Tal día como hoy 4 de octubre de 2014, a unas 70 millas al este de la localidad de Saint Augustine -Estados Unidos-, la Guardia Costera rescata en medio del mar a un tal Reza Baluchi, que pretendía llegar a las islas Bermudas flotando en un globo inflado con hidrógeno.
El corredor de maratón Reza Baluchi ,que se enfrentaba al desafío de cruzar desde Florida hasta las islas Bermudas corriendo dentro de una enorme burbuja flotante, fue rescatado tras quedar completamente exhausto y a la deriva.
El estadounidense Reza Baluchi, fue sacado del agua frente a las costas de Florida, después de activar una señal de radio pidiendo socorro. En un primer momento, la Guardia Costera había sido advertida, de la odisea de Baluchi, cuando recibió avisos sobre un ciudadano estadounidense flotando dentro de una burbuja inflable.
Según los rescatadores, Baluchi estaba desorientado y preguntaba la dirección hacia Bermudas. Entonces, un buque de la Guardia Costera lo encontró y le instó a suspender su aventura, advirtiéndole de los peligros de su viaje. Pero Baluchi, cuya burbuja estaba equipada con barras de proteína, botellas de agua, un aparato GPS y un teléfono por satélite, ignoró las advertencias y continuó la travesía hasta que finalmente fue rescatado.
Dos años mas tarde en el 2916, la Guardia Costera de EE UU , tuvo nuevamente que rescatar a Reza Baluchi acabando con la aventura de este intrépido aventurero que pretendía cruzar desde Florida a las Bermudas en una gran burbuja hinchable.
El atleta norteamericano, de 44 años, pretendía, por segunda vez, cruzar desde Florida a las Bermudas en una gran burbuja hinchable, llamada Hydro Pod.
Las autoridades costeras ya le denegaron el permiso porque ni la embarcación ni las condiciones para hacer el viaje eran seguras. Pero Baluchi siguió adelante con su hazaña, cuyo objetivo era recaudar fondos para niños necesitados.
Ahora, el atleta se enfrenta a una multa de hasta 40.000 dólares por violar una orden de las autoridades estadounidenses.
Baluchi, ya había intentado una aventura similar en 2014, cuando fue rescatado por los guardacostas en medio del mar, una operación que, según un comunicado de la Guardia Costera, le costó a los contribuyentes 140.000 dólares.
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