Tal día como hoy, 1 de noviembre de 1625, comenzaba la valiente defensa, que durante siete días llevó a cabo la ciudad de Cádiz, contra más de 100 barcos y 15.000 soldados ingleses.
La derrota inglesa en Cádiz en 1625, se debió a la exitosa defensa española, que repelió el ataque anglo-holandés, el 1 de noviembre de ese año, y estuvo marcada por el liderazgo, del veterano Fernando Girón de Salcedo, las pérdidas anglo-holandesas y su consiguiente fracaso.
A pesar de captura del fuerte del Puntal y saquear algunas bodegas, el avance inglés fue frenado y tuvieron que abandonar las costas españolas, con un elevado número de bajas
Tras la declaración de guerra, de Inglaterra contra España en el año 1624, el Rey Carlos I de Inglaterra, con el apoyo de las Provincias Unidas, de los Países Bajos, organizó una gran flota bajo el mando de Sir Edwar Cecil. Con el objetivo de atacar, algún puerto español importante y capturar la flota de Indias, proveniente de América.
Ese objetivo fue el puerto de Cádiz. Puerto que los ingleses atacaron, con unos 15.000 hombres a bordo de 105 naves. El ataque comenzó tal día como hoy de 1625, pero este se alargó durante siete largos días.
La defensa de la plaza, estuvo a cargo del gobernador Fernando Girón, un experimentado militar que, a pesar de su enfermedad (gota), logró organizar las defensas
El ataque, cogió por sorpresa al ejército español, pero la extraordinaria defensa llevada a cabo por poco más de 6.000 hombres, liderados por el gobernador de Cádiz, Fernando Girón, unida a la escasa preparación y la mala organización, de las tropas inglesas, impidió, que la misión enemiga fuese un éxito.
El ataque inglés fue un fracaso total. Las pérdidas fueron cuantiosas. Unos 7.000 enemigos y 62 barcos ingleses, perecieron en las costas gaditanas. No obstante, la defensa de Cádiz, no trajo consigo únicamente, graves pérdidas económicas para los ingleses, también una gran pérdida de prestigio, al perder de forma abrupta, el único gran enfrentamiento, de la Guerra anglo-española.
La expedición, supuso graves pérdidas para Inglaterra, en dinero y prestigio, El fracaso de este asalto, llevó a los británicos a reconsiderar, la guerra contra España y a centrarse en otros objetivos.










































