Tal día como hoy, el 4 de noviembre de 1576, los Tercios Españoles desataron su cólera sobre la ciudad de Amberes, en un episodio que la leyenda negra denominó, la "Furia Española"
Los antecedentes del saqueo de Amberes, se encuentran en el año 1575, año en el que se produce la segunda quiebra, de la Hacienda Real del Rey Felipe II. Esta realidad hace que los soldados de los Tercios Españoles, cansados de los impagos, se amotinen.
Los enemigos aprovecharon el momento y Guillermo de Orange, la figura que había firmado una orden, para degollar a los españoles y a todos los que les ayudaban, se movió con rapidez y entabló conversaciones, con gobernantes de varias villas para iniciar un levantamiento generalizado, contra los españoles.
De esta forma, en octubre de 1576, los holandeses rebeldes aparecieron en Amberes, dispuestos a rendir la ciudad. Los gobernadores locales traicionaron a los españoles, entregaron la villa y no solo eso, a continuación repartieron armas entre la población para sitiar la ciudadela, que todavía se encontraba bajo el poder de los españoles.
Unos 14.000 ciudadanos y 6.000 soldados iniciaron un asedio tal día como hoy de 1576 contra la pequeña fuerza defensora dirigida por Sancho Dávila.
El 3 de noviembre las tropas holandesas entraron en la ciudad, cuyos gobernadores les habían abierto las puertas, y tomaron posiciones para asaltar el castillo defendido por tropas españolas al mando de Sancho Dávila y Daza.
Los soldados de la tercios amotinados, que habían rehusado anteriormente obedecer cualquier orden, sin haber cobrado antes las deudas, al tener noticia del ataque, marcharon sin descanso en dirección a Amberes, para ayudar a los sitiados, llegando a la ciudad el día cuatro.
En lugar de las banderas del rey, para evitar profanarlas con su delito de rebelión, ondeaban imágenes de la Virgen María.
Al pedirles el resto de los miembros de la fuerza de auxilio que recuperasen fuerzas con algo de comida, replicaron orgullosos que: "Venimos con propósito cierto de victoria, y así hemos de cenar en Amberes, o desayunar en los infiernos".
Consiguieron entrar en el castillo y reunirse con otras unidades, que acudían desde diferentes lugares, a socorrer a Dávila. A pesar de que las tropas enemigas eran mucho más numerosas, los amotinados y la guarnición del castillo, se lanzaron al ataque por las calles de la ciudad, haciendo huir a los holandeses.
Algunos de ellos se refugiaron en el ayuntamiento, escopeteando con mosquetes a los españoles. Estos lo incendiaron, propagándose las llamas por la ciudad. Acto seguido, y debido al gran desorden, procedieron a saquear la ciudad durante tres días, contándose los muertos por miles.
Finalmente, los Tercios Españoles evitaron que los holandeses se hicieran con la ciudad. Más de 7.000 enemigos fueron masacrados y 800 casas de la ciudad incendiadas.
La indignación de las provincias y el Consejo de Estado por el saqueo no tuvo límites. El 8 de noviembre firmaron la pacificación de Gante, que exigía la salida de los soldados españoles de los Países Bajos, acuerdo que don Juan de Austria tuvo que aceptar para no perder totalmente el control de las provincias. Las tropas españolas saldrían de Amberes el 26 de marzo de 1577.
Con el saqueo de Amberes y la marcha de los tercios del ejército de Flandes, se perdió el fruto de diez años de esfuerzos, por parte de la corona, para recuperar el dominio de las provincias rebeldes.
Tropas rebeldes?
ResponderEliminarLas que defendían su tierra, su pueblo, su gente?
Saludos