Barbie, la revolución de las muñecas

Tal día como hoy, 9 de marzo de 1959 nació una de las muñecas más famosas del mundo: Barbara Millicent Roberts, más conocida como Barbie.

Barbie se presentó en sociedad en la Feria del Juguete de Nueva York ataviada con un bañador de escote y rayas blancas y negras, cola de caballo y flequillo rizado. 

Aunque la muñeca tuvo un éxito de ventas brutal en los años 90, en sus inicios los compradores de juguetes se mostraron escépticos pues esta curvilínea mujer adulta, no se parecía en nada a los bebés y muñecos de niños que triunfaban en ese momento.

La muñeca Barbie fue creada por Ruth Handler, junto a su marido. Handler vio cómo su hijo podía, con sus juguetes, jugar a ser astronauta, bombero, doctor y más profesiones mientras que las opciones de su hija se limitaban a ser mamá o cuidadora. Ruth creó a Barbie para enseñar a las niñas que podían elegir, y la llamó como a su hija. El novio de la muñeca llevaría el nombre de su hijo: Ken.

Las críticas al escultural cuerpo de la muñeca rubia no tardarían en llegar. En 1958 Mattel realizó un estudio de mercado con madres y estas opinaron que la muñeca tenía "demasiada figura", pero eso dió igual y en 1959 Barbie apareció por primera vez en televisión, anunciándose a los niños en el Club de Mickey Mouse. Tal fue el éxito, que en su primer año se vendieron 350 000 muñecas.

Las primeras Barbie con carrera llegaron en la década de los 60. La Barbie editora de moda, la enfermera y la ejecutiva buscaban inspirar a las niñas para que cuando fueran mujeres quisieran incorporarse al mercado de trabajo.

Al poco tiempo Barbie empezó a tener pertenencias; un coche, un dos plazas color melocotón que prometía llevar a la muñeca a donde ella quisiera, una casa que incluía hasta un equipo de música y una caravana con la que adentrarse en terrenos inexplorados.

Precisamente por la cantidad de cosas que pasó a tener la muñeca, Barbie fue criticada de materialista. Sin embargo, muchas mujeres le atribuyen  el mérito de ofrecer una alternativa a los restrictivos roles de género de los años 50.

A diferencia de las muñecas bebé, Barbie no enseñaba a criar, como se estilaba en la época, la muñeca no se definía por ser la “mujer de”, “la hija de” o “la madre de”, Barbie no tenía padres, y tampoco tenía hijos. De hecho cuando a principios de los 70 los consumidores pidieron que Barbie tuviera un bebé, Mattel no la convirtió en madre sino en baby sitter -cuidadora de bebés-.

Otro aspecto crítico de la muñeca ha sido siempre su cuerpo, demasiado delgado. En 1994 un equipo de investigadores concluyó que si Barbie fuera una mujer no podría menstruar por su bajísimo porcentaje de grasa corporal. En este sentido y para adaptarse a la realidad del cuerpo de la mujer, Mattel lanzó en 2016 muñecas Barbie con diferentes tipos de cuerpo: curvilíneas, bajas y altas y se convirtió entonces en la portada de la revista Time.

También se ha criticado que su aspecto fuera el de la típica mujer blanca americana a lo que Mattel respondió creando la primera Barbie de color y la primera Barbie hispana en 1980 y años más tarde llegarían las Barbie de otras razas.

En los últimos tiempos Mattel ha seguido trabajando en la idea de que las mujeres pueden ser profesionalmente lo que se propongan. Barbie está presente en más de 200 carreras y subiendo, no hay techo que Barbie no haya roto.