían ir siguiéndolas.
Estos espectáculos, bailes y danzas ya fueron prohibidos por el Consejo de Castilla en 1533 y el 12 de mayo de 1699 se firmaba una Real Cédula estableciendo que sólo los hombres formarían en las danzas; que no llevarían velos, ni mascarillas, ni sombreros delante del Santísimo, sino guirnaldas o coronas de flores; que podrían bailar en la iglesia, pero no durante la misa y en otros lugares que no fueran el presbiterio o el coro.
El 20 de febrero de 1777, Carlos III mediante una pragmática, exhortó a los obispos a que no permitieran “espectáculos que no sirven de edificación y pueden servir a la indevoción y al desorden en las procesiones de semana santa, Cruz de mayo, rogativas, ni en otras algunas” y encarecía que las fiestas y procesiones finalizaran “antes de ponerse el sol, para evitar los inconvenientes que pueden resultar de lo contrario”.
De aquellas costumbres han quedado actualmente algunos restos, como los “seises”, que cantan y bailan ante el Santísimo en la festividad del Corpus en Sevilla o la “tarasca”, que sigue saliendo en procesión, en Granada.
BAILE DE LOS SEISES CATEDRAL DE SEVILLA :https://www.youtube.com/watch?v=6P60qSkl8sU
Por diversos motivos, durante siglos algunas fiestas religiosas, especialmente las del Corpus Christi, y las de la Cruz, iban acompañadas, en el templo o en los desfiles procesionales, de espectáculos que incluían danzas y bailes, en una especie de mezcla de elementos religiosos y profanos.
Las fiestas de la Cruz pasaron pronto a la calle cristianizando los meses de mayo y aún conservan generalmente esa escenografía, pero la festividad del Corpus sin embargo mantuvo durante mucho tiempo esa seña de identidad festiva.
Y así fue cómo, al tiempo que empezaron a alfombrarse de flores e hierbas las calles por donde había de discurrir la procesión -costumbre que actualmente se mantiene- , se asociaron a la festividad litúrgica una serie de diversiones populares como las tarascas, los carros sacramentales y las danzas en las que los vicios humanos, se veían atacados y dominados por las virtudes cristianas.
El personaje más popular de todos fue “La Tarasca”, que tiene su origen en el dragón dominado por Santa Marta en la región francesa de Tarascón: cuando se disponía a devorar a la santa, esta hizo la señal de la cruz, le roció con agua bendita y la bestia se amansó.
La tarasca formaba parte del cortejo del Corpus como símbolo del paganismo que es evangelizado. A ella se unieron otros personajes populares como "el tarasquillo", que gastaba bromas a los espectadores y arrebataba las caperuzas a los distraídos. Dichos personajes seguían a los gigantes, que, en la catedral bailaban una danza que llevaba su nombre.
Las tarascas, pasaron a formar parte del propio cortejo procesional, puestas en grandes carros rodantes y la gente se divertía tanto con ellas que, al pasar el Santísimo, quedaba poco lugar para la devoción, porque muchos preferían ir siguiéndolas.
Estos espectáculos, bailes y danzas ya fueron prohibidos por el Consejo de Castilla en 1533 y el 12 de mayo de 1699 se firmaba una Real Cédula estableciendo que sólo los hombres formarían en las danzas; que no llevarían velos, ni mascarillas, ni sombreros delante del Santísimo, sino guirnaldas o coronas de flores; que podrían bailar en la iglesia, pero no durante la misa y en otros lugares que no fueran el presbiterio o el coro.
El 20 de febrero de 1777, Carlos III mediante una pragmática, exhortó a los obispos a que no permitieran “espectáculos que no sirven de edificación y pueden servir a la indevoción y al desorden en las procesiones de semana santa, Cruz de mayo, rogativas, ni en otras algunas” y encarecía que las fiestas y procesiones finalizaran “antes de ponerse el sol, para evitar los inconvenientes que pueden resultar de lo contrario”.
De aquellas costumbres han quedado actualmente algunos restos, como los “seises”, que cantan y bailan ante el Santísimo en la festividad del Corpus en Sevilla o la “tarasca”, que sigue saliendo en procesión, en Granada.
BAILE DE LOS SEISES CATEDRAL DE SEVILLA :https://www.youtube.com/watch?v=6P60qSkl8sU
lunes, 19 de febrero de 2018
La historia del Afrika Korps
Tal día como hoy 19 de febrero de 1941, en el marco de la Segunda Guerra Mundial se crea el Afrika Korps al mando de Erwin Rommel.
El Deutsches Afrikakorps fue una fuerza militar alemana enviada al norte de África como respaldo de las tropas italianas que estaban siendo derrotadas por los británicos durante la Segunda Guerra Mundial.
El norte de África permitía a las fuerzas mecanizadas poner en práctica combates mediante maniobras de gran movilidad. Este arte de la guerra era la mayor de las habilidades de la Wehrmacht y el 12 de febrero de 1941, Hitler envió en apoyo a los italianos al recién formado Afrika Korps a las órdenes del teniente general Erwin Rommel.
A los pocos días de llegar, Rommel llevó a sus tropas a una serie de sucesivas victorias, derrotando a los británicos en las batallas de Gazala, Tobruk y Marsa Matruh, pese a que su ejército se encontraba en clara inferioridad, tanto en tropas como en suministros. Así fue como se le conoció como “El Zorro del Desierto”, convirtiéndose en una leyenda y siendo temido y admirado por sus enemigos, creando a su alrededor un aura de invencibilidad.
A finales de marzo, el Afrika Korps atacó las tropas británicas en Libia y la audacia de Rommel y su valiosa experiencia en la utilización de los tanques sorprendió completamente a los británicos. A mediados de abril, los alemanes alcanzaron la frontera de Egipto y aislaron el puerto de Tobruk.
Durante los seis meses siguientes, los británicos comenzaron a preparar una campaña para liberar Tobruk y recuperar Libia, lo que consiguieron el 10 de diciembre con un altísimo precio en hombres y material. Sin embargo, el éxito de los británicos fue transitorio.
El 21 de enero de 1942, Rommel volvió al ataque, reconquistando Tobruk y tras un período de calma de casi cuatro meses, reanudó la ofensiva, llegando a finales de junio a las cercanías de El Alamein, por lo que recibió el bastón de mariscal de campo.
El 1 de julio, Rommel, sabedor de que un gran contingente de tropas estadounidenses llegaría a Egipto, aprovechó la última oportunidad para vencer a los británicos y atacó en El Alamein sin embargo, no logró rechazar a los británicos y la ofensiva quedó estancada el 27 de julio.
En agosto, se hizo cargo del mando británico el teniente general Montgomery y organizó un gran ataque contra la frágil línea defensiva alemana y el 3 de noviembre, Rommel ordenó lo que quedaba de sus tropas y se retiró de El Alamein.
Las fuerzas anglo-estadounidenses desembarcadas en Argelia y Marruecos habían penetrado en Túnez entre noviembre y diciembre de 1942 y dirigieron sus esfuerzos a intentar cortar la retirada que el ejército alemán, falto de combustible y todo tipo de suministros, se había visto obligado a emprender.
Pese a todo, el 19 de febrero, Rommel atacaría a través de los pasos de Kasserine, la primera operación importante de los todavía inexpertos estadounidenses, que sufrieron graves pérdidas, pero pese a su éxito inicial, la debilidad de las fuerzas italo-alemanas les impidió sacar provecho teniendo que volver a sus bases de partida.
El 6 de marzo de 1943, Rommel fue evacuado debido a una enfermedad y Hitler rechazó su retorno al Norte de África. Las tropas del Afrika Korps supervivientes, capitularon en Túnez el 12 de mayo de 1943 siendo capturados 130.000 soldados que como prisioneros de guerra, fueron trasladados a Estados Unidos y Canadá.
Himno del Afrika Korps:https://www.youtube.com/watch?v=_SVlYJe_Lb0
El Deutsches Afrikakorps fue una fuerza militar alemana enviada al norte de África como respaldo de las tropas italianas que estaban siendo derrotadas por los británicos durante la Segunda Guerra Mundial.
El norte de África permitía a las fuerzas mecanizadas poner en práctica combates mediante maniobras de gran movilidad. Este arte de la guerra era la mayor de las habilidades de la Wehrmacht y el 12 de febrero de 1941, Hitler envió en apoyo a los italianos al recién formado Afrika Korps a las órdenes del teniente general Erwin Rommel.
A los pocos días de llegar, Rommel llevó a sus tropas a una serie de sucesivas victorias, derrotando a los británicos en las batallas de Gazala, Tobruk y Marsa Matruh, pese a que su ejército se encontraba en clara inferioridad, tanto en tropas como en suministros. Así fue como se le conoció como “El Zorro del Desierto”, convirtiéndose en una leyenda y siendo temido y admirado por sus enemigos, creando a su alrededor un aura de invencibilidad.
A finales de marzo, el Afrika Korps atacó las tropas británicas en Libia y la audacia de Rommel y su valiosa experiencia en la utilización de los tanques sorprendió completamente a los británicos. A mediados de abril, los alemanes alcanzaron la frontera de Egipto y aislaron el puerto de Tobruk.
Durante los seis meses siguientes, los británicos comenzaron a preparar una campaña para liberar Tobruk y recuperar Libia, lo que consiguieron el 10 de diciembre con un altísimo precio en hombres y material. Sin embargo, el éxito de los británicos fue transitorio.
El 21 de enero de 1942, Rommel volvió al ataque, reconquistando Tobruk y tras un período de calma de casi cuatro meses, reanudó la ofensiva, llegando a finales de junio a las cercanías de El Alamein, por lo que recibió el bastón de mariscal de campo.
El 1 de julio, Rommel, sabedor de que un gran contingente de tropas estadounidenses llegaría a Egipto, aprovechó la última oportunidad para vencer a los británicos y atacó en El Alamein sin embargo, no logró rechazar a los británicos y la ofensiva quedó estancada el 27 de julio.
En agosto, se hizo cargo del mando británico el teniente general Montgomery y organizó un gran ataque contra la frágil línea defensiva alemana y el 3 de noviembre, Rommel ordenó lo que quedaba de sus tropas y se retiró de El Alamein.
Las fuerzas anglo-estadounidenses desembarcadas en Argelia y Marruecos habían penetrado en Túnez entre noviembre y diciembre de 1942 y dirigieron sus esfuerzos a intentar cortar la retirada que el ejército alemán, falto de combustible y todo tipo de suministros, se había visto obligado a emprender.
Pese a todo, el 19 de febrero, Rommel atacaría a través de los pasos de Kasserine, la primera operación importante de los todavía inexpertos estadounidenses, que sufrieron graves pérdidas, pero pese a su éxito inicial, la debilidad de las fuerzas italo-alemanas les impidió sacar provecho teniendo que volver a sus bases de partida.
El 6 de marzo de 1943, Rommel fue evacuado debido a una enfermedad y Hitler rechazó su retorno al Norte de África. Las tropas del Afrika Korps supervivientes, capitularon en Túnez el 12 de mayo de 1943 siendo capturados 130.000 soldados que como prisioneros de guerra, fueron trasladados a Estados Unidos y Canadá.
Himno del Afrika Korps:https://www.youtube.com/watch?v=_SVlYJe_Lb0
domingo, 18 de febrero de 2018
El Estatuto de Andalucía
Tal día como hoy 18 de febrero de 2007, en Andalucía un referéndum ratifica el Estatuto de Autonomía de Andalucía.
El Estatuto de Andalucía, es la norma básica de la comunidad autónoma de Andalucía y bajo el amparo de la Constitución Española reconoce a la comunidad como nacionalidad histórica.
Andalucía accedió a la autonomía mediante la denominada "vía rápida" del artículo 151 de la Constitución española de 1978 y siguiendo este procedimiento, se constituyó la Comunidad Autónoma de Andalucía el 28 de febrero de 1981.
En el artículo 1º del Estatuto, tal autonomía está justificada en la "identidad histórica, en el autogobierno que la Constitución permite a toda nacionalidad, en plena igualdad al resto de nacionalidades y regiones que compongan España, y con un poder que emana de la Constitución y el pueblo andaluz reflejado en su Estatuto de Autonomía", siendo la única Comunidad Autónoma que realizó un referéndum para dicho acceso.
El estatuto autonómico tenía su origen en un borrador elaborado en Carmona en 1979 que a su vez provenía del Pacto de Antequera. Hasta 1981 no daría la luz una versión definitiva publicada por los partidos gobernantes por aquel entonces.
El proyecto final se aprobó el 1 de marzo en Córdoba, y fue enviado a las Cortes donde fue revisado y corregido y finalmente sometido a referéndum el 20 de octubre de 1981 para poco después ser ratificado por el rey Juan Carlos I.
Fue sometido a revisión en 2006 y tras meses de negociación política y trámites parlamentarios, la reforma se aprobó con un amplio apoyo el 20 de diciembre de 2006, para alcanzar el máximo techo competencial y ampliar los derechos sociales de los ciudadanos andaluces.
La nueva propuesta aprobada en referéndum el 18 de febrero de 2007, y más tarde sancionada por la Ley Orgánica 2/2007 de 19 de marzo, le otorgó su redacción definitiva.
El Estatuto de Andalucía, es la norma básica de la comunidad autónoma de Andalucía y bajo el amparo de la Constitución Española reconoce a la comunidad como nacionalidad histórica.
Andalucía accedió a la autonomía mediante la denominada "vía rápida" del artículo 151 de la Constitución española de 1978 y siguiendo este procedimiento, se constituyó la Comunidad Autónoma de Andalucía el 28 de febrero de 1981.
En el artículo 1º del Estatuto, tal autonomía está justificada en la "identidad histórica, en el autogobierno que la Constitución permite a toda nacionalidad, en plena igualdad al resto de nacionalidades y regiones que compongan España, y con un poder que emana de la Constitución y el pueblo andaluz reflejado en su Estatuto de Autonomía", siendo la única Comunidad Autónoma que realizó un referéndum para dicho acceso.
El estatuto autonómico tenía su origen en un borrador elaborado en Carmona en 1979 que a su vez provenía del Pacto de Antequera. Hasta 1981 no daría la luz una versión definitiva publicada por los partidos gobernantes por aquel entonces.
El proyecto final se aprobó el 1 de marzo en Córdoba, y fue enviado a las Cortes donde fue revisado y corregido y finalmente sometido a referéndum el 20 de octubre de 1981 para poco después ser ratificado por el rey Juan Carlos I.
Fue sometido a revisión en 2006 y tras meses de negociación política y trámites parlamentarios, la reforma se aprobó con un amplio apoyo el 20 de diciembre de 2006, para alcanzar el máximo techo competencial y ampliar los derechos sociales de los ciudadanos andaluces.
La nueva propuesta aprobada en referéndum el 18 de febrero de 2007, y más tarde sancionada por la Ley Orgánica 2/2007 de 19 de marzo, le otorgó su redacción definitiva.
sábado, 17 de febrero de 2018
Moliere, un genio del teatro
Tal día como hoy 17 de febrero de 1673, Molière muere en escena mientras representa su obra “El enfermo imaginario”.
Jean-Baptiste Poquelin, llamado Molière, fue un dramaturgo, humorista y comediógrafo francés, considerado el padre de la Comédie Française y despiadado con la pedantería de los falsos sabios y la mentira de los médicos ignorantes..
Hijo del tapicero real Jean Poquelin perdió a su madre a la edad de 10 años y después de la muerte de esta, vivió con su padre en un piso en la calle Saint-Honoré, una pudiente área de París.
En 1643, Jean-Baptiste firmó con los Béjart el acta de constitución del Ilustre Teatro cuyos inicios fueron mediocres y tras varios fracasos, se acumularon las deudas, Molière fue encarcelado y una vez en libertad, dejó París y se convirtió en actor durante varios años.
En 1650 volvió a asumir la dirección de la compañía del Ilustre Teatro y entre 1645 y 1658 escribió esbozos de farsas, así como sus dos primeras comedias, “El atolondrado o los contratiempo” y “El despecho amoroso”
Molière tenía un gran talento cómico; su voz y su mímica desencadenaban las risas y pronto la compañía alcanzó una reputación en lo cómico La primera de sus grandes comedias, “Las preciosas ridículas” de 1659, consiguió un éxito enorme y confirmó el favor del rey que los instaló en 1660 en el Palacio Real.
Los devotos y beatos que consideraban a Molière un libertino y temían la influencia que ejercía sobre el rey, declararon obscena e irreligiosa “La escuela de las mujeres”y la protección del rey despertó celos en otras compañías teatrales.
En 1664 creó el “Tartufo”, en la que denunciaba la hipocresía religiosa y el escándalo entre los beatos fue de tal calibre que el rey prohibió durante cinco años la obra.
Durante los dos años siguientes, Molière enfermó de tuberculosis, pero siguió escribiendo, en especial “El misántropo” y “El médico a palos”. El misántropo introduce un nuevo tipo de necio, un hombre de elevados principios morales que critica la debilidad y estulticia de los demás y, sin embargo, es incapaz de ver los defectos de la muchacha de la que se ha enamorado.
Su última obra fue “El enfermo imaginario” pues sufrió un ataque agudo de hemoptisis – vómito de sangre de los pulmones - en el curso de la representación y murió en su domicilio, sin renegar de su profesión de actor y considerado inmoral por la Iglesia.
Bajo la ley francesa de aquel tiempo, no estaba permitido que los actores fueran enterrados en el terreno sagrado de un cementerio, pero la viuda de Molière, pidió al rey que su cónyuge pudiera tener acceso a un funeral normal, el rey accedió y Molière fue enterrado en el cementerio reservado a los niños no bautizados.
Desde su muerte en escena, en el teatro se dice que trae mala suerte vestirse de amarillo, dado que Molière supuestamente habría sufrido el ataque estando en el teatro vestido de este color.
El avaro : https://www.youtube.com/watch?v=qLI8XeO2d0w&t=5479s
Jean-Baptiste Poquelin, llamado Molière, fue un dramaturgo, humorista y comediógrafo francés, considerado el padre de la Comédie Française y despiadado con la pedantería de los falsos sabios y la mentira de los médicos ignorantes..
Hijo del tapicero real Jean Poquelin perdió a su madre a la edad de 10 años y después de la muerte de esta, vivió con su padre en un piso en la calle Saint-Honoré, una pudiente área de París.
En 1643, Jean-Baptiste firmó con los Béjart el acta de constitución del Ilustre Teatro cuyos inicios fueron mediocres y tras varios fracasos, se acumularon las deudas, Molière fue encarcelado y una vez en libertad, dejó París y se convirtió en actor durante varios años.
En 1650 volvió a asumir la dirección de la compañía del Ilustre Teatro y entre 1645 y 1658 escribió esbozos de farsas, así como sus dos primeras comedias, “El atolondrado o los contratiempo” y “El despecho amoroso”
Molière tenía un gran talento cómico; su voz y su mímica desencadenaban las risas y pronto la compañía alcanzó una reputación en lo cómico La primera de sus grandes comedias, “Las preciosas ridículas” de 1659, consiguió un éxito enorme y confirmó el favor del rey que los instaló en 1660 en el Palacio Real.
Los devotos y beatos que consideraban a Molière un libertino y temían la influencia que ejercía sobre el rey, declararon obscena e irreligiosa “La escuela de las mujeres”y la protección del rey despertó celos en otras compañías teatrales.
En 1664 creó el “Tartufo”, en la que denunciaba la hipocresía religiosa y el escándalo entre los beatos fue de tal calibre que el rey prohibió durante cinco años la obra.
Durante los dos años siguientes, Molière enfermó de tuberculosis, pero siguió escribiendo, en especial “El misántropo” y “El médico a palos”. El misántropo introduce un nuevo tipo de necio, un hombre de elevados principios morales que critica la debilidad y estulticia de los demás y, sin embargo, es incapaz de ver los defectos de la muchacha de la que se ha enamorado.
Su última obra fue “El enfermo imaginario” pues sufrió un ataque agudo de hemoptisis – vómito de sangre de los pulmones - en el curso de la representación y murió en su domicilio, sin renegar de su profesión de actor y considerado inmoral por la Iglesia.
Bajo la ley francesa de aquel tiempo, no estaba permitido que los actores fueran enterrados en el terreno sagrado de un cementerio, pero la viuda de Molière, pidió al rey que su cónyuge pudiera tener acceso a un funeral normal, el rey accedió y Molière fue enterrado en el cementerio reservado a los niños no bautizados.
Desde su muerte en escena, en el teatro se dice que trae mala suerte vestirse de amarillo, dado que Molière supuestamente habría sufrido el ataque estando en el teatro vestido de este color.
El avaro : https://www.youtube.com/watch?v=qLI8XeO2d0w&t=5479s
viernes, 16 de febrero de 2018
El nacimiento de la “Costa del Sol”
Tal día como hoy 16 de febrero de 1928, el hostelero Rodolfo Lussnigg crea la denominación “Costa del Sol” para la promoción turística de las costas mediterráneas de España.
El inventor de este eslogan era un diplomático austriaco y también empresario turístico establecido en la provincia de Almería, al que se deben una de las más importantes labores de difusión turística de dicha provincia y la propia denominación “Costa del Sol”, para referirse a la costa almeriense, y el lema “Almería, la ciudad donde el sol pasa el invierno”.
Su formación como hotelero comienza en 1899 y tras varios años de aprendizaje en Viena y ocupar puestos hosteleros en diversos países, en 1906 llegó a España con la ‘‘Sociedad Franco-Española de Grandes Hoteles’’ ocupando la dirección del Hotel Reina Victoria de Alicante, y en 1907 la del Hotel Regina en Málaga.
En 1909 compró el Hotel Simón de Almería, en el actual Paseo de Almería y lo dirigiría hasta que le sucede su hija Resi en 1944, hotel que permanecería en manos de la familia hasta su venta en 1965.
En su afán por hacer llegar el nombre de Almería a todas partes y con ocasión de la Exposición Iberoamericana de Sevilla y la Exposición Internacional de Barcelona del año 1929, tuvo la idea de unir estas dos ciudades a través de la costa mediterránea, emulando así a la Costa Azul Francesa y la Riviera Portuguesa, que ya eran centro de atención turística internacional.
Bautizó así esta costa con el nombre de "Costa del Sol" tal como consta en artículos escritos por los periódicos de los años 1928 y siguientes, destacando en ellos a la ciudad con la frase "Almería: donde el Sol pasa el Invierno".
En 1942 se hace cargo de la reparación y reforma del Hotel Alhambra de Granada, que durante la Guerra Civil Española sirvió de Hospital Militar.
Rodolfo Lussnigg y su familia estuvieron en prisión durante la contienda civil española y le fue concedida la Medalla de Sufrimiento por la Patria y la Medalla al Mérito Turístico a título póstumo en 1966, por toda su labor de divulgación de la Costa del Sol, que fue recogida por su nieto y le fue entregada por el entonces ministro Manuel Fraga Iribarne.
Este precursor del turismo español, falleció en Madrid el 8 de marzo de 1950 y está enterrado en el Cementerio de la Almudena.
El inventor de este eslogan era un diplomático austriaco y también empresario turístico establecido en la provincia de Almería, al que se deben una de las más importantes labores de difusión turística de dicha provincia y la propia denominación “Costa del Sol”, para referirse a la costa almeriense, y el lema “Almería, la ciudad donde el sol pasa el invierno”.
Su formación como hotelero comienza en 1899 y tras varios años de aprendizaje en Viena y ocupar puestos hosteleros en diversos países, en 1906 llegó a España con la ‘‘Sociedad Franco-Española de Grandes Hoteles’’ ocupando la dirección del Hotel Reina Victoria de Alicante, y en 1907 la del Hotel Regina en Málaga.
En 1909 compró el Hotel Simón de Almería, en el actual Paseo de Almería y lo dirigiría hasta que le sucede su hija Resi en 1944, hotel que permanecería en manos de la familia hasta su venta en 1965.
En su afán por hacer llegar el nombre de Almería a todas partes y con ocasión de la Exposición Iberoamericana de Sevilla y la Exposición Internacional de Barcelona del año 1929, tuvo la idea de unir estas dos ciudades a través de la costa mediterránea, emulando así a la Costa Azul Francesa y la Riviera Portuguesa, que ya eran centro de atención turística internacional.
Bautizó así esta costa con el nombre de "Costa del Sol" tal como consta en artículos escritos por los periódicos de los años 1928 y siguientes, destacando en ellos a la ciudad con la frase "Almería: donde el Sol pasa el Invierno".
En 1942 se hace cargo de la reparación y reforma del Hotel Alhambra de Granada, que durante la Guerra Civil Española sirvió de Hospital Militar.
Rodolfo Lussnigg y su familia estuvieron en prisión durante la contienda civil española y le fue concedida la Medalla de Sufrimiento por la Patria y la Medalla al Mérito Turístico a título póstumo en 1966, por toda su labor de divulgación de la Costa del Sol, que fue recogida por su nieto y le fue entregada por el entonces ministro Manuel Fraga Iribarne.
Este precursor del turismo español, falleció en Madrid el 8 de marzo de 1950 y está enterrado en el Cementerio de la Almudena.
jueves, 15 de febrero de 2018
La Concordia de Alcañiz, preludio del Compromiso de Caspe
Tal día como hoy 15 de febrero de 1412, Cataluña y Aragón firman la Concordia de Alcañiz para designar al nuevo rey de Aragón.
Fue un acuerdo al que llegaron los representantes de la Generalidad de Aragón reunidos en Alcañiz y la de Cataluña, reunidos en Tortosa, para establecer un procedimiento destinado a elegir al sucesor de Martín I de Aragón a su muerte sin heredero.
El acuerdo- muy pragmático - decidía que fueran nueve comisarios en representación de toda la Corona de Aragón quienes tendrían un plazo de dos a tres meses para elegir rey entre los distintos candidatos en la villa aragonesa de Caspe, que sería conocido como “Compromiso de Caspe”, ya que desde la muerte de Martín I “el Humano” el 31 de mayo de 1410, habían transcurrido más de veinte meses sin que se hubieran fijado un proceso para elegir sucesor.
La decisión de la Diputación del General de Aragón durante el Interregno, gracias al permanente contacto con los embajadores del parlamento catalán de Tortosa, fue tomada de común acuerdo por ambas partes.
El reino de Valencia no tenía un parlamento unificado, por lo que no llegó a tiempo para estar presente en las decisiones de la Concordia. Sin embargo, el mismo 15 de febrero llegaron enviados de la asamblea de Vinaroz con credenciales para poder confirmar los acuerdos tomados.
El reino de Mallorca no estuvo representado en la toma de decisiones, incluyendo el Compromiso de Caspe, siendo el único reino hispánico que careció de representación, aunque sus embajadores habían estado integrados en el parlamento catalán.
Para la elección del rey fue elegida Caspe, villa que cumplía la condición establecida al estar situada en Aragón y cerca de Alcañiz y Tortosa, donde estaban los parlamentos aragonés y catalán. También se estableció que el número de personas que debían tomar la decisión final sería de nueve, elegidos por su experiencia en derecho, en asuntos de estado y probada ética.
La lista definitiva de compromisarios no fue objeto de la Concordia de Alcañiz, porque los embajadores catalanes tenían impedido expresamente tomar decisiones acerca de los elegidos para tomar la decisión final y la identidad de estos fue decidida posteriormente.
A mediados de marzo de 1412 llegaron a Tortosa embajadores de Valencia y representantes del parlamento catalán y el embajador del de Aragón, recibieron a los delegados valencianos quienes dieron el visto bueno a la lista de nueve compromisarios.
Los tres Parlamentos, les encomendaron la tarea de proclamar al nuevo rey de Aragón, que se materializó en la elección de Fernando I “el de Antequera” el 28 de junio de 1412, en el llamado Compromiso de Caspe al ser proclamado rey de Aragón y demás estados de la Corona.
El Compromiso de Caspe trajo consigo la introducción en el trono aragonés de una dinastía castellana y el castellano pasó a ser el idioma de la corte, mientras el idioma aragonés quedó para la clase baja, comenzando a desaparecer paulatinamente en favor del castellano.
Fue un acuerdo al que llegaron los representantes de la Generalidad de Aragón reunidos en Alcañiz y la de Cataluña, reunidos en Tortosa, para establecer un procedimiento destinado a elegir al sucesor de Martín I de Aragón a su muerte sin heredero.
El acuerdo- muy pragmático - decidía que fueran nueve comisarios en representación de toda la Corona de Aragón quienes tendrían un plazo de dos a tres meses para elegir rey entre los distintos candidatos en la villa aragonesa de Caspe, que sería conocido como “Compromiso de Caspe”, ya que desde la muerte de Martín I “el Humano” el 31 de mayo de 1410, habían transcurrido más de veinte meses sin que se hubieran fijado un proceso para elegir sucesor.
La decisión de la Diputación del General de Aragón durante el Interregno, gracias al permanente contacto con los embajadores del parlamento catalán de Tortosa, fue tomada de común acuerdo por ambas partes.
El reino de Valencia no tenía un parlamento unificado, por lo que no llegó a tiempo para estar presente en las decisiones de la Concordia. Sin embargo, el mismo 15 de febrero llegaron enviados de la asamblea de Vinaroz con credenciales para poder confirmar los acuerdos tomados.
El reino de Mallorca no estuvo representado en la toma de decisiones, incluyendo el Compromiso de Caspe, siendo el único reino hispánico que careció de representación, aunque sus embajadores habían estado integrados en el parlamento catalán.
Para la elección del rey fue elegida Caspe, villa que cumplía la condición establecida al estar situada en Aragón y cerca de Alcañiz y Tortosa, donde estaban los parlamentos aragonés y catalán. También se estableció que el número de personas que debían tomar la decisión final sería de nueve, elegidos por su experiencia en derecho, en asuntos de estado y probada ética.
La lista definitiva de compromisarios no fue objeto de la Concordia de Alcañiz, porque los embajadores catalanes tenían impedido expresamente tomar decisiones acerca de los elegidos para tomar la decisión final y la identidad de estos fue decidida posteriormente.
A mediados de marzo de 1412 llegaron a Tortosa embajadores de Valencia y representantes del parlamento catalán y el embajador del de Aragón, recibieron a los delegados valencianos quienes dieron el visto bueno a la lista de nueve compromisarios.
Los tres Parlamentos, les encomendaron la tarea de proclamar al nuevo rey de Aragón, que se materializó en la elección de Fernando I “el de Antequera” el 28 de junio de 1412, en el llamado Compromiso de Caspe al ser proclamado rey de Aragón y demás estados de la Corona.
El Compromiso de Caspe trajo consigo la introducción en el trono aragonés de una dinastía castellana y el castellano pasó a ser el idioma de la corte, mientras el idioma aragonés quedó para la clase baja, comenzando a desaparecer paulatinamente en favor del castellano.
miércoles, 14 de febrero de 2018
Breve historia de las corridas de toros
Tal día como hoy 14 de febrero de 1880, en Madrid se aprueba el Reglamento de las corridas de toros.
El origen de las corridas de toros en España, hunde sus raíces en la cultura grecolatina introducida en el proceso de romanización y el culto al toro como divinidad y su sacrificio ritual está constatado en las civilizaciones minoica y otras del mediterráneo oriental desde al menos la edad del bronce.
Los romanos, incorporaron a su cultura los mitos y divinidades de su zona de influencia, y al comenzar la conquista de Hispania, en el contexto de las guerras púnicas, instaura en la cultura local los juegos y luchas de fieras, en las que el toro era un animal de frecuente intervención, existiendo constancia de luchas contra osos, leones y seres humanos.
Desde su nacimiento como espectáculo moderno, en el siglo XVIII, las corridas de toros han sufrido críticas y prohibiciones y han tenido que sortear numerosas dificultades.
La dinastía de los Borbones y la aristocracia afrancesada, despreciaba estos espectáculos por considerarlos indignos y propios del pueblo bajo, por lo que Felipe V prohibió su ejercicio y Fernando VI consintió las corridas a cambio de que sus beneficios se destinasen a obras de caridad como hospitales y hospicios. De esta época son las primeras plazas de toros como edificios permanentes, como la de Madrid o la de Zaragoza.
Algunos intelectuales ilustrados, como Jovellanos, criticaban estos espectáculos por considerarlos poco didácticos y una muestra del atraso español y Carlos III, influido por el Conde de Aranda, prohibió las corridas de toros en 1771.
El pueblo, sin embargo, hizo caso omiso a la prohibición y siguió entregándose a las figuras del toreo, que Francisco de Goya recogió en su serie de grabados sobre tauromaquia. Todos los gobernantes posteriores intentaron prohibir las corridas y Carlos IV volvió a hacerlo en 1805.
Tras la Guerra de la Independencia, a lo largo del siglo XIX, surgía con frecuencia en el Parlamento Español el debate de la prohibición. La última vez fue en 1877, pero se rechazó la propuesta pues se consideraban que sería demasiado impopular
A partir de entonces no se ha abordado la prohibición directa pues la dictadura de Primo de Rivera, la Segunda República, el franquismo y la democracia, las han tolerado a cambio de gravarlas con impuestos especialmente altos y mantenerlas bajo control.
En 2006, según sondeo de Investiga, el perfil de los aficionados es en su mayoría masculino alcanzándose el máximo interés entre las personas de 65 y más años.
Existen discrepancias acerca de si en Canarias las corridas de toros están prohibidas por ley 8/1991 de 30 de abril que señala que su objetivo es "la protección de los animales domésticos".
El 28 de julio de 2010, el Parlamento de Cataluña aprobó la prohibición de llevar a cabo corridas de toros. Esta votación supuso la culminación de un proceso de iniciativa legislativa popular presentada por la plataforma “Prou!”, - Basta - que contó con 180.000 adhesiones.
Sin embargo, la popularidad de las corridas de toros fuera de España ha aumentado: el 23 de octubre de 2004 se celebró la primera corrida de toros de Asia en Shanghái y más de 13 millones de chinos ven las corridas de toros españolas por televisión.
El origen de las corridas de toros en España, hunde sus raíces en la cultura grecolatina introducida en el proceso de romanización y el culto al toro como divinidad y su sacrificio ritual está constatado en las civilizaciones minoica y otras del mediterráneo oriental desde al menos la edad del bronce.
Los romanos, incorporaron a su cultura los mitos y divinidades de su zona de influencia, y al comenzar la conquista de Hispania, en el contexto de las guerras púnicas, instaura en la cultura local los juegos y luchas de fieras, en las que el toro era un animal de frecuente intervención, existiendo constancia de luchas contra osos, leones y seres humanos.
Desde su nacimiento como espectáculo moderno, en el siglo XVIII, las corridas de toros han sufrido críticas y prohibiciones y han tenido que sortear numerosas dificultades.
La dinastía de los Borbones y la aristocracia afrancesada, despreciaba estos espectáculos por considerarlos indignos y propios del pueblo bajo, por lo que Felipe V prohibió su ejercicio y Fernando VI consintió las corridas a cambio de que sus beneficios se destinasen a obras de caridad como hospitales y hospicios. De esta época son las primeras plazas de toros como edificios permanentes, como la de Madrid o la de Zaragoza.
Algunos intelectuales ilustrados, como Jovellanos, criticaban estos espectáculos por considerarlos poco didácticos y una muestra del atraso español y Carlos III, influido por el Conde de Aranda, prohibió las corridas de toros en 1771.
El pueblo, sin embargo, hizo caso omiso a la prohibición y siguió entregándose a las figuras del toreo, que Francisco de Goya recogió en su serie de grabados sobre tauromaquia. Todos los gobernantes posteriores intentaron prohibir las corridas y Carlos IV volvió a hacerlo en 1805.
Tras la Guerra de la Independencia, a lo largo del siglo XIX, surgía con frecuencia en el Parlamento Español el debate de la prohibición. La última vez fue en 1877, pero se rechazó la propuesta pues se consideraban que sería demasiado impopular
A partir de entonces no se ha abordado la prohibición directa pues la dictadura de Primo de Rivera, la Segunda República, el franquismo y la democracia, las han tolerado a cambio de gravarlas con impuestos especialmente altos y mantenerlas bajo control.
En 2006, según sondeo de Investiga, el perfil de los aficionados es en su mayoría masculino alcanzándose el máximo interés entre las personas de 65 y más años.
Existen discrepancias acerca de si en Canarias las corridas de toros están prohibidas por ley 8/1991 de 30 de abril que señala que su objetivo es "la protección de los animales domésticos".
El 28 de julio de 2010, el Parlamento de Cataluña aprobó la prohibición de llevar a cabo corridas de toros. Esta votación supuso la culminación de un proceso de iniciativa legislativa popular presentada por la plataforma “Prou!”, - Basta - que contó con 180.000 adhesiones.
Sin embargo, la popularidad de las corridas de toros fuera de España ha aumentado: el 23 de octubre de 2004 se celebró la primera corrida de toros de Asia en Shanghái y más de 13 millones de chinos ven las corridas de toros españolas por televisión.
martes, 13 de febrero de 2018
El Tratado de Lisboa de 1668
Tal día como hoy 13 de febrero de 1668, se firma el Tratado de Lisboa, mediante el cual España reconoce la independencia de Portugal.
El tratado de 1668 fue un acuerdo de paz concertado entre España y Portugal con la intermediación de Inglaterra, mediante el cual se ponía fin a la guerra de separación de Portugal y supuso el reconocimiento oficial por parte de España de la independencia portuguesa.
Desde 1580 Portugal formaba - con el resto de reinos hispánicos – una unión dinástica en la que cada reino compartía el mismo monarca, pero en 1640 comenzó la Guerra de Restauración portuguesa, en la que este país intentaba conseguir su independencia de la Corona española.
En la firma del tratado, llevada a cabo en el convento de San Eloy de Lisboa, intervinieron por parte española, Gaspar de Haro y Guzmán, en nombre de Mariana de Austria, reina regente de España durante la minoría de edad de Carlos II.
Por parte portuguesa, participaron en nombre del rey Alfonso VI de Portugal Nuno Álvares Pereira de Melo y varios representantes más y ambos países aceptaron la intermediación de Edward Montagu, en nombre de Carlos II de Inglaterra.
Los principales puntos del acuerdo incluían: el cese en las hostilidades y el compromiso de paz; la restitución de las plazas tomadas durante la guerra, la libertad de circulación y comercio para los súbditos de ambos países en el país vecino; Amnistía para los prisioneros habidos durante la guerra; Restitución a sus dueños de las propiedades tomadas y Portugal sería libre de formar alianzas con quien quisiera. El acuerdo sería ratificado por España en febrero de 1668 y por Portugal en marzo del mismo año.
Con la firma del tratado de Lisboa, España reconocía la independencia de Portugal, poniendo fin a la unión que ambos países habían mantenido de hecho entre 1580 y 1640, y a la situación de indefinición producido entre 1640 y 1668, en el que España consideraba a Portugal parte del Imperio español, mientras Portugal tenía su propio rey.
La paz, sin embargo, no vino a solucionar los graves problemas que afectaban a las dos monarquías, pues en España, tras la muerte de Felipe IV en 1665, comenzaba un turbulento período por la minoría de edad de Carlos II y la regencia de Mariana de Austria, cuyo rasgo más destacado fue el difícil intento por mantener en pie un Imperio tocado tras las paces de Westfalia y de los Pirineos.
Portugal, por su parte, tampoco atravesaba una situación que permitiese grandes celebraciones, pues estaba inmerso en las disputas entre alfonsistas y pedristas producidas por la llegada al trono de Pedro II después de forzar a su hermano a cederle el poder, además de las penurias económicas originadas por la guerra que sufrían ambos reinos.
El tratado de 1668 fue un acuerdo de paz concertado entre España y Portugal con la intermediación de Inglaterra, mediante el cual se ponía fin a la guerra de separación de Portugal y supuso el reconocimiento oficial por parte de España de la independencia portuguesa.
Desde 1580 Portugal formaba - con el resto de reinos hispánicos – una unión dinástica en la que cada reino compartía el mismo monarca, pero en 1640 comenzó la Guerra de Restauración portuguesa, en la que este país intentaba conseguir su independencia de la Corona española.
En la firma del tratado, llevada a cabo en el convento de San Eloy de Lisboa, intervinieron por parte española, Gaspar de Haro y Guzmán, en nombre de Mariana de Austria, reina regente de España durante la minoría de edad de Carlos II.
Por parte portuguesa, participaron en nombre del rey Alfonso VI de Portugal Nuno Álvares Pereira de Melo y varios representantes más y ambos países aceptaron la intermediación de Edward Montagu, en nombre de Carlos II de Inglaterra.
Los principales puntos del acuerdo incluían: el cese en las hostilidades y el compromiso de paz; la restitución de las plazas tomadas durante la guerra, la libertad de circulación y comercio para los súbditos de ambos países en el país vecino; Amnistía para los prisioneros habidos durante la guerra; Restitución a sus dueños de las propiedades tomadas y Portugal sería libre de formar alianzas con quien quisiera. El acuerdo sería ratificado por España en febrero de 1668 y por Portugal en marzo del mismo año.
Con la firma del tratado de Lisboa, España reconocía la independencia de Portugal, poniendo fin a la unión que ambos países habían mantenido de hecho entre 1580 y 1640, y a la situación de indefinición producido entre 1640 y 1668, en el que España consideraba a Portugal parte del Imperio español, mientras Portugal tenía su propio rey.
La paz, sin embargo, no vino a solucionar los graves problemas que afectaban a las dos monarquías, pues en España, tras la muerte de Felipe IV en 1665, comenzaba un turbulento período por la minoría de edad de Carlos II y la regencia de Mariana de Austria, cuyo rasgo más destacado fue el difícil intento por mantener en pie un Imperio tocado tras las paces de Westfalia y de los Pirineos.
Portugal, por su parte, tampoco atravesaba una situación que permitiese grandes celebraciones, pues estaba inmerso en las disputas entre alfonsistas y pedristas producidas por la llegada al trono de Pedro II después de forzar a su hermano a cederle el poder, además de las penurias económicas originadas por la guerra que sufrían ambos reinos.
lunes, 12 de febrero de 2018
Las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista (JONS)
Tal día como hoy 12 de febrero de 1934, en España las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista, deciden fusionarse con la Falange Española.
Las JONS, fueron un movimiento político español, vigente entre 1931 y 1934, de ideología nacional-sindicalista y de carácter totalitario y contrario a los partidos políticos y a cualquier sistema democrático, que propugnaba la supremacía del Estado, pretendiendo articular ese Estado en torno a un Sindicato Vertical.
Las JONS nacieron en octubre de 1931, a partir de la fusión del grupo de Ramiro Ledesma Ramos con las "Juntas Castellanas de Actuación Hispánica", grupo fundado por Onésimo Redondo Ortega.
Están consideradas como un “fascismo a la española” y seguían la corriente fascista de Europa, adaptando algunos conceptos a las peculiaridades de la sociedad española de la época, así propugnaban la acción violenta como medio para alcanzar la que denominaban "revolución social".
Fueron las primeras en adoptar el símbolo de las cinco flechas entrecruzadas en un yugo o junta, así como el lema "¡España Una, Grande y Libre!" y "¡Arriba España!"
El 4 de marzo de 1934 se unieron con la Falange Española formando la nueva “Falange Española de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista” en un acto en el Teatro Calderón de Valladolid.
Al igual que ocurriera con el fascismo italiano a principio de los años 20, la violencia fue un elemento fundamental en la estrategia de las JONS.
Para Ledesma se había acabado el tiempo del terrorismo secreto y se abría una nueva etapa de las milicias uniformadas y disciplinadas, que ejerciesen esa violencia que sus objetivos políticos precisaban. Onésimo Redondo - su otro dirigente - declaró: "Estamos enamorados de una cierta violencia saludable".
Las milicias jonsistas se convirtieron en provocadores que contribuyeron a la violenta situación que vivió la II República
Las JONS propiamente dichas no llegaron a causar ninguna víctima mortal entre los militantes de organizaciones izquierdistas, pues la primera muerte de este tipo no se produjo hasta junio de 1934, cuando la organización ya se había fusionado con Falange Española dando lugar a Falange Española de las JONS.
Las JONS, fueron un movimiento político español, vigente entre 1931 y 1934, de ideología nacional-sindicalista y de carácter totalitario y contrario a los partidos políticos y a cualquier sistema democrático, que propugnaba la supremacía del Estado, pretendiendo articular ese Estado en torno a un Sindicato Vertical.
Las JONS nacieron en octubre de 1931, a partir de la fusión del grupo de Ramiro Ledesma Ramos con las "Juntas Castellanas de Actuación Hispánica", grupo fundado por Onésimo Redondo Ortega.
Están consideradas como un “fascismo a la española” y seguían la corriente fascista de Europa, adaptando algunos conceptos a las peculiaridades de la sociedad española de la época, así propugnaban la acción violenta como medio para alcanzar la que denominaban "revolución social".
Fueron las primeras en adoptar el símbolo de las cinco flechas entrecruzadas en un yugo o junta, así como el lema "¡España Una, Grande y Libre!" y "¡Arriba España!"
El 4 de marzo de 1934 se unieron con la Falange Española formando la nueva “Falange Española de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista” en un acto en el Teatro Calderón de Valladolid.
Al igual que ocurriera con el fascismo italiano a principio de los años 20, la violencia fue un elemento fundamental en la estrategia de las JONS.
Para Ledesma se había acabado el tiempo del terrorismo secreto y se abría una nueva etapa de las milicias uniformadas y disciplinadas, que ejerciesen esa violencia que sus objetivos políticos precisaban. Onésimo Redondo - su otro dirigente - declaró: "Estamos enamorados de una cierta violencia saludable".
Las milicias jonsistas se convirtieron en provocadores que contribuyeron a la violenta situación que vivió la II República
Las JONS propiamente dichas no llegaron a causar ninguna víctima mortal entre los militantes de organizaciones izquierdistas, pues la primera muerte de este tipo no se produjo hasta junio de 1934, cuando la organización ya se había fusionado con Falange Española dando lugar a Falange Española de las JONS.
domingo, 11 de febrero de 2018
Enrique VIII, primer jefe de la Iglesia de Inglaterra
Tal día como hoy 11 de febrero de 1534, Enrique VIII de Inglaterra es reconocido como jefe supremo de la Iglesia Anglicana.
La iglesia de Inglaterra surge de la Iglesia Católica Romana al separarse de ella en 1534, durante el reinado de Enrique VIII.
Esta separación teológica se venía gestando en la Iglesia británica a través de movimientos como el de los “Lolardos”, - movimiento político y religioso de finales del siglo XIV e inicios del siglo XV, generalmente identificado como un precursor de la Reforma - pero la Reforma Inglesa ganó verdadero peso político cuando Enrique VIII quiso "anular" su matrimonio con Catalina de Aragón.
Bajo la presión de Carlos V, sobrino de Catalina de Aragón y emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, el Papa Clemente VII, que inicialmente era favorable a la solicitud, la rechazó y, finalmente, el rey Enrique VIII, aunque teológicamente era un católico romano devoto - proclamado "Defensor de la Fe" por sus ataques al Luteranismo -, decidió convertirse en Jefe Supremo de la Iglesia de Inglaterra para asegurar la anulación de su matrimonio.
Enrique VIII mantuvo una fuerte preferencia por la liturgia católico-romana durante su reinado y los reformadores protestantes no pudieron realizar prácticamente ningún cambio en las doctrinas de la Iglesia de Inglaterra bajo su mandato.
Pero durante el reinado de su hijo, Eduardo VI, la iglesia llegó a ser protestante aunque fuese solo hasta retornar a la Iglesia Católica Romana, durante el reinado de la reina María I en 1555 - apodada por sus detractores como "María la Sanguinaria" - Bloody Mary -.
El establecimiento, bajo el gobierno de Elizabeth I, a partir de 1558, de una Iglesia de Inglaterra claramente protestante, pero moderada, permitió consolidarla legalmente y permitirle acomodar dentro de ella a una amplia gama de posiciones teológicas, lo cual ha sido, desde entonces, una de sus características más esenciales.
La iglesia de Inglaterra surge de la Iglesia Católica Romana al separarse de ella en 1534, durante el reinado de Enrique VIII.
Esta separación teológica se venía gestando en la Iglesia británica a través de movimientos como el de los “Lolardos”, - movimiento político y religioso de finales del siglo XIV e inicios del siglo XV, generalmente identificado como un precursor de la Reforma - pero la Reforma Inglesa ganó verdadero peso político cuando Enrique VIII quiso "anular" su matrimonio con Catalina de Aragón.
Bajo la presión de Carlos V, sobrino de Catalina de Aragón y emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, el Papa Clemente VII, que inicialmente era favorable a la solicitud, la rechazó y, finalmente, el rey Enrique VIII, aunque teológicamente era un católico romano devoto - proclamado "Defensor de la Fe" por sus ataques al Luteranismo -, decidió convertirse en Jefe Supremo de la Iglesia de Inglaterra para asegurar la anulación de su matrimonio.
Enrique VIII mantuvo una fuerte preferencia por la liturgia católico-romana durante su reinado y los reformadores protestantes no pudieron realizar prácticamente ningún cambio en las doctrinas de la Iglesia de Inglaterra bajo su mandato.
Pero durante el reinado de su hijo, Eduardo VI, la iglesia llegó a ser protestante aunque fuese solo hasta retornar a la Iglesia Católica Romana, durante el reinado de la reina María I en 1555 - apodada por sus detractores como "María la Sanguinaria" - Bloody Mary -.
El establecimiento, bajo el gobierno de Elizabeth I, a partir de 1558, de una Iglesia de Inglaterra claramente protestante, pero moderada, permitió consolidarla legalmente y permitirle acomodar dentro de ella a una amplia gama de posiciones teológicas, lo cual ha sido, desde entonces, una de sus características más esenciales.
domingo, 4 de febrero de 2018
Historia del reino de Taifa de Málaga
Tal día como hoy 4 de febrero de 1043, en España, se nombra rey de la Taifa de Málaga a Idris II.
La Taifa de Málaga fue un reino independiente musulmán que surgió en al-Ándalus en 1026, a raíz de la desintegración del Califato de Córdoba y que desaparecería en 1238 al ser conquistada por el Reino nazarí de Granada.
La primera etapa de la taifa abarca treinta y un años, período que se inició en 1026 cuando Yahya I bereber de la dinastía hammudí, tras ser expulsado del trono cordobés unió bajo su mandato a Málaga y Algeciras.
En 1035 la muerte de Yahya I supuso la división del territorio; Málaga pasó a ser gobernada por su hermano, Idris I , y la taifa de Algeciras, quedó en manos de su sobrino Muhammad ben al-Qasim.
A Idris I le sucedió en el trono malagueño Yahya II, quien se mantuvo solo un año, ya que fue desplazado por su tío Hasan, quien perdería el trono en 1042 a manos del eslavo Naya, con lo que la dinastía se vio interrumpida durante un breve período.
El asesinato de Naya ese mismo año supuso la vuelta de la dinastía. Idris II reinó hasta 1047, cuando fue depuesto, encarcelado y sustituido por su primo Muhammad I, que fue envenenado por su sobrino Idris III en 1052, quien se mantuvo en el trono sólo durante un año, ya que también fue asesinado por Idris II, que ocupó de nuevo el trono hasta su muerte en 1054.
El trono pasó entonces a su hijo Muhammad II y después al hermano de éste, quien sufrió la conquista de la taifa malagueña en 1057 a manos del rey zirí de Granada.
Desde la conquista de Málaga en 1057 por Granada, la taifa fue gobernada por un único rey dependiente de Granada. A la muerte de este en 1073 sus nietos se repartieron el reino, entre la taifa malagueña y la taifa granadina.
Inmediatamente se produjo un enfrentamiento entre los dos hermanos, y tras la conquista de Toledo por Alfonso VI, varios reyes taifas recurrieron a los almorávides para hacer frente al avance cristiano.
Los almorávides derrotaron al rey castellano-leonés en la batalla de Zalaca y tras la misma, viendo la debilidad de reinos taifas por sus continuas disputas internas, se enfrentaron a ellos, conquistando la taifa de Málaga en 1090.
La última etapa de la taifa de Málaga, abarca un período de nueve años, en que el trono fue ocupado por Ibn Zannun, cuyo fallecimiento en 1238 supuso su definitiva desaparición y quedó incorporada al reino de Granada.
La Taifa de Málaga fue un reino independiente musulmán que surgió en al-Ándalus en 1026, a raíz de la desintegración del Califato de Córdoba y que desaparecería en 1238 al ser conquistada por el Reino nazarí de Granada.
La primera etapa de la taifa abarca treinta y un años, período que se inició en 1026 cuando Yahya I bereber de la dinastía hammudí, tras ser expulsado del trono cordobés unió bajo su mandato a Málaga y Algeciras.
En 1035 la muerte de Yahya I supuso la división del territorio; Málaga pasó a ser gobernada por su hermano, Idris I , y la taifa de Algeciras, quedó en manos de su sobrino Muhammad ben al-Qasim.
A Idris I le sucedió en el trono malagueño Yahya II, quien se mantuvo solo un año, ya que fue desplazado por su tío Hasan, quien perdería el trono en 1042 a manos del eslavo Naya, con lo que la dinastía se vio interrumpida durante un breve período.
El asesinato de Naya ese mismo año supuso la vuelta de la dinastía. Idris II reinó hasta 1047, cuando fue depuesto, encarcelado y sustituido por su primo Muhammad I, que fue envenenado por su sobrino Idris III en 1052, quien se mantuvo en el trono sólo durante un año, ya que también fue asesinado por Idris II, que ocupó de nuevo el trono hasta su muerte en 1054.
El trono pasó entonces a su hijo Muhammad II y después al hermano de éste, quien sufrió la conquista de la taifa malagueña en 1057 a manos del rey zirí de Granada.
Desde la conquista de Málaga en 1057 por Granada, la taifa fue gobernada por un único rey dependiente de Granada. A la muerte de este en 1073 sus nietos se repartieron el reino, entre la taifa malagueña y la taifa granadina.
Inmediatamente se produjo un enfrentamiento entre los dos hermanos, y tras la conquista de Toledo por Alfonso VI, varios reyes taifas recurrieron a los almorávides para hacer frente al avance cristiano.
Los almorávides derrotaron al rey castellano-leonés en la batalla de Zalaca y tras la misma, viendo la debilidad de reinos taifas por sus continuas disputas internas, se enfrentaron a ellos, conquistando la taifa de Málaga en 1090.
La última etapa de la taifa de Málaga, abarca un período de nueve años, en que el trono fue ocupado por Ibn Zannun, cuyo fallecimiento en 1238 supuso su definitiva desaparición y quedó incorporada al reino de Granada.
sábado, 3 de febrero de 2018
La neutralidad de Franco durante la guerra mundial
Tal día como hoy 3 de febrero de 1944, en el marco de la Segunda Guerra Mundial, el General Francisco Franco reafirma la neutralidad de España.
La primera etapa de la dictadura se caracterizó por su acercamiento al fascismo italiano y al nazismo alemán y por las aspiraciones imperialistas de Franco, firmó el pacto Antikomintern junto a Hitler y Mussolini y, el tratado de amistad hispanoalemana.
Hitler diría de él que, junto a Mussolini, era el único aliado seguro y declarada la guerra, Franco adoptó una posición neutral, haciendo un llamamiento a la neutralidad a las grandes potencias. Posteriormente, cuando en junio de 1940 Italia entra en guerra al lado de Alemania, Franco cambia su declaración de neutralidad por la de “no-beligerancia”
Hitler, por las dificultades que encontró en la guerra contra Inglaterra, pensó en la conveniencia de que España se incorporara al conflicto y el 8 de agosto de 1940, Berlín elaboró un informe sobre los costes y beneficios de la entrada de España en la guerra.
Las ambiciones de Franco respecto a sus ganancias en la guerra, eran el Marruecos francés, una parte de Argelia, la ampliación del Sahara español y el territorio de Guinea Ecuatorial, así como recibir la Cataluña francesa.
El 23 de octubre de 1940 se produjo la Entrevista de Hendaya y estas exigencias, que chocaban con otros intereses de Hitler, no fueron atendidas por éste; y Hitler no consiguió flexibilidad de Franco en sus pretensiones. Ambos comentarían la reunión en tono despectivo.
Hitler diría que “con estos tipos no hay nada que hacer” y que preferiría que le sacasen tres o cuatro muelas antes que volver a conversar con Franco, a quien tildó de “latino charlatán” y comentaría a Mussolini que “había llegado a Generalísimo y jefe del Estado español solo por accidente”.
Por su parte, Franco comentaría a Serrano Suñer que: “Es intolerable esta gente; quieren que entremos en guerra a cambio de nada”. Pese a todo se estableció un protocolo y se trazó un plan para la toma de Gibraltar, denominado “Operación Félix”, que finalmente no se ejecutó.
Sin embargo, la situación española era desesperada, lo que obligó a Franco a recabar ayuda de Estados Unidos, mediante envíos de trigo a través de la Cruz Roja, envíos que estaban sujetos al mantenimiento de la neutralidad por parte de España.
El 12 de febrero de 1941 tuvo lugar la entrevista de Bordighera entre Franco y Mussolini, solicitada por Hitler para pedir a España su entrada en la guerra; sin embargo, de nuevo no se llegó a un entendimiento.
El 22 de junio de 1941 Alemania invadió la Unión Soviética y pese a la neutralidad española, se formó un cuerpo de voluntarios la “División Azul”, que fue enviada a Rusia bajo comandancia alemana.
La campaña rusa disparó el optimismo por la victoria del Eje y el 17 de julio, Franco pronunció ante el Consejo Nacional de Falange un agresivo discurso alabando al ejército nazi y esto alarmó a los aliados, hasta tal punto que los británicos comenzaron a hacer planes para ocupar las islas Canarias.
Pese a todo, las crecientes dificultades económicas y los primeros reveses sufridos por Alemania en Rusia y norte de África hicieron a Franco mantener la prudencia, haciéndole renunciar a sus sueños imperiales y a pensar sobre todo en su permanencia en el poder.
La primera etapa de la dictadura se caracterizó por su acercamiento al fascismo italiano y al nazismo alemán y por las aspiraciones imperialistas de Franco, firmó el pacto Antikomintern junto a Hitler y Mussolini y, el tratado de amistad hispanoalemana.
Hitler diría de él que, junto a Mussolini, era el único aliado seguro y declarada la guerra, Franco adoptó una posición neutral, haciendo un llamamiento a la neutralidad a las grandes potencias. Posteriormente, cuando en junio de 1940 Italia entra en guerra al lado de Alemania, Franco cambia su declaración de neutralidad por la de “no-beligerancia”
Hitler, por las dificultades que encontró en la guerra contra Inglaterra, pensó en la conveniencia de que España se incorporara al conflicto y el 8 de agosto de 1940, Berlín elaboró un informe sobre los costes y beneficios de la entrada de España en la guerra.
Las ambiciones de Franco respecto a sus ganancias en la guerra, eran el Marruecos francés, una parte de Argelia, la ampliación del Sahara español y el territorio de Guinea Ecuatorial, así como recibir la Cataluña francesa.
El 23 de octubre de 1940 se produjo la Entrevista de Hendaya y estas exigencias, que chocaban con otros intereses de Hitler, no fueron atendidas por éste; y Hitler no consiguió flexibilidad de Franco en sus pretensiones. Ambos comentarían la reunión en tono despectivo.
Hitler diría que “con estos tipos no hay nada que hacer” y que preferiría que le sacasen tres o cuatro muelas antes que volver a conversar con Franco, a quien tildó de “latino charlatán” y comentaría a Mussolini que “había llegado a Generalísimo y jefe del Estado español solo por accidente”.
Por su parte, Franco comentaría a Serrano Suñer que: “Es intolerable esta gente; quieren que entremos en guerra a cambio de nada”. Pese a todo se estableció un protocolo y se trazó un plan para la toma de Gibraltar, denominado “Operación Félix”, que finalmente no se ejecutó.
Sin embargo, la situación española era desesperada, lo que obligó a Franco a recabar ayuda de Estados Unidos, mediante envíos de trigo a través de la Cruz Roja, envíos que estaban sujetos al mantenimiento de la neutralidad por parte de España.
El 12 de febrero de 1941 tuvo lugar la entrevista de Bordighera entre Franco y Mussolini, solicitada por Hitler para pedir a España su entrada en la guerra; sin embargo, de nuevo no se llegó a un entendimiento.
El 22 de junio de 1941 Alemania invadió la Unión Soviética y pese a la neutralidad española, se formó un cuerpo de voluntarios la “División Azul”, que fue enviada a Rusia bajo comandancia alemana.
La campaña rusa disparó el optimismo por la victoria del Eje y el 17 de julio, Franco pronunció ante el Consejo Nacional de Falange un agresivo discurso alabando al ejército nazi y esto alarmó a los aliados, hasta tal punto que los británicos comenzaron a hacer planes para ocupar las islas Canarias.
Pese a todo, las crecientes dificultades económicas y los primeros reveses sufridos por Alemania en Rusia y norte de África hicieron a Franco mantener la prudencia, haciéndole renunciar a sus sueños imperiales y a pensar sobre todo en su permanencia en el poder.
viernes, 2 de febrero de 2018
Ruy López de Villalobos y las islas Filipinas
Tal día como hoy 2 de febrero de 1543, Ruy López de Villalobos inicia la colonización del archipiélago de las Filipinas, bautizadas así en honor del príncipe Felipe II de España.
López de Villalobos, nacido en Málaga, fue un hidalgo y marino español que exploró las Filipinas y trató, sin éxito, de colonizarlas y establecer una ruta comercial con los territorios españoles en América, siendo conocido porque su expedición dio nombre a esas islas como “Filipinas”.
Los intereses político-económicos de portugueses y españoles les habían llevado a trazar un reparto de conquistas y explotación económica de los nuevos territorios que iban descubriendo, lo que se logró en el Tratado de Tordesillas de 1494.
Cuando Juan Sebastián Elcano dio la vuelta al mundo, los monarcas de ambos Estados se vieron obligados a completar el reparto con un nuevo tratado, que completaba el anterior, fue el Tratado de Zaragoza de 1529.
La exploración había dado lugar al hallazgo de nuevas tierras que Carlos V ambicionaba: las islas Filipinas. La posesión de una base en esta zona permitía acceder al comercio con China y Japón y al acceso a las especias, muy cotizadas en la Europa del siglo XVI.
Las Filipinas se encontraban en una situación límite en lo que al tratado respecta, por lo que se dieron instrucciones a López de Villalobos para que se limitara a explorar y colonizarlas evitando los territorios portugueses.
En 1541,Villalobos recibió el encargo de encabezar una expedición y partió del puerto mexicano de Barra de Navidad el 1 de noviembre de 1542, a bordo de cuatro navíos mayores, un bergantín y una goleta.
El 29 de febrero entraron en bahía Baganga, a la que llamaron Málaga, en la costa oriental de la isla de Mindanao y la flota permaneció allí 32 días, mientras la tripulación sufría de hambre extrema.
El galeón San Cristóbal, que había llegado 2 meses antes, apareció con una carga de arroz y otros alimentos y el 4 de agosto, el San Juan y el San Cristóbal fueron enviados a las islas de Leyte y Samar para obtener más alimentos.
Un contingente portugués llegó el 7 de agosto con una carta del gobernador de la Molucas, exigiendo una explicación sobre la presencia de la flota en territorio portugués. López de Villalobos respondió, en una carta que no estaban invadiendo, y que se encontraban dentro de la línea de demarcación de la Corona de Castilla
En abril de 1544 se dirigieron a las islas de Samar y Leyte, a las que llamaron Las Islas Filipinas en honor del Príncipe de España, Felipe II, pero expulsados por nativos hostiles, el hambre y un naufragio, López de Villalobos se vio obligado a abandonar sus asentamientos y buscaron refugio en las Molucas, y tras algunas escaramuzas con los portugueses, fueron detenidos y encarcelados.
López de Villalobos murió el 4 de abril de 1546, en su celda de la prisión en la isla de Amboina, por causa de una fiebre tropical.
Mas de cien miembros de la tripulación se embarcaron para Malaca, donde los portugueses les pusieron en un barco con destino a Lisboa y unos treinta optaron por permanecer allí.
López de Villalobos, nacido en Málaga, fue un hidalgo y marino español que exploró las Filipinas y trató, sin éxito, de colonizarlas y establecer una ruta comercial con los territorios españoles en América, siendo conocido porque su expedición dio nombre a esas islas como “Filipinas”.
Los intereses político-económicos de portugueses y españoles les habían llevado a trazar un reparto de conquistas y explotación económica de los nuevos territorios que iban descubriendo, lo que se logró en el Tratado de Tordesillas de 1494.
Cuando Juan Sebastián Elcano dio la vuelta al mundo, los monarcas de ambos Estados se vieron obligados a completar el reparto con un nuevo tratado, que completaba el anterior, fue el Tratado de Zaragoza de 1529.
La exploración había dado lugar al hallazgo de nuevas tierras que Carlos V ambicionaba: las islas Filipinas. La posesión de una base en esta zona permitía acceder al comercio con China y Japón y al acceso a las especias, muy cotizadas en la Europa del siglo XVI.
Las Filipinas se encontraban en una situación límite en lo que al tratado respecta, por lo que se dieron instrucciones a López de Villalobos para que se limitara a explorar y colonizarlas evitando los territorios portugueses.
En 1541,Villalobos recibió el encargo de encabezar una expedición y partió del puerto mexicano de Barra de Navidad el 1 de noviembre de 1542, a bordo de cuatro navíos mayores, un bergantín y una goleta.
El 29 de febrero entraron en bahía Baganga, a la que llamaron Málaga, en la costa oriental de la isla de Mindanao y la flota permaneció allí 32 días, mientras la tripulación sufría de hambre extrema.
El galeón San Cristóbal, que había llegado 2 meses antes, apareció con una carga de arroz y otros alimentos y el 4 de agosto, el San Juan y el San Cristóbal fueron enviados a las islas de Leyte y Samar para obtener más alimentos.
Un contingente portugués llegó el 7 de agosto con una carta del gobernador de la Molucas, exigiendo una explicación sobre la presencia de la flota en territorio portugués. López de Villalobos respondió, en una carta que no estaban invadiendo, y que se encontraban dentro de la línea de demarcación de la Corona de Castilla
En abril de 1544 se dirigieron a las islas de Samar y Leyte, a las que llamaron Las Islas Filipinas en honor del Príncipe de España, Felipe II, pero expulsados por nativos hostiles, el hambre y un naufragio, López de Villalobos se vio obligado a abandonar sus asentamientos y buscaron refugio en las Molucas, y tras algunas escaramuzas con los portugueses, fueron detenidos y encarcelados.
López de Villalobos murió el 4 de abril de 1546, en su celda de la prisión en la isla de Amboina, por causa de una fiebre tropical.
Mas de cien miembros de la tripulación se embarcaron para Malaca, donde los portugueses les pusieron en un barco con destino a Lisboa y unos treinta optaron por permanecer allí.
jueves, 1 de febrero de 2018
Historia de una fotografía
Tal día como hoy 1 de febrero de 1968, en el marco de la guerra de Vietnam, el jefe de la policía survietnamita, general Nguyen Ngoc Loan asesina a un prisionero norvietnamita ante las cámaras de la cadena de televisión NBC.
Ngọc Loan fue un general survietnamita y jefe de la policía de la extinta República de Vietnam del Sur, hasta su cese en el cargo en 1969, que atrajo la atención mundial cuando el 1 de febrero de 1968 descerrajó un disparo en la cabeza en medio de una calle de Saigón a un prisionero esposado, miembro del Viet Cong.
La ejecución extrajudicial, se produjo ante un cámara de la NBC y la instantánea fue galardonada con el premio Pulitzer y junto a la filmación se convirtió en un icono de la guerra de Vietnam y del periodismo fotográfico.
Formado en el ejército del aire por los franceses, Loan ganó un cargo preeminente en la policía de Vietnam del Sur por su carácter valeroso y decidido al ser considerado un oficial competente y resolutorio, aunque en las distancias cortas se mostraba como un hombre frío e introvertido, siendo conocido por sus hombres debido a su carácter promiscuo y mujeriego.
Se hizo mundialmente famoso por la ejecución delante de las cámaras de televisión del prisionero del Viet Cong Nguyen Van Lem en 1969 y esto le supuso la caída en desgracia frente a los oficiales estadounidenses, hasta ser dado de baja.
Loan cayó en una fuerte depresión tras su cese y, al ser entrevistado sobre su acción, respondió que el motivo de la ejecución sumaria del vietcong fue debido a que éste luchaba vestido de civil; algo que para él significaba una cobardía que no debía producirse en la guerra.
Exiliado a los Estados Unidos tras la guerra, Loan abrió una pizzería en Virginia hasta que su identidad fue revelada en la prensa en 1991, muriendo de cáncer en 1998.
En Estados Unidos, esta imagen aumentó la oposición a la invasión estadounidense del Vietnam.
Ngọc Loan fue un general survietnamita y jefe de la policía de la extinta República de Vietnam del Sur, hasta su cese en el cargo en 1969, que atrajo la atención mundial cuando el 1 de febrero de 1968 descerrajó un disparo en la cabeza en medio de una calle de Saigón a un prisionero esposado, miembro del Viet Cong.
La ejecución extrajudicial, se produjo ante un cámara de la NBC y la instantánea fue galardonada con el premio Pulitzer y junto a la filmación se convirtió en un icono de la guerra de Vietnam y del periodismo fotográfico.
Formado en el ejército del aire por los franceses, Loan ganó un cargo preeminente en la policía de Vietnam del Sur por su carácter valeroso y decidido al ser considerado un oficial competente y resolutorio, aunque en las distancias cortas se mostraba como un hombre frío e introvertido, siendo conocido por sus hombres debido a su carácter promiscuo y mujeriego.
Se hizo mundialmente famoso por la ejecución delante de las cámaras de televisión del prisionero del Viet Cong Nguyen Van Lem en 1969 y esto le supuso la caída en desgracia frente a los oficiales estadounidenses, hasta ser dado de baja.
Loan cayó en una fuerte depresión tras su cese y, al ser entrevistado sobre su acción, respondió que el motivo de la ejecución sumaria del vietcong fue debido a que éste luchaba vestido de civil; algo que para él significaba una cobardía que no debía producirse en la guerra.
Exiliado a los Estados Unidos tras la guerra, Loan abrió una pizzería en Virginia hasta que su identidad fue revelada en la prensa en 1991, muriendo de cáncer en 1998.
En Estados Unidos, esta imagen aumentó la oposición a la invasión estadounidense del Vietnam.
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