Esta obra cruza bajo el canal de la Mancha, con una longitud de 50,5 kilómetros - 39 de ellos submarinos - siendo el segundo túnel submarino más largo del mundo, tras el de Seikan en Japón, con una profundidad media de 40 metros uniendo Francia con el Reino Unido y cuya travesía dura aproximadamente 35 minutos.
Obra maestra de la ingeniería, ha hecho posible el viejo sueño de unir las islas británicas con el continente europea de forma permanente.
Los automovilistas entran en los trenes de transbordo y pueden permanecer en sus vehículos o pasear mientras lo cruzan y los camioneros son trasladados al vagón club, donde tienen asientos y un servicio de catering.
Como los gobiernos británico y francés se opusieron a la financiación pública del proyecto, este fue costeado enteramente por sociedades privadas sin intervención estatal, con un costo de 16.000 millones de euros largamente superado, a cambio de la concesión de su explotación hasta 2052.
La demanda ha sido menor de lo previsto, que se cifraba en 30 millones de viajeros y 15 millones de toneladas de mercancías por año, pero en en 2003 solo se transportaron 6,8 millones de viajeros y 1,5 millones de toneladas de mercancías.
Nunca se pensó que costaría tanto sacarle rentabilidad, pero esto fue debido a varias razones, la principal que se superaron todas las previsiones en gastos de construcción y en segundo lugar por la fuerte competencia de los vuelos de bajo coste, que le han restado muchos pasajeros.
En el 2007, la compañía estuvo a punto de quebrar, pero ahora parece que comienza a dejar atrás los números rojos, aunque ha sido necesaria otra nueva inyección extraordinaria de millones para salvarla de la bancarrota.
Actualmente, el túnel es explotado por la empresa franco-británica Eurotunnel y en el año 2013 alcanzó un volumen de facturación de 1090 millones de euros, sobrepasando por primera vez la cifra de 1000 millones, sin haber dejado desde entonces de crecer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario