El servicio ha sido continuo desde 1936, excepto durante la Segunda Guerra Mundial -1939 – 1946 - cuando fue retirado del aire.
La British Broadcasting Corporation, o simplemente BBC, es el servicio público de radio y televisión del Reino Unido con sede en la Broadcasting House en Londres y actúa bajo el mandato de una carta real que garantiza su independencia frente a controles de tipo político o comercial.
Emite para todo el Reino Unido y su territorio está formado geográficamente por la isla de Gran Bretaña, el noreste de la isla de Irlanda - Irlanda del Norte -, pequeñas islas adyacentes y Territorios británicos de ultramar.
Sus valores escoceses y presbiterianos aseguraron que la BBC completaba su tarea de informar, educar, y entretener, y mantenía su promesa de imparcialidad en política, noticias y asuntos de actualidad. La gran reputación de la BBC en la cobertura de noticias empezó a forjarse en 1926, durante su época como radio, gracias a las innovaciones y al continuo esfuerzo por explorar nuevas formas de dar las noticias.
La Segunda Guerra Mundial vino a confirmar esta tendencia, cuando la cadena se convirtió en la principal agencia de noticias del mundo, cubriendo de una forma excelente el conflicto y proveyendo de contenido informativo a las televisiones y radios de todo el mundo.
La cadena introdujo novedades y creció de forma importante durante la Segunda Guerra Mundial, en buena medida para asegurar, con estos servicios extras, la continuidad de su servicio principal, el Home Service y lanzaron nuevas emisoras, primero de música ligera y luego de arte y música clásica.
En televisión, las emisiones de la BBC alcanzaron gran popularidad con su relanzamiento tras finalizar la guerra, y los responsables supieron innovar para crear contenidos educativos a partir de 1952, y un segundo canal, llamado BBC- 2, en 1962.
A pesar de ser técnicamente independiente del gobierno, el comité directivo es nombrado por éste, y no han sido pocas las situaciones de crisis –Suez, la Guerra de las Malvinas, la crisis del Ulster, etc,- en las que la cadena ha recibido numerosas presiones por parte de los gobernantes de turno.
Como ente público, en cualquier caso ha tenido que hacer frente al espíritu de cada época. Con un claro sesgo liberal y progresista durante los sesenta, y un cambió de forma radical en los ochenta, con la llegada de Margaret Thatcher y su conservadurismo.
En la nueva era del cable, el satélite y los medios interactivos, la cadena británica mantiene un estatus privilegiado entre los más prestigiosos medios del mundo.
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