Tal día como hoy 24 de febrero de 1925, en Granada se inaugura el tranvía a Sierra Nevada, que permitía la comunicación entre muchos pueblos de la provincia y funcionó entre 1925 y 1974.
Hasta cuatro proyectos distintos se presentaron con anterioridad al proyecto definitivo, por iniciativa de Julio Quesada Cañaveral y Piédrola y sus socios con el establecimiento de la Sociedad Anónima del Tranvía-Ferrocarril de Granada a Sierra Nevada en 1919, iniciándose las obras en 1921 para conectar la zona de las Vistillas, en Granada, hasta El Charcón y desde aquí hasta Sierra Nevada.
El trazado seguía el curso del río Genil paralelo a la carretera de Granada a Sierra Nevada hasta la localidad de Pinos Genil, atravesando catorce túneles y veinte puentes.
Debido a dificultades económicas y a los avatares políticos de España, hubo que esperar hasta 1944 para la puesta en funcionamiento del tramo entre Maitena y Barranco de San Juan y aquí se proyectó la construcción de un funicular hasta las pistas de esquí de Sierra Nevada, que nunca llegó a construirse.
En 1971 la gestión pasa a FEVE - Ferrocarriles Españoles de Vía Estrecha - siendo clausurado el 19 de enero de 1974, con un trazado total de 24 kilómetros, que fue anegado en parte tras la construcción del embalse de Canales.
El 19 de enero de 1974, el tranvía entre Granada y Sierra Nevada completó su último viaje y ese mismo día, ya se le empezó a echar de menos. No hubo nada extraordinario, solo el acudir en masa del público granadino “para decirle adiós al vehículo que tantas ocasiones de felicidad le había proporcionado".
Actualmente, el tranvía se ha convertido en casi una leyenda, que las generaciones mayores les cuentan a los jóvenes cuando hacen senderismo y se acercan a los restos de aquella infraestructura.
Existen diferentes imágenes antiguas sobre el tranvía que, en su conjunto, acumulan más de 80.000 reproducciones en YouTube.
En cualquier caso, no deja de sorprender la falta de visión que se tuvo en aquel momento para no dejar parte de su trayecto intacto pensando en lo que podía servir para el turismo o las familias.
Ahora, solo queda la nostalgia por lo que fue y por lo que, tristemente, ya no es hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario