lunes, 11 de septiembre de 2017

Inés de Suárez, cruel y devota conquistadora


Tal día como hoy 11 de septiembre de 1541, el cacique Michimalonco, por sorpresa ataca la recién fundada ciudad de “Santiago de la Nueva Extremadura”, hoy conocida como Santiago de Chile.

Durante el asalto, Inés de Suárez amante de Pedro de Valdivia, ordena decapitar a unos caciques presos, para amedrentar a los atacantes y muchos de ellos huyen despavoridos cuando tenían la victoria al alcance de su mano.

Inés Suárez, nació en 1507 en Plasencia - Cáceres - y a la edad de 19 años se casó con Juan de Málaga, que en 1528 se embarcó rumbo a Panamá mientras Inés permaneció en España, hasta que  consiguió licencia del rey y fue en su busca.

En 1537, llegó a América pero su esposo había muerto en la Batalla de las Salinas y al ser viuda de un soldado español, recibió una pequeña parcela de tierra en el Cuzco, donde se instaló y donde conoció a Pedro de Valdivia, maestre de Francisco Pizarro, forjándose una  relación que los llevó a ser amantes.

A finales de 1539, marchó junto a Valdivia en su expedición a tierras de Chile, en la que figuraba como “sirviente doméstico”, siendo considerada como; “mujer de extraordinario arrojo y lealtad, discreta, sensata y bondadosa, que disfrutaba de gran estima entre los conquistadores”.

A los once meses, la expedición llegó al valle del río Mapocho, donde fundaron “Santiago de Nueva Extremadura” y aunque Valdivia envió una embajada a los caciques con deseos de paz y estos aceptaron los regalos, lanzaron un ataque contra los españoles, pero fueron vencidos, apresando a siete de ellos.

El 9 de septiembre de 1541, Valdivia, abandonó la recién fundada ciudad para sofocar una rebelión y al día siguiente, se tuvo noticia de que los bosques cercanos se encontraban llenos de indígenas hostiles, que al poco, iniciaron un gran ataque.

Al principio del combate, la labor de Inés consistió en atender heridos, pero viendo en la muerte de los siete caciques la única esperanza de salvación, Inés propuso decapitarlos y arrojar sus cabezas entre los indígenas para causar el pánico entre ellos.

Testigos del hecho narran, que al preguntar la manera en que debían hacerlo, Inés les dijo; "De esta manera" y tomando una espada, decapitó ella misma al primero y después a todos los demás, arrojando luego sus cabezas entre los atacantes y los españoles, aprovechando la confusión de los indígenas, lograron hacer huir a los atacantes.

En 1549, Valdivia “arregló” su matrimonio con Rodrigo de Quiroga, uno de sus capitanes y tras casarse, su vida se tornó tranquila y dedicada a las obras de piedad, tales como la construcción del templo de la Merced y la ermita de Montserrat en Santiago de Chile, ciudad donde murió en 1580.

La escritora chilena Isabel Allende, narra la historia de Inés de Suárez, en su novela.“Inés del alma mía”.


No hay comentarios:

Publicar un comentario