martes, 19 de enero de 2016

Los últimos soldados españoles que abandonaron la isla de Chiloé.

Tal día como hoy 19 de enero de 1826, capitulan las tropas españolas que, durante seis años, se mantuvieron en la isla de Chiloé.

Este archipiélago, situado al sur de Chile, está integrado por una gran isla - la isla Grande de Chiloé - y gran número de islas menores, con una población que en la actualidad ronda las 160.000 personas.

Los enfrentamientos entre españoles, chilotes realistas y patriotas chilenos, se mantuvieron desde 1820 a 1826 por el dominio del archipiélago, último enclave de la Monarquía Española en el actual territorio chileno.

Estas islas, habían sido incorporadas en 1766 por los españoles al Virreinato del Perú, y cuando a comienzos del siglo XIX Hispanoamérica inició las guerras de independencia, Chiloé, debido a su aislamiento, no se sumó al movimiento y su población se mantuvo leal a la corona española.

El 4 de febrero de 1820, el nuevo gobierno chileno pensó que las tropas españolas en las islas, eran una amenaza y para eliminarla definitivamente era indispensable incorporar el archipiélago al territorio nacional.

El 16 de febrero, la flota chilena se dirigió contra el fuerte Castillo San Miguel de Agüi siendo rechazada y debido a este revés, no se produjeron más intentos de conquista hasta cuatro años después.

En marzo de 1824, las fuerzas patriotas hicieron nuevos desembarcos cerca de San Carlos de Chiloé, donde los realistas tendieron una emboscada a los independentistas chilenos, siendo nuevamente derrotados.

A comienzos de 1826,  se volvió a intentar  una tercera campaña, esta vez con éxito, capitulando las fuerzas realistas y firmándose el Tratado de Tantauco el 15 de enero de 1826, mediante el cual se dio término a la guerra de Independencia de Chile, permitiendo la incorporación definitiva de este archipiélago a su territorio y el abandono del país del último ejército español.

El tratado, establecía que los habitantes pasarían a ser chilenos y les serían respetados todos sus bienes y propiedades, debiendo entregar armas, municiones y distintivos, marcando la incorporación del archipiélago - junto con la rendición de “El Callao”, ocurrida una semana después - la capitulación del último reducto español en América del Sur.

Los chilotes no se integraron en la república chilena en formación, y siguieron viviendo como siempre lo había hecho, pues todo su mundo estaba en su archipiélago, no obstante la incorporación y su población de expertos navegantes, permitió a Chile en 1843 asegurar la soberanía sobre el Estrecho de Magallanes.


3 comentarios:

  1. Cada día aportas algo nuevo y bueno. Esto era totalmente desconocido para mí; gracias por la ilustración puntual y precisa.

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  2. Cada día aportas algo nuevo y bueno. Esto era totalmente desconocido para mí; gracias por la ilustración puntual y precisa.

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    1. Gracias siempre a ti por tu fidelidad lectora. Este episodio es marginal en la Historia y sin trascedencia alguna para la amancipación americana de España. Tal vez por eso, me ha parecido interesante recordarlo

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