martes, 24 de marzo de 2020

El desastre del petrolero Exxon Valdez

Tal día como hoy, 24 marzo de 1989 el petrolero Exxon Valdez vierte al mar 36.000 toneladas de petróleo en aguas de Alaska, afectando 2.000 km de costa. Este desastre dará lugar a que se apruebe una nueva legislación medioambiental en los Estados Unidos - “Oil Pollution Act”- de 1990.

El Exxon Valdez era un petrolero construido en el año 1986 y en su tiempo fue considerado un buque moderno de construcción enteramente soldada y diseñado para cumplir los acuerdos de la convención internacional para la prevención de la polución del año 1978.

Con sus 300 metros de eslora y con un calado de casi 20 metros, estaba habilitado para el transporte de 1,5 millones de barriles de petróleo por travesía. El buque permaneció en servicio hasta el año 2009 bajo la bandera de la compañía Dong Fang Ocean y fue desguazado en la India en el año 2012.

El Exxon Valdez zarpó el 23 de Marzo de 1989 y a las 23 horas, el capitán del barco comunicó a la torre de control de costas, que estaba alcanzando la velocidad de crucero, decisión discutida por encontrarse el canal de salida del puerto con enormes bloque de hielo.

El capitán, para irse a descansar dejó al mando del timón, al entonces tercer oficial Cousins y el timonel Kagan, indicándoles que pusieran el piloto automático y mantuvieran el rumbo.

A las 7 horas de la mañana el Exxon Valdez se estremecía con una serie de sacudidas en unos escollos de los islotes de Bligh. En pocas horas, se formó una enorme mancha de petróleo a través de la costa de la Alaska, transformándose en una de las mayores catástrofes ecológicas ocurridas en toda la historia de los Estados Unidos.

La manta de petrolero derramada cubrió 1.300 millas de costa, matando a cientos de especies marinas como focas, ballenas y pájaros. El petróleo derramado por el Exxon Valdez fue la quinta parte de su carga, pero se extendió, debido a la baja temperatura de las aguas, vientos intensos y mar agitada a través de casi 7000 kilómetros cuadrados de costa.

Debido a la dispersión de la población en esos remotos lugares de Alaska, no fue posible iniciar las tareas para frenar la contaminación hasta pasadas doce horas después del accidente, lo que contribuyó a una mayor dispersión de la mancha de crudo.

En septiembre del año 1991 se anunció que la Exxon había satisfecho una indemnización de 150 millones de dólares en concepto de sentencias judiciales y para paliar el coste de los trabajos de descontaminación en las costas de Alaska.

El timonel Kagan era un profesional con 13 años de experiencia en la compañía, con unos informes de evaluación profesional altamente favorables, que indicaban que era competente para recibir órdenes sencillas pero era desaconsejable indicarle trabajos con una elevada complejidad.

Las iniciativas del tercer oficial Cousins, fueron altamente discutibles ya que retrasó un giro seis minutos y quizás no ordenó con la rapidez suficiente un cambio de rumbo. El capitán Hazelwood indicó que dio órdenes precisas sobre el rumbo que se debía seguir y se aseguró de que se habían comprendido, entendió que dejaba el buque en unas manos expertas y de confianza, pero las posteriores investigación federales pusieron en duda estas afirmaciones.

El 29 de enero del año 1990 el capitán Hazelwood fue demandado por daños y perjuicios y en marzo de 1990 fue absuelto de todas las imputaciones salvo la de vertido de petróleo por negligencia y fue condenado a una pena de prisión con libertad condicional.

Debido a este accidente el presidente George W Bush impulsó una ley - “Oil Pollution Act”- en la cual a todos aquellos petroleros que no dispongan de doble casco, se les prohíbe su navegación por las aguas jurisdiccionales estadounidenses.

No hay comentarios:

Publicar un comentario